Puse los ojos en blanco.
Después de todo estaba equivocada, ahora Alex tenía su cara de "Te odio, sal de aquí".
Suspiré, y casi me reí. Después de haber ido a la escuela toda mi vida con Sam, estaba acostumbrada a sacar de sus casilla a tantos profesores como nos fuera posible.
Tomé mi chaqueta y mi pequeña mochila café.
Levanté las manos y le dije a Alex - Si eso quieres.
Obviamente no le hizo nada de gracia, tenía el ceño fruncido, y estaba apretando los labios.
Caminé hacia la puerta y salí del salón. Total, a mi me daba lo mismo estar afuera o adentro, ni siquiera estaba prestando atención.
Afuera había un corredor demasiado grande para una sola persona. -¿Qué? acaso solo yo me porto mal aquí - dije, mientras me sentaba en el piso del corredor.
Creo que no - dijo alguien de pie junto a la puerta.
Miré hacia arriba, y para mi sorpresa era Mike.
¿Qué haces acá? -pregunté
Hago mi buena acción del día "Carpe diem" -dijo Mike, sonriendo de nuevo. Este chico tenía ese tipo de sonrisa rara, que ni siquiera se completa, pero sabes que te gusta. - Además - agregó- Fue mi culpa que te sacaran ... acostumbro a distraer a las chicas bonitas.
Perfecto, ahora tenía que tratar con un maestro bipolar y un compañero hablador y vanidoso. ¿Puntos a favor? Los dos eran guapos.
Pues te equivocas - respondí - No me sacaron, yo me salí ... y no te hagas el don juan, yo igual no estaba poniendo atención.
Tranquila -dijo- Ya se le pasará, Alex es un poco malhumorado a veces.
¿Un poco? - Dije indignada- que chico tan amargado.
Tal vez, yo ya estoy acostumbrado - dijo
¿Cuántas veces te ha sacado del salón?- pregunté
Ninguna - dijo el - esta ni siquiera cuenta porque yo también me salí.
Hubiera querido salir del salón e irme a casa, como lo haciamos con Sam, pero si lo hacía tendría que escuchar todo el discurso de mi madre sobre ser responsable y todo eso.
Ella decía que cerrar círculos era importante. Yo a veces sentía que lo mío, eran cuadrados.
¿Entonces? - dijo, mientras se sentaba a mi lado - ¿Qué haremos para matar el tiempo?
Yo planeaba dormir - le dije- pero, soy muy perezosa como para caminar hasta la banca que esta al fondo.
Tengo una mejor idea - dijo, poniendose de pie - Vamos a la cafetería y comemos algo ¿Qué te parece?
Yo aún seguía sentada y el me estaba ofreciendo su mano para que pudiera ponerme de pie.
No tengo hambre, gracias - respondí - Ve tu si quieres, yo estoy bien acá.
No iré si tu no vienes - me dijo
Estoy bien, gracias - repetí - Cuando me fijé ya se había ido, y suspire. Me ponía nerviosa, eso pasaba, y sabia que podia controlarme, pero cuando el se acercaba, la Kate que me habia tenido a salvo ... simplemente se iba.
Saqué mi celular y revisé mis mensajes. Tenía un texto de Sam:
-"¿Ya cantas como Mariah Carey?"
Sonreí y le escribí de vuelta:
-A este paso no creo que lo logre muy pronto. ¿Adivina? ...
Sam respondió:
-Estas fuera del salón ¿Cierto?
-Vamos Kate, veo que te he maleducado muy bien. Eso me gusta.
- Pues no creo que esta vez sea mi culpa, el profe es un ogro. - le escribí
-¿Es calvo? -dijo ella
Me reí, y cuando empezaba a escribir para responder apareció Mike. Llevaba un café en cada mano.
-Podrás no tener hambre - me dijo mientras se sentaba a mi lado- pero igual traje uno para ti.
Lo miré con desaprobación, pero ... Dios, amaba el café caliente, y definitiva no iría caminando hasta la cafetería.
-No debiste - le dije - mientras el me daba uno de los cafés.
-Supuse que querias tomar algo, lo que no querias era estar conmigo - dijo mientras le daba un sorbo a su café - así que lo de el café podía solucionarlo, pero de mi no te vas a deshacer tan rápido.
Bah, los chicos con complejo de Don juan me fastidiaban la existencia.
Bueno, pues entonces te devuelvo tu café y de esa forma no estaré obligada a hablarte. - le devolví el café y saqué mi celular de mi bolsillo.
Puso los cafés en el suelo y mientras le escribia de nuevo a Sam, me dijo - Eres un poco malhumorada Kate pierce ... pero eso no te quita lo guapa - se acercó y me dió un beso en la mejilla.
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Polos opuestos
Teen FictionHay un tipo de personas que no encajan ... pero tambien estan aquellos que se resisten a encajar. Por esos rumbos me encontraba yo.