Los Demonios También Pueden Enamorarse

Capitulo 11

Capitulo 11

Aaron esperó pacientemente a que tocara el timbre de salida para que Lilith apareciera por la gran entrada de la academia. Fueron cerca de unos 15 minutos los que estuvo esperando, hasta que finalmente sonó el timbre y vio que Lilith iba saliendo junto a sus amigas y su novio, el que tanto detestaba Aaron.

- Ahg, es un idiota - Dijo Aaron viéndolo despectivamente, pero intentando disimular para no alterar a Lilith.

Lilith iba caminando hacia la salida junto a Agatha y Renée, riendo de las payasadas que Nick iba haciendo. Él hacía de todo para verla reír, desde muecas, chistes absurdos y caídas fingidas. Sí era bastante ridículo, pero eso le parecía sumamente dulce a Lilith y sumamente tarado a Aaron.

- Es tan detestable, no entiendo cómo es que mi hermanita no se da cuenta de lo idiota que es, o sea, a simple vista ya me repugna y me dan ganas de golpearlo. Yo creo que eso le debe pasar a todo mundo, ¿no? Golpear a un descerebrado como ese debe ser divertido, por lo menos más que sus chistes -

Agatha y Renée vieron a Aaron que estaba sentado en el capó del auto esperando a Lilith, entonces como de costumbre comenzaron a coqueterle sutilmente con sonrisas y miradas pícaras. Aaron sabía que eso le molestaba y ponía celosa a Lilith, le hervía la sangre y eso le encantaba a él, por lo que seguía un poco el juego y le sonreía de vuelta a las chicas.

Lilith se dio cuenta del coqueteo de sus amigas hacia su hermano e hizo una doble zancadilla para que ambas tropezaran y le dieran tiempo de correr a los brazos de su hermano y llegar antes que ellas.

- Mi hermanito bello, hermoso, precioso, ¿qué demonios haces aquí?- Dijo Lilith sonriendo de forma casi asesina. Aaron observó a Lilith y acarició su cabello, desordenandolo un poco y luego la besó en la frente con ternura.

- Venía a ver si necesitabas algo y saber como estabas. Ya sabes como soy... y más cuando vas a salir con ese subnormal de ahí - contestó Aaron apuntando sutilmente a Nick, que se encontraba riéndose de las chicas que estaban en el suelo.

Lilith quedó mirando a Aaron, presionó sus mejillas y tocó la punta de su nariz con su dedo.

-Eres tan antipático e irónico... Te adoro hermanito, estaré bien. Te llamaré cualquier cosa, ¿sí? Andaremos cerca del parque, no creo que nos vayamos lejos de ahí - afirmaba Lilith, para darle aunque sea una pizca de seguridad a Aaron que ya se veía alterado.

- Mmmm, esta bien, cualquier cosa me llamas, yo quizás lleve a tus amigas a dar una vuelta, ¿qué te parece la idea?- Aaron le sonríe a las amigas de Lilith mientras les guiña el ojo, lo cual poco más y las derrite en el césped. La respuesta de Lilith fue tomar a Aaron del rostro, lo mira sonriendo y le da una pequeña cachetada.

- Ni se te ocurra, hermanito, ni se te ocurra...- Lilith se baja de los brazos de su hermano y va donde sus amigas, a cada una le dio la media vuelta para que dejaran de ver a Aaron y le dio un golpe a puño cerrado en el brazo a ambas.

- Se me cuidan y ten mucho cuidado hermanita, ya sabes que estaré para ti a cualquier hora, no dudes con avisarme si algo anda mal y procura no llegar tan tarde a casa, sabes que es peligroso el camino oscuro - Aaron sube al auto y se despide de Lilith y sus amigas con la mano. Lilith hizo señas a su hermano y continuó caminando. A los pocos pasos le tomó la mano a Nick que la tenía extendida hacia ella con un poco de timidez.

Aaron bastante desconfiado, se puso a pensar en si ir y vigilar a su hermanita o sólo dejarse llevar y confiar, cosa que no estaba muy cercana a su naturaleza.

- Estaría mal, es su vida privada... Pero el inepto de su novio no me agrada. Agh... Creo que los seguiré aunque este mal, pero sin que Lilith se de cuenta, sólo es por cuidarla -

Aaron siguió desde una distancia alejada a Lilith, que iba camino al parque junto con su novio y sus amigas, tal como ella le aseguró. Vio que Lilith bailaba con las hojas como lo haría siempre, le alegró que no se reservara por sentir que no encajaría y que sus amigas trataran de hacer lo mismo.

El hermano mayor se estacionó tras unos árboles y observaba desde dentro del auto a Lilith, que estaba compartiendo con Nick en una banca unos dulces que pasaron a comprar a un local en el camino, se reían y bromeaban dulcemente.

- Hasta ahora parece estar todo bien, no veo alguna conducta reprochable - Aaron puso un poco de música para pasar el rato y no aburrirse mientras observaba cada detalle. Pero de repente un cuervo negro se posó en la puerta del auto, justo sobre el espejo retrovisor.

- ¿Y tú? Ya te había visto antes, ¿no? - Aaron intentó tocarlo, pero el ave le dio un picotazo en el dedo, que provocó una herida con algo de sangrado.

- Maldito pájaro te voy a ... - Aaron volvió la vista el ave y se dio cuenta que ya no se encontraba más en el lugar.

- ¿Qué carajo?, si estaba aquí un segundo atrás...- Aaron miró atento si el ave seguía cerca, pero al rato se aburrió y siguió observando a Lilith.

Lilith estaba encantada con la grata tarde, pero vio que ya era casi de noche y debía volver a casa, como bien dijo Aaron, era bastante peligroso el camino a oscuras y por eso decidió llamarlo para que la pasara a buscar, sin saber que él estaba a uno metros de ella.