Capitulo 12

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Las nubes sobresalían con un aspecto oscuro y grueso, los truenos en el cielo se manifestaban como fuertes rugidos; una gran tormenta estaba a punto de caer. Durante el camino de regreso al campamento Bellamy y yo no pudimos evitar cruzar unas cuantas miradas, podía sentir miles de mariposas en el estómago cada que veía sus ojos marrones brillar con la luz del día.
Cuando cruzamos la entrada del campamento tuvimos una inesperada bienvenida, Clarke fue la primera en recibirnos con un cálido abrazo, pero en seguida fruncí el ceño al notar a una chica desconocida junto a ella, vestía una chaqueta roja y una coleta castaña alta, pero lo que más me llamaba la atención de ella eran sus grandes ojos.
—Ella es Raven— comentó Clarke —llegó a la tierra en la cápsula—
—Es bueno ver rostros nuevos por aquí— trate de sonar lo más amigable posible —yo soy Susan—
—Clarke me contó sobre ti— respondió la chica con simpatía —creo que nos llevaremos bien—
—Eso espero— le dije a Raven con una sonrisa —y bienvenida a la tierra—
Las tres nos dirigimos a la nave antes de que cayera la lluvia, pero me detuve de prisa al escuchar que alguien grito mi nombre, miré hacia atrás y mantuve mi mirada perpleja al ver a Bellamy
—Luego las alcanzó— le señalé a Clarke y a Raven.  Me acerqué al chico con ligeros pasos hasta que lo tuve de frente
—¿Qué pasa Bellamy?—
Él tomó mi mano y me llevo sin previo aviso a las afueras del campamento, avanzamos entre los grandes árboles durante unos minutos mientras que la intriga me dominaba cada vez más.
—¿A dónde me llevas?— le pregunte a Bellamy esbozando una pequeña sonrisa
—Ya falta poco— enunció él con ilusión
En seguida empezamos a subir una pequeña colina mientras que unas pocas gotas comenzaban a caer. Cuando resbale con un charco de lodo, Bellamy me sujeto con más fuerza y me ayudo a recuperar el equilibrio.
En cuanto llegamos a la cima de la colina nos paramos al borde de un barranco y al mirar más allá no pude evitar quedarme atónita
—Es precioso— dije casi sin aliento
El paisaje mostraba a los rayos de sol darse paso entre las densas nubes, el terreno bajaba en picada hacia un reluciente lago en cuyo fondo se reflejaban las montañas que lo rodeaban, mientras que el viento ofrecía un aroma más embriagador. Yo me volteé a mirar a Bellamy y al ver sus ojos marrones, sus rizos alborotados y su brillante sonrisa me di cuenta de que no había mejor paisaje que él
—Cierra los ojos— ordenó Bellamy delicadamente.
Eso hice y unos segundos después un cosquilleo me recorrió cuando las manos de Bellamy rozaron mi cuello y en seguida sentí una fría cadena reposando sobre mi piel —bien, ya los puedes abrir—
Abrí los ojos y miré el dije que colgaba de la cadena, me di cuenta de que era el collar que creía haber perdido. La lluvia comenzó a caer, una gota tras otra. Bellamy solo se acercó despacio y me beso con delicadeza, yo cerré mis ojos y dejé que mis labios expresaran todo aquello que me sentía incapaz de decir. La lluvia empapaba nuestro cabello y nuestra ropa pero eso no nos importó, nosotros solo quedamos perdidos en ese necesitado beso. Bellamy se hecho hacia atrás y tomó una de mis mejillas mientras me miraba a los ojos
—Tu me importas Susan. Jamás dejare que algo malo te pase— susurró el chico y me devolvió el beso con más intensidad.

•••

Regrese al campamento con una enorme sonrisa, se me hacían mariposas en el estómago cada vez que recordaba la sensación de sus labios junto a los míos. Bellamy no había regresado con migo a la nave, me había dicho que tenía un asunto que arreglar pero no entendí muy bien a qué se refería. De un momento a otro Clarke se acercó a mi en cuanto me vio pero pude notar en su rostro que estaba afligida
—Volviste— dijo Clarke intentando hacer una sonrisa —¿qué era lo que quería Bellamy hace un rato?—
—Nada— respondí evitando su mirada
—Susan, no trates de mentirme— enunció Clarke —soy tu amiga, puedes confiar en mi—
—Esta bien— dije en tono emocionado —pero debes prometer no decirle a nadie—
—Lo prometo—
Rápidamente la tome de la mano y la lleve a el rincón más aproximado de la nave para evitar que alguien más escuchara
—Bellamy me beso— dije casi en susurros
—¿Qué? ¿hablas en serio?— preguntó Clarke asombrada. Yo asentí —¡cuéntame! ¿cómo te hizo sentir?—
—Como si cualquier cosa fuera posible—
—Me alegro por ustedes— confesó Clarke con una sonrisa
—Oye ¿cómo van tu y Finn?— ella de inmediato borró su sonrisa y agachó la mirada —Clarke ¿que pasa? ¿todo está bien?—
—No— dijo mientras dirigía su mirada a Raven que se encontraba arreglando el radio —solo fue algo pasajero—
—¿La chica nueva tiene algo que ver?—
—Raven... ella y Finn tienen una relación desde hace tiempo— dijo con la voz entre cortada
—Clarke yo... lo siento mucho— le dije mientras acariciaba su brazo —dime si puedo hacer algo para ayudar—
—Nada— Clarke advirtió una gota de amargura en su voz —tenemos que priorizarnos en contactar al Arca y hacerles saber que estamos vivos—
Nos dirigimos hacia Raven para ayudarle con el radio, éste estaba en las frecuencias correctas pero sin embargo parecía que nadie recibía los mensajes que transmitíamos
—Habla Raven Reyes, llamando a la estación Arca, por favor contesten— las palabras de la chica se repetían una y otra vez con la esperanza de recibir alguna respuesta —Llamando a la estación Arca ¿alguien puede oírme?—
—Este es un canal restringido por favor identifíquese— Por fin una voz robótica se manifestó a través de la radio
—Soy Raven Reyes, estoy transmitiendo desde el suelo— respondió la chica entusiasmada —los 100 están vivos—
De repente, un llamado procedente de la entrada de la nave se interpuso en nuestra conversación, era el de una chica informando la llegada de los chicos. Clarke y yo nos acercamos a la entrada para recibirlos y darles la nueva noticia pero en cuanto los veo entrar, mis pies se quedaron pegados al suelo, mi corazón se aceleró y mi sangre se heló ya que llevaban con ellos al terrestre que nos secuestró a Octavia y a mi.
—Bellamy ¿que estás haciendo?— Octavia preguntó confundida mientras se paraba junto a mi
—Necesitamos respuestas—
—O venganza—
—Octavia tiene razón, nosotros no somos como ellos— le dije a Bellamy dando un paso al frente
—Ahora lo somos— respondió el chico con tono molesto mientras se llevaban al terrestre al último piso de la nave.

In my way |los 100| (Bellamy Blake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora