Más A Profundidad

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El joven Aristoteles se encontraba caminando aun por el parque de la mano de su novia Yolo, ambos comían su cono de helado, la chica tenía un helado de fresa y el rizado uno de vainilla

Yolo: Amor deberías de probar el de fresa esta muy bueno

Ari: No Yolo gracias, tú sabes perfectamente que no me gusta el de fresa

Yolo: Pero a mí sí, y me gustaría que a ti y a mí nos gustaran las mismas cosas -Recarga su cabeza en su hombro-

Ari: Mira Yolo no te molestes pero que hueva que nos guste lo mismo ¿No lo crees? A mí me encanta el de vainilla y no quiero otro

Yolo: Bueno ya que, pero hay otras cosas que nos pueden gustar a los dos ¿No crees?

Ari: ¿Como que? Por ejemplo

Yolo: Pues.... Hay algo en especial que me gustaría compartir contigo, y no sé, ¿Que dices si en lugar de ir al cine vamos a mi casa y tal vez....?

Ari: -Interrumpe- Yolo perdóname pero ESO aun no, todavía no me siento listo para dar tan importante paso en nuestra relación

La verdad es que Aris nunca se ha sentido listo para nada relacionado al tema de las relaciones sexuales. No quería ni saber nada del amor y menos del sexo, no sabía porque, pero nunca le había llamado la atención; Y menos con Yolotl Rey, ni de loco tenía pensado perder su virginidad con esa chica

Yolo: ¡¿Por que no Aristoteles?!

Ari: Ya te dije Yolo no me siento preparado para algo así, y por favor no vayas a armar una de tus escenas aquí en medio del parque

Yolo: -Respira profundo- Esta bien Ari me voy a relajar, pero ya llevamos meses de novios y nomás no hay nada, ¿Que? ¿Acaso no puedes?

Ari: Ay no es eso Yolo, es sólo que.... 

Aristoteles se quedo un momento pensando en una buena excusa para decirle a la castaña, hasta que se le ocurrió el pretexto perfecto

Ari: No quiero que lo nuestro pase sólo por simple calentura, quiero que sea porque los dos queramos y porque nos amamos

Yolo: Ay mi amor que dulce eres, por eso te amo -Lo besa y lo abraza- Esta bien, será cuando te sientas listo, y mejor aun, podremos planear algo más romántico y sólo para que los dos lo disfrutemos ¿te parece?

Ari: -Sonríe de lado- Sí Yolo, me parece bien

Yolo: Bueno vamonos que ya se nos hace tarde para la función de las 4, y ya sabes que a mí me gusta ver los anuncios antes de que la película inicie

Ari: -Voltea los ojos- Sí lo se perfectamente

Yolotl tomó la mano de Aristoteles y lo jaló para llevarlo al cine. El joven rizado ya estaba harto de la compañía de la chica, no era que la odiaba, le caía bastante bien como amiga, pero como su novia era insoportable.

No había día en que no deseará poder ser libre, poder tomar sus propias decisiones y poder hacerle frente a su padre por primera vez en su vida.

Su tarde con la chica fue muy aburrida como todas las salidas y citas que tenía con ella. Pero algo raro sucedía aquel día, el chico castaño que bajaba de aquella mudanza no salía de sus pensamientos


Con Temo

La mudanza continuaba, sólo que la habitación de Temo fue la primera en ser acomodada y bajada del camión de mudanzas; Esto era para que el joven esperara en la tranquilidad de su habitación a que la mudanza terminará.

Cuatro Sentidos (Aristemo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora