Pov. _____.
Sentí que algo cayó sobre mi mejilla.
Llevé mi mano a esta y la sentí húmeda, alzé el rostro solo para mirar al chico sobre mí.
Cerraba sus ojos con fuerza tratando de evitar que las lágrimas saliesen de estos, no lo había logrado por completo.
¿Pero que estoy haciendo? ¿En serio pretendo abandonar a este chico? Si, eatoy molesta por sus decisiones y las de Nike, pero no puedo hacer algo como esto.
Yo...no puedo seguir negando mis sentimientos.
Llevé mis manos hasta el rostro del rey del Sol y las posicioné sobre sus mejillas.
Con delicadeza utilizé mis pulgares para limpiar la humedad de sus ojos.
Livius abrió sus ojos y me miró, apenas y logré distinguir sus facciones, pues lo único que iluminaba el sitio era una pequeña lámpara no muy lejana.
_____: Ya...no llores más - expresé - Yo...no me iré, me quedaré aquí...contigo - terminé de decir.
El me miró unos segundos y guardó silencio. Se sentó sobre mis piernas e hizo que me enderezára, me envolvió en un aferrante y posesivo abrazo.
Me abrazo tanto con brazos como con piernas.
Escondió su rostro en el hueco de mi cuello y se quedó así.
Correspondí a su abrazo y con una de mis manos comenzé a sobar su espalda.
Livius: Gracias - le escuché no muy claro - Gracias por decirdir quedarte a mi lado - asentí mientras sentía como su agarre se hacía más fuerte.
_____: ¿Sabes? Es más de media noche y ambos estamos en el jardín, a oscuras, abranzandónos, deberíamos estar durmiendo - comenté.
Livius: Este era un momento de debilidad y lo arruínas con tus palabras - comentó mientras me soltaba y se ponía de pie.
Me tendió su mano para que me pusiesé en pie, no negué en aceptar su gesto y hacerlo.
Sonreí y solté su mano para recoger mi maleta y algunas otras cosas que se habían esparcido por la dura caída.
_____: ¿Por donde saliste? - le cuestioné mientras comenzabámos a caminar através del jardín.
Livius: Salté por tu ventana cuando me dí cuenta de que habías escapado de nuevo - comentó serio - Entremos de nuevo por ahí - asentí.
Ambos nos dirigimos hasta la que era mi habitación y dado a que la ventana seguía abierta, entramos por el sitio.
Dejé mi maleta junto a la cama, ya sacaría las cosas el día de mañana.
Me senté sobre el colchón y miré al rey del Sol.
_____: ¿No piensas ir a dormir? - cuestioné al ver que no tenía intensión de moverse, el asintió.
Le miré darse la vuelta por lo que me quité los zapatos y entre a las sabánas de la cama, escuché la puerta cerrarse.
Me giré viendo hacia la ventana para dormir en aquella posición, cuando de repente sentí como el colchón a mis espaldas se hundía levemente.
Sentí unas manos posarse en mi abdomen, se abrazaron a mi y sentí el cuerpo de la persona pegarse al mío.
_____: Me parece que tu también tienes una habitación - comenté tomando el par de manos que me sujetaban.
Livius: Me quedaré aquí en caso de que te arrepientas de tu decisión - musitó.
_____: Seré como soy, pero nunca me echaría para atrás en mis decisiones - informé - Que duermas bien, Livi.
Livius: Estoy seguro de que lo haré...
(...)
Bard: Con que aquí está - escuché decir al hombre, por lo que abrí los ojos con pereza, a su lado se encontraba mi prima y pronto Neil apareció en la puerta.
Neil: Menos mal, pensé que ya lo había perdido - expresó mientras tomaba una postura recta y se ajustaba la corbata.
Nike: Buenos días - saludó mi prima mientras me miraba con una sonrisa burlona, cerré los ojos con pesadez.
_____: Buenos días - respondí de vuelta.
Ella se acercó hasta la cama y apartó la sabána, luego suspiró.
_____: ¿Qué pasa? - pregunté confundida.
Nike: Nada, solo me aseguraba de algo - comentó - En fin, ¿Porqué vistes de negro?
_____: Oh, es solo que se murieron mis ganas de escapar de aquí - bromée - ¿Qué hacen todos aquí? - les miré.
Bard: Neil no encontraba a Livius por ningún lado, así que comenzó a entrar en pánico, por lo que Nike y yo decidimos ayudarle, tu prima sugirió que viniesémos aquí - explicó con simpleza, asentí para dar a entender que comprendía.
Neil: ¿Qué hace el Señor Livius durmiendo aquí? - preguntó.
Livius: ¿No puedo? - escuché su pregunta cerca de mi oído, por su voz se qué lleva despierto hace tiempo, de lo contrario su voz sería más ronca.
Neil: N-no, no es eso, es solo que creí que había desacuerdos entre ambos y verlo aquí me pareció extraño - habló rapidamente.
Bard: Bueno, ¿Se van a levantar o no? - se cruzó de brazos y nos miró a ambos.
_____: Agh...te odio - expresé mientras me escapaba de los brazos del peliazul a mis espaldas.
Neil: Señor Livius, agradecería que viniese conmigo, hay asuntos que debe resolver.
Livius: Espera un poco Neil - el hombre asintió y se giró hacia Nike, Bard y yo.
Neil: El día de hoy tendremos una visita no planeada - comentó.
Bard: ¿Quién viene? - no se tardó en preguntar.
Neil: La príncesa Amaluna Luirasael - y tras decir aquello, salió del lugar.
_____: ¿Quién es esa? - pregunté en voz alta esperando que alguno de los tres presentes me respondiése.
Nike: Una pequeña enana.
Bard: Un pequeño fastidio.
Livius: Una amiga de la infancia - parpadée un par de veces y miré a todos - Es una vieja amiga de la infancia - se acomódo la ropa - Creí que tu rivalidad con ella había quedado en el pasado - le comentó a Nike - Y tu no eres quién como para decirle fastidio a ella, solo miraté - reí por sus palabras.
Nike: Pero no deja de molestarme - expresó cruzandóse de brazos para salir de la habitación.
Bard: Me considéro un fastidioso agradable - habló este otro mientras salía de la habitación indignado.
Reí por las acciones de los dos mayores.
Livius: Talvez quieras vestir algo más femenino - se acercó a mí.
_____: Me siento comóda así - expresé.
Livius: Si, pero usar un vestido te ahorrará alguno que otro problema con Luna, porque es cierto eso de que es un fastidio - comentó con un pequeño toqué de gracia - Entre más defectos te encuentré, mucho más te hará la vida imposible, en especial si se trata de mi futura esposa.
_____: Pues no me importa, también soy una princesa y nadiepuede hacerme sentir menos - declaré - Anda, ve con Neil, no quiero que de nuevo estén todos en mi habitación - le dí la vuelta y lo dirigí hacia la puerta - No te excedas en tus labores, recuerda que aún eres joven, ¡Disfruta la vida! - dejé un beso en su mejilla.
Livius: Bien, tu recuerda comer a tus horas, como tu salud vuelva a recaee te irá mal - le resté importancia a sus palabras - Nos vemos luego - y finalmente se marchó.
Me dí la vuelta y miré mi habitación.
Debo recoger todoe ste desastre y buscar un vestido que ponerme, no es que quiera caerle bien a la tal Luna, es solo que odio las piedras en el zapato.
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Compatibles (Livius y Tu)
Short StoryPara _______ Lemercier. "Solo ven" - Nike Lemercier. Reino del Sol.