Donde Jeon JungKook, un Omega y asesino profesional, tiene la tarea de asesinar a Kim TaeHyung, un Alfa con un gran territorio y líder de una de las facciones criminales más grandes del país.
Pero poco sabía Jeon que Kim era más inteligente de lo q...
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JungKook mantuvo su cuerpo tenso con cada paso que daba el Beta hacia él. No era como si no pudiera vencerlo en combate cuerpo a cuerpo, ya había lidiado con Betas. Solo TaeHyung tenía ese control sobre él.
El Beta se sentó en el borde de la cama y jugó con sus cadenas.
— Seré rápido y sincero aquí. TaeHyung nunca ha perdido un desafío.— Min YoonGi lo miró profundamente, pero JungKook no se sintió intimidado.— Hará todo lo que pueda hacerte perder, desde usar su voz de Alfa hasta hacer trampa. Y no quiero eso, es la primera vez que siento que alguien está preparado para TaeHyung para un desafío como este.
— ¿Y qué quieres?— Preguntó JungKook en serio.— Dudo que sea gratis, Min YoonGi.
Min se rio.
— Mira ... ya me conoces.— Él sonrió, mirando a la máscara en su rostro.— No es gratis. Pero solo verlos a los dos tratando de suicidarse es una buena recompensa. TaeHyung está acostumbrado a ganar, y creo que puedes deshacer eso de él.
— Este desafío ... es solo una cosa de entretenimiento para ti, ¿no?— JungKook apoyó su rostro en una rodilla, manteniendo su máscara sobre su rostro mientras enfrentaba a Min con una sonrisa maliciosa detrás de lo que cubría su rostro.
— Especialmente para TaeHyung.— YoonGi estuvo de acuerdo rápidamente.— Se divertirá con eso, y tienes que hacer que el juego gire.
— ¿Cómo?— Preguntó, poniendo los ojos en blanco.
— TaeHyung dictará las reglas y, a primera vista, te parecerán justas a ti y a él.— YoonGi sonrió.— Pero créeme, él nunca te ayudará. También creará reglas.
— ¿Reglas? Que interesante.— JungKook estaba pensando que era un psicópata.— Le gusta jugar, ¿verdad? Me encanta, aunque es la primera vez que juego, suena divertido.
— Porque todo tiene una primera vez. — YoonGi se rio.— Son reglas que solo tú puedes saber. Piensa cuidadosamente antes de hablar. Ahora te dejaré ir.
Tan pronto como el Beta de cabello verde prácticamente arrojó las llaves a la máscara de Jeon, gruñó con ira. Afortunadamente para esto es que estaba encadenado porque de lo contrario, por instinto, ya habría roto el cuello del lobo blanco.
Tomó la llave y se deshizo de las cadenas que previamente lo habían atado a la cama. El Beta dejó ropa para JungKook, quien arqueó una ceja y puso los ojos en blanco. ¿Estaba en la casa de un criminal, lo retuvieron como rehén y le dejan ropa limpia para usar?
— Que idiota.— Murmuró.
Jeon miró a su alrededor y encontró su ropa de trabajo, su traje, arrojado a una cómoda. Él evaluó y todo estaba allí excepto sus armas. Sospechando de esto, TaeHyung no estaba loco por dejar a su asesino armado en su propia casa.
JungKook se vistió como antes y se dirigió al baño del dormitorio. Se quitó la máscara de la cara y la dejó en el fregadero. Se quedó mirando su reflejo en el espejo, había un pequeño corte en su ceja izquierda, otro corte en la esquina de su labio inferior con una pequeña mancha de sangre drenada, su cara tenía algunos moretones, era terrible. TaeHyung lo lastimó un poco, pero Jeon ya estaba acostumbrado. Era la primera vez que estaba tan herido por una pelea, y considerando que se desmayó con un golpe, podría haberse roto la mandíbula. TaeHyung fue extremadamente cuidadoso en sus ataques y sabía exactamente dónde golpear.
