Capítulo 13

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LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN SON PROPIEDAD DE RUMIKO TAKAHASHI.

Pido disculpas por cualquier error ortográfico.

Capitulo 13.

Al terminar las clases Kasumi me pidió que me quedará a cenar, una parte de mi deseaba con todas mis fuerzas estar ahí, pero tuve que rechazar su invitación, no puedo seguir alimentando el odio de Akane contra mí, necesito ganárme su confianza, aún que… será un poco.. o más bien muy difícil.. no siempre logro quedarme callado. Al salir del dojo pude ver como Akane acariciaba a ese pequeño cerdo negro que yacía entre sus brazos, se notaba muy contenta mimando y acercando su rostro hacia ese animal, su pequeña nariz rosaban la cabeza del cerdo negro, no se que me sucedió en ese momento, pero la irá me cegó por completo, lo único que se me ocurrió hacer, fue acercarme a ellos lo mas rápido posible y alejarlo de sus redondeados pechos, los cuales me pertenecen a mi… son solo míos, solo yo tengo derecho a disfrutar de ellos, como se atreve a tocarla.

-maldito cerdo-

hable entre dientes, con mi mandíbula tensa, me dolía la quijada por la fuerza que empleaba ante tal acto, no podía controlar mis celos, esa mujer me pertenece a mi y a nadie mas.

– ¡¡oye!! pero que rayos te sucede devuélveme a P-chan-

la peliazul trataba de arrebatarle a su mascota dando saltos frente a el azabache, para poder alcanzar a su preciado animalito, pero la diferencia en su altura era abismal, hasta que ella muy furiosa, pues no era muy paciente y menos con cierto chico, empieza a lanzarle un golpe tras otro pero no atinaba ninguno.

- Este.. cerdo pervertido.. se viene conmigo-

hablaba esquivando los golpes de Akane sin mucho esfuerzo, el azabache era veloz y muy ágil no le costaba mucho trabajo librarse de ella, dando saltos por todo el patio de la residencia Tendo, tenia que alejar a el cerdo de su amado tormento.

– ¿como que pervertido? ¿que te pasa? ¡¡ Creo que estás loco!!-

exclamó, la chica mientras lanzaba un fuerte y certero golpe, el cual fue directo al pequeño cuerpo de p-chan, que fue utilizado como escudo de protección para el ojiazul

- aaaaahhh!! P-chan lo siento-

gritaba asustada pidiendo perdón al pobre animalito, después de tremendo puñetazo directo en su cuerpo

- ¡¡¡como se te ocurre ponerlo de escudo Ranma!!!-

Gritaba furiosa mientras encaraba directo a Ranma poniéndose de puntillas para poder quedar un poco mas alta, cosa totalmente inútil, pues esos escasos centímetros no le ayudaban mucho a la pequeña chica, sin embargo se podía observar como desprendía un aura de batalla, la cual hacia estremecer al gran Ranma Saotome.

- a..kane Tran… tran..quilízate por favor-

el chico retrocedía dos pasos con cada palabra dicha, el miedo de este crecía al ver esos ojos llameantes llenos de ira.

Akane lo miraba intensamente que si sus ojos fueran Navajas con solo mirarlo lo estarían atravesando ahora mismo, caminaba lentamente directo hacia el, como un león acechando a su fragil presa, con un rápido movimiento le quito a p-chan de las manos al azabache, y antes de tocar el suelo con sus pies lanzo una potente patada directo en la mandíbula del chico mandándolo a volar por los aires de Nerima.

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