Venganza

Cómo Nosotros

Estoy dentro del auto de Sasha, el insistió en ponerme una especie de venda en los ojos...seguramente para que no sepa a donde me lleva lo cual me preocupa un poco aunque de alguna forma lo sabré en algún momento, se que está conduciendo por qué eso es obvio, pero fuera de eso no tengo idea de nada más...el casi no me dirigió la palabra desde que acepte venir con el. Admito que me siento bastante tranquila por qué voy a ver a Sebastián, pero por otro lado solo puedo pensar en mi esposa y en Ali...espero que Adeline entienda lo que estoy haciendo y trate de mantener la calma, de lo contrario esto será más difícil de lo que planeo.

Estás muy callada...-dijo con seriedad- ¿Acaso la gran Victoria está asustada?

Digamos que estar vendada no me hace sentir tranquila -menti-

Pensé que la idea de ver a nuestro hijo sería suficiente para calmarte -suspiro-

No me voy a calmar hasta que lo tenga conmigo -afirme sería-

Estás consciente de que ya no te irás de mi lado...¿Verdad? -senti una de sus manos rozarme la pierna-

No lo sé...las cosas pueden cambiar en un momento, Sasha -dije canalizando a mi Victoria pasada- además, tú sabes que no soy tuya

Si no lo eres...¿Entonces por qué estás aquí? -pregunto destilando rabia-

Por qué usaste a mi hijo para que aceptara venir contigo -suspire- como siempre usas trucos bajos para tener lo que quieres, pero no te das cuenta de que eso solo hace que caigas aún más bajo...nadie ama realmente la basura que eres por qué no te lo has ganado

Vaya...extrañaba esa lengua tuya que siempre sabe que decir para herir -solto una ligera risa causandome escalofrío- pero digas lo que digas no te voy a dejar ir...no para que regreses con esa estúpida con la que te casaste -suspiro- aún no comprendo por qué te casaste con ella...no es nada parecida a ti

Tú no sabes nada de mi -afirme seria-

Se más de lo que tú sabes, Victoria...yo se lo que eres realmente y planeo hacer que saques a relucir lo peor de ti -dijo con tranquilidad-

Decidí no responder a su comentario, la verdad es que no me interesa lo que el piense de mi o lo que planee hacer conmigo, al final de cuentas yo sé exactamente quien soy...se que no soy un ángel como lo es Adeline, pero tampoco puedo ser tan mala si alguien como ella me ama y ese pensamiento es lo que me ha mantenido cuerda los últimos años...por qué no es un secreto que me obsesionaba el hecho de ser mala para ella y tener en mente que no soy tan mala ha sido a lo que me aferrado para poder estar con mi esposa. Pasaron unos minutos y entonces sentí como el auto se detenía, escuché a Sasha bajar, también sentí como abrió mi puerta y de pronto recupere mi visión pues él me quitó la venda; mire a mi alrededor...frente mi se alza una mansión nada discreta, debo admitir que es bonita.

¡Mami! -grito cierta vocecita adorable sacándome de mis pensamientos sobre la casa-

De la puerta salió un muy alegre Sebastián, corrió hacia mí mientras yo hacía lo mismo, cuando estuvo cerca lo cargue y lo abrace como si la vida se me fuera en ello, sin poder evitarlo me solté a llorar por culpa de el cúmulo de emociones que tengo en mi interior.

¿Por qué lloras, mami? -cuestiono mi bebé confundido-

Es que te extrañaba mucho, príncipe -bese una y otra vez sus mejillas-

Yo también te extrañaba -me beso la mejilla con ternura, de pronto su vista fue a parar a Sasha quien solo nos observaba- ¿El es mi papá? -pregunto con el ceño fruncido-

Eh...-me quedé estática al escucharlo preguntar eso- ¿El te dijo eso? -asintió rápidamente-

También me dijo que mi mamá no es mi mamá...¿Verdad que sí es mi mamá? -cuestiono serio-

Claro que lo es -le sonreí- no te preocupes por lo que el te diga ¿De acuerdo?

Si, mami -lo bajé y entonces salió corriendo de nuevo al interior de la mansión-

Bienvenida a casa -dijo su odiosa voz a mis espaldas-

Está no es mi casa -empece a caminar hacia el interior de la casa con el detrás de mi- ¿Por qué le dijiste a Sebastián que Adeline no es su mamá?

Por qué no lo es -afirmo como si fuera cualquier cosa-

Es un niño pequeño, Sasha...el aún no entiende como funciona el mundo -suspire exasperada- si llegas a decirle que eres su padre y que Adeline no es su mamá solo lo confundes y lo lastimas...si tienes una pizca de bondad no le vuelvas a decir todas esas cosas...

Pero es mi hijo y quiero que lo tenga claro -voltee a verlo-

Lo conociste ayer, déjate de exageraciones...el no te conocé, eres un extraño para el y lo seguirás siendo por un tiempo -afirme seria-

No sería así si me hubieras dejado criarlo contigo...-me miró con furia-

¡Ah, claro! Siempre había deseado criar a mi hijo a lado de un asesino -sonrei sarcastica-

Al menos pudiste decirme que tenía un hijo...tuve que enterarme por otro lado -suspiro-

Sasha, no tenía intenciones de que mi hijo te conociera...no eres un buen ejemplo para el, eres un asesino, un ladrón, ahora te volviste un secuestrador y no se que puedas llegar a hacernos -suspire- no quiero que tengas nada que ver con su crianza...

Lo dices como si fueras muy buena, Victoria -me miró con seriedad-

No soy buena -admití- pero al menos no soy una asesina...

El crecerá para ser como nosotros -afirmo-

No, el crecerá para ser bueno...haré lo posible por qué jamás termine como yo o como tú -acaricio sutilmente mi mejilla-

Hay algunas cosas que son inevitables, querida -dijo con burla-

Y se que tiene razón...hay algunas cosas inevitables, pero esto no está a discusión o a la espera de "ver qué pasa", Sebastián no será como yo y mucho menos será como Sasha.