Capítulo 8

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Cuando Hernán despertó Andrei seguía dormido y estaba abrazado de su brazo, podía sentir su respiración contra su hombro y la cercanía de sus labios al mismo le estaba haciendo sentir algo nuevo y agradable en el estómago. Su rostro se veía más sereno que la noche anterior, pero podía notar bajo sus ojos y en las marcas rojizas en su cuello, las secuelas de lo que había pasado.

Tenía la imagen de Mateo sobre Andrei en la cama mientras este murmuraba que lo dejara viva en su memoria y sólo esperaba que el alcohol hiciera su trabajo y además del obvio dolor de cabeza que tendría, pudiese olvidar los detalles de lo que había ocurrido.

Se sentía terrible por haber dejado que los celos que sintió al verlo con el otro bailarín le hicieran creer que eso era lo que el castaño quería cuando claramente Andrei estaba fuera de sí, y el pensamiento de lo que podría haber pasado si no hubiese entrado en esa habitación le revolvía el estómago y lo hacía desear ir donde Mateo y ponerlo en su lugar.

En un golpe de osadía, llevó las yemas de sus dedos al borde de su mejilla y la delineó con cuidado de no despertarlo, le retiró el cabello que caía sobre su rostro cubriendo sus ojos para poder observarlo mejor y se detuvo cuando las ganas de tocar sus labios se hicieron demasiado intensas. No quería aprovecharse de la situación, y tocarlo mientras dormía no era adecuado, aunque fuese un toque tan inocente.

Andrei despertó pasado el mediodía. Abrió lentamente los ojos y apretó con un poco más de fuerza el brazo de Hernán al sentir el dolor punzante en su cabeza. No supo de inmediato donde estaba, pero el rostro del moreno lo saludo de inmediato, regalándole una sonrisa. Andrei lo miró algo sorprendido buscando en su cabeza la explicación de porque estaba ahí, en la cama de Hernán, pero sólo fragmentos de la noche anterior llegaban a él, sin embargo no se sentía asustado, sólo desorientado.

- Buenos días - le dijo Hernán con la voz suave al notar su confusión, Andrei jamás había soltado su brazo y estaba claro que estaba sintiendo los efectos del alcohol - ¿estás bien? esto no es lo que parece, si es lo que estás pensando...

- Hola - le respondió dejándolo ir y reconociendo que la ropa que llevaba puesta no era suya - siento que me va a explotar la cabeza... ¿por qué estoy acostado contigo?

- ¿No te acuerdas de lo que pasó anoche?

- Fragmentos...

- Bueno, nada pasó entre nosotros, sólo dormimos.

- El tequila siempre me manda a la mierda - le dijo cubriéndose los ojos - me acuerdo que tomé harto en la fiesta y que bailé con Mateo...

Hernán se tensó al escuchar ese nombre y le quitó la mirada a Andrei mientras este unía mentalmente esos fragmentos que comenzaban a llegarle. A pesar de haber despertado en su cama sin tener idea como había llegado ahí, estaba tranquilo, lo que le hizo recordar sus palabras la noche anterior cuando le pidió ayuda para desvestirse,"confío en ti".

- Mateo quería conmigo anoche... me intentó besar en la fiesta pero le dije que me sentía mal, así que se ofreció a llevarme a la pieza - el castaño le dirigió la mirada, armando más piezas del rompecabezas.

- ¿Lo recuerdas?

- Un poco... recuerdo que me dejó en la cama y comenzó a besarme y después que le dije que no quería hacerlo... y a ti sacándomelo de encima.

- Eso fue más o menos lo que pasó...

- No se estaba deteniendo ¿cierto? - Hernán miró en la dirección contraria al castaño para que no pudiese ver lo enojado que estaba y negó con la cabeza, Andrei soltó un bufido molesto al verlo - puta el conchesumadre... bueno, culpa mía igual por curarme tanto.

Caminos cruzadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora