Venganza

No Lo Arruinará

El camino a casa resultó totalmente horrible...en cuanto puse un pie en el auto estalle en llanto, después entro Adeline a quien no me percate que había dejado atrás, ella empezó a conducir en absoluto silencio mientras yo no paraba de llorar; realmente estoy muerta de miedo, se de lo que Sasha es capaz y a decir verdad no es por mi por quien temo pues yo lo he enfrentado antes, pero temo por Adeline pues se que ella es el punto focal de su furia, temo por Alisson pues a el no le gustará que ella exista y temo aún más por mi hijo...Sasha se volverá loco si algún día se entera de que mi lindo pelinegro es su hijo, me asusta que algún día trate de quitarmelo...por qué el no se tentara el corazón para alejar a un pequeño de su madre. Llegamos a la casa, la rubia aparco en el garage, se bajó rápidamente y fue a abrir mi puerta...se puso frente a mi y me tendió su mano para ayudarme a salir, yo tomé su mano aún con las lágrimas bajando incesantes sobre mis mejillas.

Detesto verte así -me miró con tristeza- hace mucho que no te veía sufrir de esta forma...

Estoy asustada...-susurre entre sollozos- tengo miedo por ti, por Alisson y por Sebastián -me abrazó con fuerza- no quiero perderlos...

Hey...-me alejó un poco para limpiar las lágrimas en mi rostro- todo estará bien, Vicky -afirmo con una ligera sonrisa- vamos a estar bien...solo debemos mantenernos alejadas de el

¿Y si se entera de que Sebastián es su hijo? -la mire con pánico-

No es su hijo -dijo seria- es tuyo y mío..Sebastián es NUESTRO hijo tanto como lo es Alisson, el no sabrá jamás que el lo engendró por qué ese es un secreto que tú y yo mantendremos hasta el día en que nuestros corazones dejen de latir...

No somos las únicas que lo saben -suspiro-

¿Y tú crees que Charlotte, Alana, Julia o Lauren vayan a decirle? -negue con la cabeza- entonces no te preocupes...nuestro secreto está a salvo y nuestra familia lo estará -beso mi frente- es una promesa

Te amo -la abrace-

Y yo a ti -me apretó contra si cuerpo-

Cuando estuve más tranquila nos adentramos en nuestro hogar, agradeci internamente que mis hijos estuvieran con su abuela pues detestaria que me vieran en este estado...se que para Sebastián su mamá y yo somos las personas más fuertes que conoce, lo sé por qué así piensan la mayor parte de los niños...ven a sus padres como héroes que los van a cuidar en todo momento y si me viera tan asustada como lo estoy ahora probablemente la imagen de heroína que tiene de mi ya no me quedaría. Mi esposa tomo mi mano y me guío a la habitación con suma tranquilidad, es horrible pensar como ya hace mucho tiempo que no tenía una noche a solas con mi esposa y justo esta noche regresa Sasha a arruinarlo todo...

Lamentó que esto haya arruinado nuestra noche...-susurre un poco triste-

¿Quien dijo que estaba arruinada? -enarco una ceja- no voy a permitir que ese idiota venga a arruinar algo...no va a arruinar mi familia, ni mi matrimonio y mucho menos arruinara esta noche -afirmo decidida con una sonrisa en los labios-

¿Y que piensas hacer para que no se arruine? -pregunte curiosa mientras mi tristeza desaparecía lentamente-

Podríamos tomar una ducha...y hacer el amor -dijo con picardía-

Tu si sabes cómo levantarme el ánimo -sonreí-

Por algo soy tu esposa -se alejó de mi con esa mirada pícara que tanto amo-

Se paró frente a mi a una distancia que me daba una vista perfecta de su figura pero sin permitirme tocarla, de un tirón soltó su brillante cabello rubio de el moño que se había hecho dejando que este cayera por sus hombros, desabrochó el cierre de su vestido blanco y con una lentitud impresionante lo deslizó por su cuerpo hasta que llegó al piso dejando ver la lencería negra que está usando, cuando iba a quitarse la poca ropa que le sobraba me acerqué a ella para detenerla.

¿Pasa algo? -pregunto con fingida inocencia-

Es que estás haciendo mi trabajo -sonrió-

Pues entonces continúa -tomo mis manos y las posó sobre su cintura, justo donde inicia su ropa interior-

Omitimos la ducha para pasar a entregarnos a la otra una vez más, me deteite con sus sabores, sus gemidos fueron música en mis oídos, me deje hacer por su lengua experta, le entregué mis más abrazadores orgasmos, le di cada porción de mi piel y me adueñe de la suya, disfrute como nunca el poder ser una misma con ella...sentir su piel en contacto con la mía aún me parece una de las mejores sensaciones que he experimentado, sus besos siguen siendo mi adicción y apesar de que ya no somos las mismas que cuando nos conocimos el deseo que sentimos la una por la otra sigue siendo igual de intenso, por qué cuando amas no te cansas de esa persona...por qué probar lo que su cuerpo puede darte siempre es como si fuera la primera vez. Después de hacerla mía de todas las formas que sé, la rubia cayó agotada a mi lado quedándose dormida casi de inmediato...yo por mi parte opte por verla dormir, siempre ha sido lo que más amo hacer y hoy necesito la paz que verla tan tranquila puede brindarme, me quedé observando cada rasgo de su precioso rostro, esos preciosos bucles que forman su melena rubia, su piel tersa y ese cuerpo que cada día deseo con más ansia...al verla se que tiene razón al decir que todo estará bien, todo debe estar bien y me encargaré de que así sea, tengo que hacer que el miedo se vaya...debo regresar a ser la que fui antes de Adeline, si bien no voy a regresar a ser una jodida interesada, si tengo que regresar a ser esa mujer que podría comerse el mundo sin titubear...mi familia necesita a esa Victoria arriesgada, decidida a no dejarse pisotear por nadie, esa mujer que piensa primero en lo que ella quiere antes de pensar en los demás y que intimida a cualquiera que se ponga en su camino...voy a cuidar de mi familia aunque me cueste la vida.