Invierno Parte I

134 10 1
                                    

Invierno 2011/2012

Las semanas pasan muy rápido, el tiempo junto a Alessandro pasa volando, desde que somos “novios oficiales” ha venido casi a todas las noches a visitarnos, me encanta la relación que tenemos y lo bien que me llevo con su hermana y mejor amiga. Intentamos preparar nosotras las cena, pero casi siempre es un fracaso, así que tiene que venir Alex con la comida ya comprada o cocinarla él, hace unos cuantos días me enseño a hacer lasaña, me dijo que la receta era de su abuela, me encanta que sepa cocinar, eso le dio muchos puntos extras. En estos momentos podría decir que la vida è bella, pero hay una cosa que me asusta: tengo miedo de que Alex quiere dar un paso más en nuestra relación, no sé si estoy preparada para un entrega total, tengo miedo de que no sea lo suficientemente buena, sé que él ha estado con muchas mujeres y yo no tengo experiencia en ese tema. Por la puerta asoma diciembre. Mi mes favorito. Me encanta por la navidad, la decoración y porque es tiempo reunirte con tus seres queridos, en mi caso, volveré a ver a mi familia después de tres meses. También son las últimas semanas del primer semestre en la universidad y estoy estresada, que trabajo aquí que trabajo allí y así todo el tiempo. Esta noche tenemos una fiesta, es una fiesta universitaria, será como una despedida, ya que algunos alumnos, los extranjeros, vuelven a sus países, otros se quedan, la fiesta se ha adelantado para que podamos estar todos juntos, algunos terminan las clases antes y otros después. Las chicas y yo nos estamos preparando para la fiesta, cada una en su habitación. Suena el timbre y escucho que alguien abre la puerta. Estoy en mi habitación sentada en mi tocador, ya me he vestido, he elegido un vestido sencillo, estoy terminando de arreglarme el pelo cuando veo en el espejo el reflejo del chico mas guapo del mundo, Alessandro, está apoyado en la puerta con un brazo detrás y con la mano del otro tocándose la mejilla.

–Hola –lo saludo, dándome la vuelta y yendo hacia él.

–¿Te he dicho lo guapa qué eres? –me pregunta y me pongo roja.

–Unas cuantas veces –contesto, me acerco a él deposito un beso en forma de saludo en sus labios.

–Pues te lo vuelvo a repetir –dice. Me encanta, estoy enamorada de él hasta los huesos, es tan atento y cariñoso.

–Me encanta escucharlo –comento.

–Es para ti –dice poniendo la mano que tenía detrás de la espalda, es un estuche de color azul oscuro que pone Swarovski.

–¿Para mí? –lo cuestiono sorprendida, el asiente con una sonrisa y añado –¿Se puede hacer a qué se debe esto? –pregunto.

–Es nuestro mesario –responde.

–¿Nuestro mesario? –Vuelvo a preguntar sorprendida.

–Hoy cumplimos dos meses –contesta abriendo el estuche y veo un colgante en forma de corazón con un brillante en un lado.

–Alex, es precioso –le agradezco sorprendida mientras toque en el estuche el collar –. No debiste. Además, tiene que ser carísimo –comento y el suelta un risa floja.

–Tenía unos ahorros y que mejor que gastarlos en ti –dice–. Para mi chica lo mejor.

–Yo no te he comprado nada –digo poniéndome roja–. No sabía que celebraríamos los meses –Me defiendo y el se ríe.

–En realidad, no lo he comprado por eso, solo quería tener un detalle contigo y ha coincido con nuestro mesario –me confiesa. Saca el colgante del estuche, me hace una señal para que me debe la vuelva, obedezco y veo nuestro reflejo en el espejo del tocador, yo me recoge el pelo y Alessandro me pone el colgante.

Amar otra vez (Mario Götze)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora