El principe del océano en peligro.

episodio 46.

Alana

Escuchaba el constante y fuerte latir de mi corazón, mi respiración agitada y el miedo invadiendo mi ser hasta el tuétano. ¿Donde estoy?, ¿porque me siento tan aterrada?. Huele mal, como a animal muerto. Quiero gritar por ayuda pero mi boca sólo se abre sin emitir sonido.

¡Auxilio!, ¡ayuda!. ¡QUE ALGUIEN ME SAQUE DE AQUÍ!

-Ali, Ali. Calmate ,tranquila soy yo. Estoy aquí no te pasa nada fue un mal sueño, solo fue un sueño -me decía Yareth calmando mis nervios. Tenia la respiración agitada eh incluso estaba sudando... Pero verlo a él ahí, justo cuando mas necesitaba ver algo hermoso para sopesar las extrañas imágenes de mi pesadilla, no tenia precio.

Miraba a mi alrededor para asegurarme de no seguir en mi pesadilla, y respire hondo cuando confirme estar despierta. Me deje caer sobre la cama y respire hondo.

-ya pequeña, estoy aquí. Fue un mal sueño no es nada. -me susurraba cerca del rostro Yareth, mientras rozaba mi rostro con ternura.

De forma involuntaria, mi mano fue directo a acunar el rostro de Yareth. Su mirada brillaba como últimamente suele brillar cuando me mira. Como si mirara al paisaje mas hermoso del mundo... O tal vez eso soy para él. Un paisaje.

-¿que?, ¿no puedes creer tanta belleza? -comentó tratando de verse engreído. Sonreímos y le di un débil golpe en el hombro.

-mas bien no puedo creer que hicimos esto de nuevo -mire hacia otro lado, pero su penetrante mirada buscó la mía.

-¿que cosa? -replicó fingiendo incredulidad.

-no te hagas... Esto -decía mirando entre nuestros cuerpos desnudos. Pero su mirar me cuestionaba. -tu sabes de que hablo no hagas que la virgen te habla.

Se río y se acerco mas a mi cara -¿"que la virgen me habla"? -bufo -anoche me di cuenta que de virgen no tenías nada.

Lo mire con cara de pocos amigos y se volvió a reír.

-no mal intérpretes. Me refiero a que... Fuiste magnífica -el fuerte sonido de mi corazón volvía a resonar en mi pecho. Pero esta vez de buena manera.

Sentí mi cara arder. Y no era difícil saber que estaba roja cual nariz de payaso.

—¿porque te apenas? —me cubrí con mi colcha y el se reía mientas me descubría de nuevo la cara -eres tan linda.

-mas bien soy extraña. Una lesbiana que se acuesta con un chico que idiotez.

-no es una idiotez. Esto no, esto es de verdad. Tu y yo somos reales punto. -este chico me quiere muerta. Tanta dulzura y belleza en un solo ser humano... Era cosa de libros de ficción.

No podía dejar de tocarlo, este chico. Él simplemente no podía ser real. Pero lo era, estaba aquí y se entregaba en todos los sentidos sólo para mi.
Aunque... ¿Porque no puedo dejar de tener miedo?, ¿porque las dudas y los temores atacaban mi cabeza justo ahora?.

Tantas malas experiencias con respecto al amor me habían convertido en una persona miedosa eh insegura. Odio admitirlo pero creó que Nela tenia razón. Aveces soy una cobarde.

-deja de pensar así sobre ti misma quieres -intervenía Yareth serio -sabes que tu mente no esta a salvo conmigo. -se acerco mas a mi dándome un beso en la frente con una devoción y aprecio, que me dejaban sin palabras.

-¿que crees que sea esto? -inquiri tímida -tu, yo, todo esto.

-¿tu que quieres que sea?.

-no se. Pero lo que sea
... No deja de ser extraño para mi.