Capítulo 20

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Hernán apretó la mano de Andrei al notar que este se había congelado al ver la escena, no reaccionaba y no podía quitar la mirada de la celebración que se llevaba a cabo frente a sus ojos; el moreno se acercó más tomándolo de la cintura para hacerlo volver en sí, buscando su mirada y encontrándola brillante de lágrimas.

- Amor...

- Vamos a la habitación - le respondió el cantante tirando nuevamente de él hasta que llegaron al lugar y se encerraron en él, Hernán no dudó en abrazarlo por la espalda, descansando su cabeza en su hombro y sosteniéndolo fuertemente, Andrei estaba apretando la mandíbula y lo sentía tragar fuerte como hacía cuando estaba conteniendo las lágrimas, el moreno comenzó a besarlo en el cuello y la nuca, porque sabía que eso le gustaba y tranquilizaba y luego de un par de minutos sintió las manos de Andrei acariciando las suyas - estoy bien... sabía que podía pasar, éramos 4, habían más probabilidades de que no me eligieran a que lo hicieran... 

- Sé de las probabilidades, pero no tienes que hacerte el fuerte conmigo, está bien si te sientes triste... - Andrei se giró en sus brazos dándole la cara, dejando caer unas silenciosas lágrimas que el moreno limpió con sus pulgares, Andrei lo merecía tanto que la imagen le estaba partiendo el corazón.

- Estoy algo decepcionado... un poco triste, pero no me siento cómo pensé que lo haría si no lo lograba, estoy feliz también... estoy feliz por ti y quiero celebrarte.

- No tenemos que hacerlo ahora, podemos tendernos en la cama y regalonear un rato.

- Enserio estoy bien, quiero hacer esto, no quiero quitarte tu momento de felicidad porque yo no lo conseguí... el sueño de tu vida ahora está en tus manos, la champaña en tu closet es lo mínimo que podemos hacer ahora...

- Te amo.

- Y yo te amo a ti...

Andrei tenía todo pensado, destaparon la champaña y la sirvieron en los vasos que el castaño había comprado esa tarde que se había reunido con su madre, tenía también bombones y galletas y varios tipos de golosinas, las comieron en la cama, sentados junto al otro, abrazándose a ratos y compartiendo besos. Andrei se subió al regazo de Hernán y se quitó la camiseta para comenzar a besarlo, Hernán lo abrazó y siguió de inmediato, sentía que el castaño necesitaba ese confort y él quería dárselo, hacerlo sentir bien por un momento para que olvidara todo respecto a esa carta.

Le hizo el amor lento, acariciándolo por todo el cuerpo y le dio lo que él pedía. Se desplomaron sobre la cama exhaustos, enredados en el otro y con el corazón acelerado, Hernán lo abrazó contra su cuerpo sintiendo como un par de frías lágrimas caían sobre su piel aún caliente, le acarició la espalda conteniendo su propio llanto, porque así como su felicidad era la de Andrei, la tristeza de él también era propia.

- Está bien amor... llora todo lo que quieras...

- No es la producción... - le respondió Andrei con un sollozo - intenté no pensarlo y estaba funcionando pero ahora... es real, ya se nos acabó el tiempo... tenemos los días contados...

- No pienses en eso por favor...

- Tengo que hacerlo - le dijo levantando la cabeza - no podemos seguir haciéndonos los hueones, siempre supimos que este momento iba a llegar, y llegó... que evitemos hablarlo no lo va a hacer desaparecer.

- ¿Dónde quieres llegar con esto?

- No lo sé... - le dijo llorando - lo siento, de verdad no quiero arruinar este momento, quiero que lo disfrutes y lo celebres... pero tenerte así... me hizo pensar que pronto ya no podré tenerte de ninguna manera...

- ¿Tiene que ser tan definitivo? podemos hacerlo funcionar...

- Te vas a Nueva York y yo me quedo aquí.

Caminos cruzadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora