"ELLA" (PARTE 2)

16.

No puedo creer lo que Santiago ha hecho, no me creo todo lo que ha dicho en televisión nacional.
Tome mi celular, dispuesta a llamarle, quería verlo, quería agradecerle.
Pero no, lo mejor sería ir agradecerle a Santiago y Oriana a su casa, pues ambos me habían defendiendo y es que había visto un post de Oriana pidiendo que pararan su odio hacia mi.
Tome las llaves del auto y salí del departamento. Comencé a manejar en dirección a la oficina de Dave, para saber con exactitud la dirección de Santiago.
Había un tráfico terrible.
Me detuve en un semáforo que estaba en rojo, y de pronto todo se puso negro.

•

“Está perdiendo mucha sangre”
“¿Algún familiar?” Mi padre intento decir pero no me sale, no puedo abrir los ojos, me pesan muchísimo, siento que pierdo fuerzas. Sólo escuchó las voces como un eco al fondo, cómo si estuviera dentro de un pozo.
De nuevo la obscuridad me abraza.
“Necesitamos una transfusión sanguínea”
“Quizas tengamos que amputarle la pierna”.
—Maca... —Es la voz de Ryan.
“Saquenlo de aquí”.
—Maca... Maca mi amor... —Y puedo sentir sus cálidas manos tocar mi mano, y por más que intento mover la mano no puedo, es cómo si me tuvieran amarrada de pies a cabeza impidiendo que me mueva.
Abre los ojos maldita sea, me digo a mi misma, pero de nuevo la oscuridad me abraza y me lleva por un buen rato.

•
—Ryan por favor, cálmate. Si no nos van a sacar de aquí —Dice Ari, intentando calmar a aquella bestia angustiada.
Ryan se pasea de un lado a otro llevando sus manos a la nuca, revolviendo su cabello cómo un loco.
—Ari lo siento pero no puedo calmarme, el verla ahí en esa camilla, en ese estado y los doctores diciendo que está muy grave me ponen mal... No me puedo calmar —Dice el al borde del llanto.
Y a Ari se sorprende pues Ryan siempre ha sido un tipo duró, un tipo que no se quiebra.
—Hermano —Dice Trey hablando por fin —Ella va a estar bien, tu confía. Maca es fuerte. —Dice poniendo su mano en el hombro de Ryan.
—Su padre ya viene en camino, yo le llamé y también llamé a Santiago —Dice Ari, rogando que Ryan no sé ponga loco.
—De alguna manera el también es importante para Maca, así que le hará bien su compañía —Dice Ryan limpiándose las lágrimas.
Ninguna enfermera les decía algo, sólo les pedían pasiencia.
Una hora después Santiago llegó.
—¿Y Maca? ¿Dónde está? —Pregunta Santiago.
—Está en cirugía, aún no nos dicen nada —Le responde Ari.
Una enfermera camina hacia ellos, interrumpiendo su pequeña charla.
—La paciente García salió de cirugía, pero aún así está muy grave, ahora está en terapia intensiva. Está en un coma inducido. —Todos se miran sorprendidos.
—Pero ¿Que pasó? —Pregunta Santiago desesperado.
—Una camioneta choco contra su auto —Responde Ryan, quién tiene lágrimas en los ojos.
—Así es, su auto se volcó y quedó en perdida total, aún no sabremos si la señorita García sobrevivirá está noche, y si lo hace quizá pierda la sensibilidad en una de sus piernas —Dice la enfermera.
—¿Cuándo podemos verla? —Pregunta Ari, preocupada por la salud de su amiga.
—Solo puede ir uno y sólo cinco minutos. Y los demás igual. —Dice la enfermera.
Todos acordaron que el primero debía ser Ryan, incluso Santiago estaba de acuerdo.

•Maca's

Siento la cálida mano de alguien, encima de mí mano y por más que quiero abrir los ojos para ver quién es no puedo. No tengo la fuerza, me siento muy débil.
—Gatita... —Es Ryan, tal parece que está llorando —Te juro que daría mi vida por no verte así, me duele que estés aquí sin abrir los ojos, sin escuchar tu dulce voz diciéndome que todo va a estar bien —Apenas y le escuchó, es cómo si su voz se fuera y regresara. Cómo un eco a lo lejos. Quiero seguir escuchándolo pero no puedo, siento que he caído en un hoyo profundo de oscuridad.
Quiero gritar, quiero salir corriendo pero no puedo.
No sé qué rayos pasa o que rayos paso.
“Maca... Por favor.”
Esa voz ya no es de Ryan.
“Perdóname Maca”
Es Santiago.
—Yo he sido un cobarde. Si tan solo...
¿Si tan sólo que? Maldición, no puedo escucharlo.
—Te amo y siempre lo haré, quizá sí despiertas podríamos...
¿Podríamos que? Maldita sea.
Siento cómo poco a poco me voy quedando dormida, cómo pierdo noción del tiempo, noción de todo.

•

—Salga de aquí.
Una enfermera empuja fuera de la habitación a Santiago. Han entrado varias personas a la habitación, pues de pronto el monitor cardíaco ha indicado que el corazon de Maca se ha detenido.
Los doctores le hacen RCP, pero es inútil, tal parece que él corazón de Maca se ha dado por vencido.

•
La misma enfermera que ha salido antes, sale de nuevo a decirles lo que ha sucedido.
—Macarena sufrió un paro cardíaco...

—
Weno no me maten JAJAJAJAJA.
Bai ¡Nos vemos dentro de dos meses!