Kara y Lena llevan seis años casadas y tienen una hija en común. Pero Kara ha cometido algunos errores que han traido consecuencias Terribles.
Ahora, Kara tendrá la oportunidad de cambiar el pasado y corregir sus errores. ¿Podrá hacerlo?
Dos días después, íbamos de camino al hospital. Teníamos cita con la doctora Lane para una nueva ecografía. Si había suerte, podríamos saber el sexo de nuestros bebés.
Le pedimos a Mike que nos llevase. Tuvimos que esperar a que pasaran tres parejas antes que nosotras.
-Lucy: Buenos días...- dijo cuando entramos.
-Lena: Buenos días.
-Lucy: ¿Cómo se encuentra, señora Luthor? – preguntó, mirando a Kara.
-Kara: Bueno, siento una especie de cosquilleo...
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-Lucy: Es normal. Son sus hijos girando en su vientre.
-Kara: ¿Sí...? ¿En serio? Vaya, eso no me pasó con Katie.
-Lucy: Seguramente sí, pero no lo notaría tanto como ahora con dos. O tal vez, su hija era más tranquila. ¿Algo más? ¿Mareos, jaquecas, calambres, acidez...?
-Kara: De vez en cuando. Los calambres sobre todo por la noche o cuando estoy sentada mucho tiempo.
-Lena: ¿Todo eso es normal? – dije, cogiendo la mano de Kara.
-Lucy: Muy normal, no se preocupe... Bien, vamos a ver si se dejan ver. ¿quieren saber lo que son?
-Lena: Sí...
-Lucy: Bien, señora Luthor, túmbese.
-Kara: Kara...
-Lucy: ¿Cómo?
-Kara: Puede llamarme Kara...
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-Lucy: Bien, Kara, entonces puedes llamarme Lucy. Túmbate y levántate la camiseta.
Ayudé a Kara a levantarse la camiseta y a tumbarse. Volví a coger su mano. Le sudaban las manos, estaba nerviosa.
-Lena: ¿Estás bien, cariño?
-Kara: Sí...
-Lucy: Bien, empecemos. – dijo, echando el gel sobre el vientre de Kara y empezando a mover el aparato. Poco después, pudimos ver claramente a nuestros bebés.
