episodio 52.

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Palabras de nunca debí pronunciar.

Actos que jamas debí cometer.

Miedos que tuve que me negaba a enfrentar.

Fantasmas... De los me canse de huir...


Los recuerdos, las caras, las voces, las sensaciones. Todo sobre de mi de golpe y sin piedad de aplastarme. Cada sentimiento lo me llegaba al mismo tiempo. Miedo, amor,tristeza ,coraje, asco, decepción ,nostalgia. Todos y cada uno en la misma sintonía. Y aquellas caras y los sentimientos hacia ellas de un momento a otro.... Se fueron.









     El sonido de mi corazón era ensordecedor, tanto, que mis propios pensamientos eran mudos. No quería seguirle dando vueltas al asunto, no quería seguir respirando aquel extraño pero putrefacto aroma del lugar ,ni seguir sintiendo aquel temor frío...


     Desperté sobre mi cama de sobremanera, y grite con toda la fuerza que mis pulmones lograron soltar. Después de haberme incorporado de tal manera, me fui recostando poco a poco sobre mi cama ,como si no quisiera romperme a mi misma... Y tal vez así era.

       Di un parpadeo aun jadeando y mirando hacia todos lados. Estaba en mi cuarto, la tenue luz rojiza del sol se iba pronunciando sobre la esquina de mi pared, frida dormía perezosa sobre su almohadita, y yo sudaba de sobremanera. Suspire tranquila y mire hacia mi techo.


      Mi puerta se abrió de golpe, era Jacinta con una sartén en la mano. Relajo la postura cuando me miro tranquila sobre mi cama, suspiro y se puso la mano libre sobre el pecho.

         —¡Dios de mi vida!, almejita, pensé que te había pasado algo.


            —¿porque? —me reí un poco y ella puso un gesto serio que daba mas risa que miedo.

          —por el gritote que pegaste —cerro los ojos y en un gesto exagerado puso su mano sobre su frente —hasta sentí que se me había bajado la azúcar.


Reí de nuevo y esta vez me atacó con un almohadazo.

           —ya carambas, vienes a almorzar y haces tus deberes antes de irte a la escuela —cerro la puerta y desde mi cama, podía escuchar a mi mamá cantar en el patio como suele hacerlo todos los días.


   Respire de nuevo y Sonreí diciendo.


           —todo fue una pesadilla —respire de nuevo y me dispuse a levantarme.

              —¡Nela!

              —¡si mamá ya voy!


















                 

                   
                    ¿....?









No me odien ,se que fue muy corto pero tengo algo planeado para ustedes y obvio no les voy a decir.



Oopps, bien sin suspenso no es interesante y sin votos ni comentarios no hay actualización. Así las cosas deben ser wasouski :v

El principe del océano en peligro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora