MULTIMEDIA: Coral
-Coral puedes dejar de observar a los humanos de una vez? Vas a conseguir que te vean- hablo mi padre.
-Un poquito mas porfavoor- exclamé.
Rodó los ojos y sonreí satisfecha.Me acerqué un poco al muelle de la casa a la que siempre nos acercábamos cuando le pedía a mi padre ir al exterior.
Era de una familia, tenían un hijo, calculaba que tenía 14 años, como yo, al que observaba siempre desde que tengo uso de razón.-Nos vamos ¡YA!- dijo mi padre mas cabreado que antes.
Yo quería seguir viendo como el niño jugaba con una cosa redonda, le daba patadas, no entendía como se divertía con eso.
Me introduje enfadada en el agua dando un fuerte aletazo al que al segundo me arrepentí de haberlo hecho.
Mi padre al darse cuenta se giró cabreado hacia mi y miro aterrorizado hacia arriba, me giré y vi al niño corriendo acercándose hacia el muelle.-Rápido tenemos que escondernos-
Y así pasó el tiempo hasta que el niño se canso de esperar.
-Estas castigada hasta próximo aviso, no podrás venir- gritó mi padre.
Le perdí de vista al segundo lo que significaba que:
1 estaba cabreado
2 tenía que llegar rápido a casaEra mayor pero cuando se enfadaba podía nadar hasta más rápido que yo.
*********
Al llegar a casa, lo único que quería era llegar a mi habitación. Estaba enfadada, muy enfadada, pero para mi mala suerte mi situación es graciosa para mis 6 hermanos , y ser la menor de todos no es nada bonito.
Nada más enterarse del cabreo de mi padre, Marina, la mayor vino nadando hacia mi como un torbellino y comenzó a rodearme mientras me lanzaba preguntas.
-En qué estabas pensando Coral?-
-Por qué esa extraña manía de perseguir humanos?-
-Te has enamorado de ese niño?--MARINA CALLATEEE!!!!- grité, había aguantado demasiado.
Se fue riendo.Intenté nadar hasta mi habitación pero unos grititos muy desagradables procediendo de la habitación de al lado me pararon.
Como no, Mar estaba ahí hablando con su mejor amiga Isla.
-Tía es que me encantaría cambiarme el color de aleta, el azul se ha pasado de moda, me gustaría una de otro color estoy harta- dijo Mar, obviamente no se había dado cuenta de mi presencia.-Tía pues mañana vamos de compras la verdad es que otro color te sentaría muy bien, el azul está muy visto- dijo su "mejor amiga".
Me aburrí tanto que me fui.
Recibí un fuerte empujón de Kai, supe que era el al ver su rubia melena, al darse cuenta del empujón que me dio me pidió perdón y siguió jugando con mi otros hermanos Merlín y Delfín, si, se nota que son gemelos solo por los nombres.
Por si es muy lioso la escala es así.
Marina, 19 años.
Kai, 18 años
Mar, 17 años
Merlín y Delfín, 15 años
Yo, 14 añosPrácticamente mi hermano favorito es Kai, es el más normal dentro de lo que cabe, ya que, Merlín y Delfín no paran quietos, Mar está todo el rato hablando de moda, es insoportable, y luego está Marina que no te deja casi ni respirar. Aparte Kai y yo somos dos gotas de agua rubios y ojos verdes, los demás son todos morenos de ojos azules así qué una acaba uniéndose más a Kai.
Finalmente llegué a mi habitación, por fin, tranquilidad.
Miré a mi alrededor. Las casas del fondo marino eran prácticamente iguales como las del mundo exterior. Aunque claro, no se como son en el interior.Observando todo me dormí.
*******
Alguien me despertó de mala manera, como no, era Kai nadando en círculos sobre mi cama, a veces podía ser muy infantil.
El seguía a su rollo nadando y no vio que me desperté, así que para reírme un poco conseguí provocar una corriente muy fuerte haciéndole caer al suelo, estalle en risas.
-Eso no ha estado bien Coral- dijo
-Créeme que si-
Finalmente el acabó también riéndose.-Oye Coral, porque estas aquí, normalmente estás en el muelle- habló.
-Papá me ha castigado-
-Oh, bueno yo te cubro si quieres ve-
-Te quiero te quiero te quiero te quiero- empecé a darle besos por toda la cara.
-Pero no te acostumbres eh- dijo entre risas.Prácticamente volé hacia el muelle.
******
Allí estaba él, el niño al que llevo observando toda mi vida, sentado al borde del muelle.
Quiero saber su nombre.
Voy a saber su nombre.Saqué mi cabeza y comencé a acercarme, el, al notar movimiento miró hacia abajo.
Como hipnotizado se lanzó al agua y se acercó a mi.
Me miraba a los ojos, atravesándome con sus ojos azules.-Cómo te llamas?-sonreí.
-Lucas- respondió incrédulo.
-No lo había escuchado nunca-
Se encogió de hombros.
-De dónde vienes?- preguntó el.
-Vengo del mar-Antes de que dijese algo un señor salió de la casa de Lucas, sin pensármelo dos veces huí de allí.
Huí de Lucas.
Huí del mundo humano.