BETRAYED || Stranger Things||

3

Dustin, Steve y Lily pasaron varios minutos intentando descifrar el mensaje que se repetía una y otra vez en la grabadora.

-¿No sabes hablar ruso?- le dijo Steve terminando de darle una mordida a su plátano, Lily lo miro incrédula, Steve alzó los hombros despreocupado.

-Insisto, ¿Por que sabría hablar ruso?- La puerta se abrió dejando entrar a Robin.

-Tal vez pueda ayudarlos.- Lily la miro, su atuendo y el de Steve hacían juego, que tontería.

-¿Sabes hablar ruso?- le dijo Dustin a lo que ella respondió diciendo algo en otro idioma.- Increíble.

-Eso no era ruso.- Aclaró ella.- Pero se hablar varios idiomas, además, es tu turno de servir helado.

Refunfuñando Steve salió de la habitación para dirigirse hasta el mostrador, Max y Jane estaban tocando frenéticamente la campanita esperando ser atendidas.

-Oye Steve creo que...- Lily había salido en el momento en que le había entregado su helado a las dos niñas.- Tu no debes estar afuera.

Jane miro a Max y salieron corriendo, Lily alzó la cabeza disimuladamente haciendo que ambas tropezaran con la nada, pero sostuvo sus helados para que los pudieran agarrar al levantarse, las personas alrededor voltearon a ver a las niñas, bajo un poco más los helados para que se disimulara un poco.

-No me mires así.- le dijo Lily con una mueca.- No le diré nada a Hopper, pero me debes una, Jane asintió sonriendo y se fueron.

Steve se recargó en la barra pero resbaló haciendo que ella soltara una risa por lo bajo.- A veces se me olvida que tienes poderes sobrenaturales.- Robin abrió la ventanilla haciendo que ambos dieran un brinco.

-Ya desciframos el mensaje.- A Lily le pareció muy divertida la emoción y la expresión en su rostro.

El pizarrón tenía los escritos de ruso en plumón rojo y por debajo se leía el mensaje ya descifrado.

-La semana es larga, el gato plateado se alimenta cuando amarillo y azul se unen en el oeste, un viaje a China se oye bien si cuidas tus pasos.- Todos dijeron al unísono.

-¿Y eso que diablos significa?- Hablo Lily observando a Robin, ambas chicas se habían adelantado a discutir el tema.

-No lo sé, podría ser un mensaje secreto.- Dustin se había incluido en la conversación.- Rusos malvados o algo así.

Steve sacó varias monedas de su short buscando alguna para poder encender El Caballito.- ¿Necesitas ayuda pequeño Steve?- Se burló Robin ganándose una mala mirada de Lily.

-Solo necesito una moneda, ¿si?- le grito como contestación, Lily saco una de su bolsillo y la insertó, escucharon la música alegre.- ¿Lo ven?

-La grabación...- concluyó Dustin sacando la grabadora.

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El depósito se veía más aterrador de noche, los ruidos extraños y el olor penetrante hacían que pisar ahí le diera una sensación terrible de asco, más no de miedo, no sentía miedo desde hace mucho. De su chaqueta sacó otro cigarrillo y tomó una calada larga, se recargó en uno de los postes para esperar a Billy, no tardaría en llegar con la otra víctima y tenía que estar listo para recibirla.

-Mierda.- dijo arremangándose la chaqueta de cuero mostrando el injerto del monstruo sombra en su muñeca.- Deja de hacer eso o juro que cerrare el puto portal sin importarme una mierda los rusos.

-No creo que quieras hacer eso.- Billy estaba empapado en sudor y el cabello se le pegaba a la frente, en sus brazos tenía a la guardavidas.

La dejó en el suelo y se puso encima de ella para susurrarle algo que Chase no entendió, seguido de eso el pelinegro puso una mano en la frente de la chica para hacerla dormir y que no hubiera problema al enlazarla con el desollamentes, pero los gritos mentales que está producía le estaban volviendo loco.