Príncipe Ethan

Capítulo 11. Lo Siento

Capítulo 11.

Ethan.

— Hemos llegado Alfa.

Asentí y dirijo mi vista a Ana. Ya hace dormida en el asiento con su cabeza reposando en la ventana. Decido no despertarla. Rodeó el auto y abro su puerta, paso un brazo por debajo de sus piernas y el otro por su cintura. Camino a paso lento hacia nuestra habitación.

Abro la puerta con un poco de dificultad, pero igual logro entrar. Camino hacia la cama y pongo a Ana en esta. La acomodó y la cubro con las sábanas, me acerco y dejo un rápido beso en sus labios.

No pasa nada, no lo recordará.

Me empiezo a desvestir ya que llegamos a las 1am y quiero bañarme.

Ya en el baño pienso en el problema que tengo con Emily, mi prima. Así que cuando termino de bañarme y vestirme ya son las 1:40am, decido llamarlo sin importarme si esta despierto o no.

Un tono, dos tono, tres tonos..

— ¿Qué mierda quieres Ethan...

— ¿Hiciste lo que te pedí? —lo interrumpo. Dura en contestarme y me desespero— te hice una maldita pregunta. —gruño, no me gusta que me hagan esperar.

— Si joder. Todo está listo cuando vuelvas. —dice adormilada— ¿cuando vuelves?

— No lo se. Estoy esperando arreglar las cosas con Ana. —digo mirándola por un instante por si estaba despierta, pero sigue durmiendo.

— ¿Y cuantos años piensas que va a tardar eso? —dice burlona.

— Los mismos años que vas a tardar en, encontrar a tu mate—digo sonriendo, ella suelta un "no bromes con eso"— ni tú tampoco. —le gruño molesto— solo espera mi llamada.

— El té está dando tres meses Ethan, si no arreglas las cosas, ven solo.

Asiento sabiendo que ella no puede verme. Cuelgo y me dirijo a la cama, me meto en ella y me cubro con las sábanas, estoy cansado.

Hoy tengo que arreglar las cosas con Ana, no quiero estar así siempre con ella.

Quiero saber todo sobre ella, su historia, sus miedos, sus gustos.

Quiero su amor.

Se que he cometido errores y espero que me perdone, porque no sabría que hacer si no.

¯

Horas después.

Dormí toda la mañana y un poco de la tarde, estaba cansado. Me levanté hace unas horas para ir a mi despachó y hacer el trabajo que me corresponde como Alfa.

Pienso en ir a buscar a Ana y así poder hablar. Cuando me desperté me sentía tan cómodo durmiendo con ella, rodeándola con mis brazos, mientras ella ponía sus manos en mi pecho. Cuándo despertó me miro y inmediatamente se apartó.

Eso me molestó, pero lo deje pasar. Estaba tratando de terminar estos informes de los nuevos integrantes que se incluían en la manada. Cuando termino, dejo todo organizado y salgo por la puerta, cerrando la misma.

Voy en busca de Ana y me desespero al no encontrarla de inmediato.

— ¿Has visto a Ana? —pregunto a Isabel cuando la veo bajar por las escaleras. Ella asiente y me dice que está en la biblioteca. Camino hacía allá a paso firme, decidido en lo que diré.

Cuando por fin llegó la veo sentada en unos de los sillones que están al frente de la chimenea, con un libro en sus manos, leyendo tan concentrada que ni siquiera me ve cuando me siento en la mesa frente a ella.

— Ana. —la llamó, ella sorprendida me mira y me da una sonrisa de labios cerrados.— te estaba buscando para que hablemos.

— Está bien. —dice cerrado el libro y dejándolo a un lado de ella.

— Quiero arreglar las cosas Ana. —voy directo al punto— ya no quiero estar así contigo, no lo soporto. —confieso, ella me mira atentamente— no quiero que te sientas obligada al estar conmigo. Quiero que te sientas libre, libre te contarme tus cosas. Quiero saber todo sobre ti, tus gustos, tus miedos, tu historia..., —ella abre la boca para hablar y continuo callandolá— quiero un futuro contigo, joder, quiero pasar todo el tiempo posible juntó a ti. Quiero crear una historia de amor contigo, una historia que no tenga un final. Solo di que sí.

— No Ethan. —dice mirándome distante— yo no quiero una historia de amor contigo. Me lastimaste, me golpeaste, me humillaste y me trajiste encontrá de mi voluntad, sabiendo demás lo que tenía con Logan, aún así no te importo. —dijo con rabia en su voz y solo asentí bajando mi cabeza, sabiendo que ella tenía razón.

— Perdóname, sé que no te lo he puesto fácil —dije y solo me miraba—y entiendo si necesitas tiempo para sanar y tener tu espacio. Entiendo si tengo que esperar por ti, y lo haré. —dije con determinación, seguro de mis palabras, ella permaneció callada, neutra.— esperaré, y cuando estés preparada para mi, yo estaré preparando para ti.

Me acerqué y dejé un beso en su mejilla.

<< Fue lo mejor. >>Escuché a Jason decir por lo bajo.

<< Lo sé.>>

–

🌎🚶🏻‍♀️.