El domingo por la mañana, So Jung colgó su enorme bolso en la silla de comedor y se sentó en frente de Jisoo. Miró el restaurante a su alrededor.—¿Qué hacemos aquí? —preguntó.
—Hoy necesito algo más que una magdalena —declaró Jisoo, cerrando la carta. Había elegido ya una tortilla de verdura e hierbas y una tostada integral.
—¿Necesitas comer? ¿Qué ha pasado?
—Hoy voy a repetir la carrera de obstáculos.
—Oh. Pensaba que querrías hablar de tu jefe.
—No.
—¿Estará allí?
—No sé. Le pedí a Suga que supervisión él.
—¿Cómo te va con el jefe?
—He procurado no encontrarme con él desde el miércoles por la noche.
—¿Y eso te funciona? ¿Tus sentimientos han cambiado?
A Jisoo le habría encantado responder que sí. Pero sus sentimientos se estaban intensificando. Solo tenía que ver a Taehyung a distancia para que su corazón se acelerara, sus rodillas se aflojaran y sus labios cosquillearan.
—Lo superaré.
So Jung alzó los ojos al cielo.
—¿Vienes a casa de mamá y papá el próximo fin de semana?
Jisoo hizo una mueca. Había olvidado la cena familiar. Su hermano Myungsoo había organizado una videoconferencia desde el barco, así que se trataba de una invitación obligatoria. Tendría que encontrar tiempo.
—He pensado llevar a Im —dijo So Jung—. Myungsoo me ayudará a calmar a mamá. Sabemos que papá no será de ayuda con eso. Quiero acabar con los esto. Me está matando.
—No te gusta mentir.
—No miento exactamente, pero dejo fuera mucha información. Y sí, odio eso. Quiero ser sincera y directa conmigo misma y los demás. Jaebum es un hombre estupendo y me nuevo a convertirlo en un secreto vergonzoso.
—¿Él sabe lo que pasará?
—Claro que sí. Conoce a nuestra madre.
Jisoo se echó a reír.
—Pues debes de gustarle mucho. Si está dispuesto a enfrentarse con la jueza Park, le ha dado fuerte.
—A mí me ha dado fuerte.
Jisoo se preguntó como sería enamorarse de verdad.
Pensó en Taehyung, pero aquello era sólo lujuria. No se hacía ilusiones de que en sus sentimientos hubiera algo más noble que deseo físico.
Y en tal caso, quizá acostarse con él no fuera la peor idea del mundo. Tal vez fuera un amante mediocre y, una vez que descartara esa atracción, él sería solo un hombre más para ella, quizá si se acostaba con él podría concentrarse más en el trabajo.
Se dio cuenta de que su hermana la miraba con curiosidad y volvió a la Tierra. Añadió un par de tortitas a la tortilla y So Jung pidió una magdalena y un café.
—¿A qué hora tienes la carrera de obstáculos?
—A las once. Iré directamente desde aquí.
—¿Crees que lo conseguirás esta vez?
—No lo sé, pero tengo un plan. Y sé donde me equivoqué la última vez.
—¿Te contratará si lo consigues?
—¡Ojalá! Pero no sé. Aunque eliminaré una de sus razones para rechazarme.
—¿Sabes cuáles son las otras?
—La principal es que parece creer que las mujeres somos más decorativas que funcionales.
So Jung arrugó la nariz.
—Me pregunto qué ve en ti.
Jisoo intentó no sentirse insultada.
—Muchas gracias.
—Las dos sabemos que eres mucho más funcional que decorativa. Si fueras un adorno de empresa, usarías más maquillaje, comprarías ropa bonita y te pondrías tacones. Podrías ponerte espectacular si quisieras ser decorativa.
—No quiero.
No quería conquistar a Taehyung, quería un trabajo, una carrera, triunfar profesionalmente. Y lo conseguiría. Los miembros de la familia Kim siempre triunfaban.
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*dándose cuenta de que los capítulos de Jisoo y su hermana no son tan largos*: que sean dos capítulos en un día.
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Contrato Por Amor ✦ Vsoo/Taesoo ✦ Adaptación
FanfictionKim Taehyung se negaba a contratar a una mujer por muy competente -o hermosa- que fuera para el peligroso trabajo de su empresa de seguridad de élite. Pero cuando su hermana y su pequeño sobrino necesitaron protección, Taehyung le ofreció un empleo...