Aferrarme a ti [Trilogía murderous family I] ✔

🔰Capítulo 14: ¿Padre?🔰

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🔰Nathalie🔰

—Matias...— dejo de besarlo y me siento en la cama.

No puedo hacer esto.

No debería.

—¿Qué pasa?— se sienta a mi lado y pasamos miradas.

—Esto no debería de estar pasando.

No tenía que pasar.

—¿Por qué?— pregunta.

Qué lindo se ve diciendo eso.

—Porque...— me levanto de la cama y camino hacia la puerta—. Porque no sentimos nada.

Yo y mi bipolaridad al 100%.

—¿Quieres hablar?

—No, buenas noches.

Digo eso y salgo de ahí con prisa. Me encierro en mi habitación y me dejo caer en la cama boca abajo.

Ahora mismo siento cosas en el corazón, no puedo seguir repitiendo esos besos sin ningún significado. Necesito ser yo o seguiré sintiéndome rara. Sé que dije que lo odiaba, pero siento que ya no. No lo soporto por momentos, eso es claro, pero aún existe ese "pero" que cambia las cosas.

Es como una historia cliché de Wattpad.

La familia de Matias está llena de mentirás; él nunca fue a un internado, su madre murió al igual que su abuela cuando él ya estaba un adolescente, su padre y su media hermana nunca murieron y yo, yo sé quién es ese hombre y no se lo dije.

No creo aguantar.

Creo que para decirle al padre de Matias como es él no tengo que pasar momentos con él. Ya lo conozco lo suficiente y no quiero conocerlo más.

Quiero reposar de todo esto. Mi vida era tranquila cuando ese torpe no estaba. (Debería largarme de aquí por unos días) y sí, eso haré. Me iré mañana mismo a un Hotel. Sé que Sofi lo soportará, él no le puede hacer nada ya que está embarazada y es la novia de su mejor amigo.

Pero creo que irme a un Hotel no será suficiente ya que el buen torpe estudia en el mismo instituto que yo. Así que también tendré que evitarlo allí, estamos en dos clases juntos: eso es una pesadilla.

........

Estoy en el baño dándome una ducha mientras canto *when the party's over de Billie Eilish*, no muy alto para que no se despierten y me impidan irme.

Salgo de la bañera y apago la música para luego salir y vestirme. Son las seis y media, muy temprano, pero pretendo salir a las siete, muy temprano para que no pregunten.

Y para qué no me detengan.

Para vestir, me puse algo que me gusta mucho; una falda suelta negra, unas botas con plataforma, unas blusa corta azul que no pasa más abajo de la cintura de la falda y un gorro azul.

Me encanta este vestuario.

Termino de empacar mi pequeña maleta con todo lo que necesitaré en estas dos semanas.

Ya son las siete y trece y estoy bajando la escalera con algo de delicadeza para no hacer ruido. Al terminar de bajar llego a la puerta y cuando la abro me quedo sorprendida por la persona que está a punto de tocar la puerta.

Es Enzo.

El chico de la feria.

Está vestido con una bermuda de color crema, tenis Nike negros, medias blancas y largas, un abrigo blanco y negro, y en su hermosa cabezota una gorra blanca.