Pasemos a lo más delicado. - Propuso HoSeok, y YoonGi puso más atención. - ¿Humillación?
- Hemos quedado que nada de público. - Le recordó.
- Sí, lo sé. Pero una humillación no tiene porque ser pública. ¿Y si te pido que me beses los zapatos cada vez que entro en casa? Es humillación, pero sólo estaríamos tú y yo. - YoonGi lo pensó.
- ¿Podrías ponerme más ejemplos? - Pidió. Eso le gustó a HoSeok porque era algo que no entendía bien y estaba preguntando. Eso era sano.
- Llamarte como me plazca. Con insultos o formas vejatorias. Podría tratarte como a una mascota. Haciéndote comer de un plato en el suelo. Pidiéndote que juegues y hagas trucos para mí. - No sabía si iba a querer hacer todo ese tipo de cosas, sólo las gue diciendo al azar. - O atándote desnudo a un lugar simplemente para observarte. Usar un collar y unas riendas o correa. Podría examinarte como un médico. Podría atarte en posiciones humillantes. Pedirte que no te muevas y usarte como a un muñeco. - YoonGi se lamió los labios. Ya se lo había imaginado. Su cuerpo... completamente a merced de HoSeok. ¿Podía haber algo más fácil y al mismo tiempo más excitante? Él mismo se preguntaba si algo andaba mal en su cabeza al confiar tan ciegamente en él. HoSeok podía hacer lo que quisiera con él y sentía que le dejaría sin dudar. No más decisiones tomadas por él mismo, ninguna de ellas le habían conducido a un buen lugar, sólo a vivir como un perro rodeado de ratas. Sólo quería darle el control de todo. Nada más importaba. - Ya veo. - Pronunció HoSeok al ver su gesto. - ¿Y cómo llevas el dolor? - YoonGi tragó con fuerza.
- ¿Eso es por si tienes que castigarme? - Preguntó un poco débil. Había leído cosas así en el contrato.
- No necesariamente. El dolor puede causar placer también.
- No...no lo sé. Nunca he imaginado nada así. - Aclaró.
- Estoy partiendo de la base de que no sabes mucho sobre nada de esto así que te pregunto sobre todo e iremos probando y modificando el contrato poco a poco.
- Vale. - Aceptó. - Eso parece bien. - Señaló YoonGi. HoSeok dejó de caminar y miró al cielo. YoonGi le miró confuso.
- Empieza a hacerse oscuro. ¿Te invito a cenar? - Dijo de pronto.
- Aún no hemos firmados. Se supone que no deberías invitarme. - HoSeok sonrió ante esa afirmación.
- Vayamos simplemente a cenar como pareja. - Le pidió. - No hablemos nada del contrato. Sólo a cenar, ¿te gustaría? - YoonGi se sintió inseguro. - Si no quieres dilo.
- Yo... tengo un poco de miedo de no gustarte si me conoces de verdad. - Reconoció con la mirada baja. ¿Por qué era incapaz de mentir a HoSeok?
- Pero también entenderás que yo tengo derecho a conocer a quien domino. ¿Entiendes? - YoonGi asintió y se dirigieron al coche. - ¿Quieres contarme por qué te comportas así en la escuela? - YoonGi negó. - ¿Tiene que ver con las pesadillas? - YoonGi se encogió en el asiento. No iba a mentirle, pero no quería responder.
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Sumisión oculta
FanfictionYoonGi es el matón del colegio. No es físicamente fuerte, pero su lengua es afilada y ha conseguido hacerse temer. Su semblante es agrio y oscuro, pero oculta un secreto. Su agresiva actitud no es más que el reflejo de su inseguridad. En la intimida...