Un recuerdo entre laberintos y mentiras [TERMINADA]

3.

Es mi sensación o no está agradando mucho esta continuación T-T

Cuando abrió los ojos una sensación de mareo lo aturdió y con esfuerzo logró sentarse en el sofá donde se encontraba, percatandose entonces que no se encontraba en un lugar conocido, para luego recordar lo que había sucedido antes de perder la consciencia.

Fue entonces que se percató de la presencia del alfa que le había quitado a los prestamistas de encima, antes de pedirle a uno de sus hombres que se lo llevara para él.

Sus ojos se abrieron de par en par y tuvo miedo. Demasiado. Su mirada era penetrante, fría y vacía. Como si en verdad no le interesara en lo absoluto no solo su presencia, sino todo lo que le rodeaba. Como si no tuviera vida alguna. Y lo asustó demasiado, tanto que sintió cómo la poca comida que había logrado digerir aquella misma mañana subía por su esofago, para terminar en la alfombra que adornaba aquel ambiente.

Y se asustó, llegando incluso a temblar de miedo al siquiera pensar qué le haría aquel alfa frente a él al haber arruinado aquella alfombra que debía de valer más que su propia vida.

Poco a poco levantó la mirada, viendo que el alfa no se había movido de su lugar, ni había hecho comentario al respecto. Simplemente lo observaba, ausente, con aquellos ojos grises extraños, parecidos a la plata líquida.

-La verdad es que no te parecen en nada a él -comentó entonces el alfa y suspiró con pesar, mientras se acomodaba a sus anchas en el sofá individual a un lado suyo.

Él se mordió el labio inferior, sin entender qué era lo que sucedía, pero con el suficiente miedo como para no llegar a preguntar ni dejar escapar palabra de sus labios.

El alfa entonces se levantó, sin quitar la mirada de él y llamó a alguien, percatandose de la presencia del asiatico a unos metros de ellos. El tal llamado Kenji asintió cuando el otro alfa le pidió algo y se fue, dejándolos solos. Fue entonces que el alfa dirigió su mirada hacia él.

-He visto que tienes marcas de mordidas, pero ninguna que pueda indicar un vínculo ¿te has unido a algún alfa?

El omega tragó fuerte, sin saber qué contestar y sin poder liberar su voz, así que optó por negar con la cabeza. El alfa asintió, como si estuviera pensando algo sumamente serio y él quería preguntar qué hacía allí y demás, pero no podía, no con las feromonas de aquel alfa por todos lados que parecían querer ahogarlo.

-¿Por qué no vas al baño y te lavas un poco, incluso siquieres puedes darte una ducha? -dijo entonces el alfa sin dejar de observarlo.

Lo miró con miedo, más aun así asintió con la cabeza y ayudado por el alfa, lo dejó en un baño completamente lujoso y que podía incluso ser igual de grande que su pequeño departamento.

-Estaré fuera preparando algo para comer -le dijo entonces y lo dejó.

Él observó cómo se marchaba y al dejarlo solo se dejó caer y comenzó a llorar.

¿Qué le harían? ¿Por qué aquel alfa era así de amable? ¿Qué había hecho? Se preguntó, hasta que no quedaron más lágrimas y decidió llevar a cabo las palabras del alfa, después de todo ¿qué otra opción tenía?

***

Observó cómo dos de sus hombres se ocupaban de quitar la alfombra que aquel omega había arruinado mientras preparaba algo rápido para darle al menor.