Suga O Jimin ( Imagina +18)

Qué torpe

- No sé cómo comenzar. ( Digo mientras coloco mi frente sobre la mesa) -Todo es tan extraño, me siento apenada pero feliz, triste, angustiada, enojada, con sueño, cansada pero feliz .

- Amix estás en tus días?. Dice soltando una pequeña risita. - es broma. Solo quería cambiar la tención del hambiente.

- Deja de jugar! Es algo serio, casi veo a un chico desnudo. Fue algo incómodo. No sé cómo lo veré llegando a casa. Su habitación está frente a la mía. (Digo tapándome la cara)

- Tranquila amix no creo que sea tan malo como suena. Tal vez el también está apenado. Deberían charlar sobre el tema cuando llegues a casa.

El mesero llegó con nuestros helados. Lo único que quería era comer helado y hacer como si nada hubiese pasado. Tal vez mi amiga tenga razón y tenga que hablar con el. Tal vez no es tan grave como yo lo pienso....

-Amix, amix!. Grita mi amiga sacándome de mis pensamientos.

-Lo siento, solo está pensando.

- Y qué pasa con el chico de la linda sonrisa?

- Oh el... A el lo conocí de camino al parque, Caí sobre el cuando salí corriendo de mi casa fue muy amable al ayudarme a levantar ... (digo mientras como de mi helado)

El tiempo pasó muy rapido, le conté todo lo sucedido en la mañana, ella me recordó una y otra vez lo torpe que era, tal vez si lo era pero cuando lo mencionaba hacia pequeños pucheros o me cruzaba de brazos... Hacía tiempo que mi amiga y yo nos sentábamos a charlar, era lindo compartir tiempo juntas.

Ahora me encontraba caminando hacia mi casa. Mi amiga prometió mandarme mensaje cuando llegara a su casa y yo también. Por suerte la casa no quedaba tan lejos así que llegué muy rápido.

Entre y asome mi cabeza para ver que nadie estuviera. En el transcurso del camino se me había olvidado lo ocurrido con Jimin. Solo basto entrar para que esos recuerdos invadieran mi mente.

Al parecer no había nadie. Las luces estaba apagadas así que corri hacia mi habitación entrando por la puerta encendiendo la luz ... Me adentre recostandome en mi cama mirando hacia el techo.

Fije mi mirada en un pequeño papel que había en una mesita alado de mi cama.