Capítulo 9

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Cada vez que cierro mis ojos recuerdo el baile de primavera, recuerdo a Iris con un vestido acampanado por un poco arriba de la rodilla de un color lila, un listón grueso de un tono algodón de azúcar para disimular su vientre, en eso entonces ella apenas 4 meses, no son muchos pero ya se le notaba algo.
Pero lo que me llama más la atención es el aroma de su fragancia que usaba esa día, su aroma ligero a rosas, para mí, toda una princesa.
Bailando alrededor de mi silla, sin preocupaciones de lo que los demás dijeran, bueno aunque esa es la frase de un típico cliché.
Aunque no lo parezca lo soy, muy cliché para ser verdad.

- ¿Estás bien? - preguntó Adam - Parece que no hubieses dormido en días.

- Algo parecido - le contesté - Solo estoy un poco desvelado - y vaya que era mi mentira habitual.

- Debe ser difícil, nunca te das por vencido y eres muy necio de pies a cabeza.

-No soy necio - lo interrumpí

- Cómo tú digas - dijo mientras acomodaba unas maletas en la entrada.

- ¿Para que son las maletas? - pregunté - no recuerdo nada sobre un viaje.

- Ammm, recuerdas que Mía nos invitó a su casa unos días.

- Si - asentí - no sé si sea buena idea ir.

- Por favor, ¿De qué estás hablando? - dijo antes de abrir la puerta - tiene algo de tiempo que no la visitamos y  pues le he rogado bastante a mamá para que fuéramos todos. Tu querido suegro vendrá a dejar a Iris en unos minutos.

- Está bien, osea que ¿me quedaré con ella mientras ustedes se van?

- No tonto, ella nos acompañará

- Pero sabes que hoy me toca terapia ¿Verdad?

- Lo sé, Erick te llevará y nosotros pasaremos por tí cuando termine.

Lo miré con un gesto algo inconforme, siendo un chico en silla de ruedas que no le queda más que decir a todo es deprimente. Pero deprimente como cuando vez una película bonita o cuando te dan una mala noticia, esto hacías que mi corazón se encogiera, que me costará trabajo respirar.

Pasó rápido la terapia, ya solo nos quedaban menos de una hora para llegar a casa de Mía. Vaya que vive muy bien para ser verdad. Cerca de la naturaleza, ella siempre sentía incomoda en la ciudad, me contaba que se sentía atrapada, sin paz.

Ventanas más grandes que las de un salón de clase, puerta de madera muy detallada, y un segundo nivel con varias habitaciones, absolutamente estábamos ya en la entrada de la casa de Mía.

- Esto no parece una casa, más bien  es la mansión de verano de los Morris - comento Erick - fácil está casa vale como 2 millones de dólares.

- 4 millones, para ser exacto - dijo Mía desde la escalera, tal vez queriendo imitar alguna película de ricos.

- ¿Como estás Mía? - preguntó mi madre - que pasó la cocherita ( fue la pequeña casa de soltera de Mía, y con pequeña realmente no era pequeña).

- La vendí para adquirir este mounstro. Pero no se queden parados, les mostraré sus cuartos.

- Mía, ¿Hace cuánto que tienes está casa? - preguntó Iris.

- Más o menos unos 4 o 5 años. Es poco, pero digamos que se a convertido en un escenario de esas asquerosas novelas exageradas de televisión.

- Claramente aún odias esas novelas - dijo mi madre entre risitas.

- Pero no más que tú - le contestó guiñándole un ojo.

- ¿Que hiciste para tenerla tía? - le preguntó Adam.

- No siempre nos irá bien en la vida, Adam, de lo que yo estudié actualmente de eso no vivo. Yo me moría por ser una exitosa diseñadora de modas, pero el miedo y los "no puedes" me dejaron traumada y sin valor - dijo abriendo un cuarto a su izquierda - así que cambie el diseño por algo que me dejara dinero, relaciones internacionales. Parece que en este retorcido mundo cuenta más el dinero y las cosas materiales que lo que nosostros queremos desde el corazón. Vaya que nos guiamos más por sentimientos, y son los que más nos ganan.

Vaya que esas últimas palabras si me habían tocado en mi alma. Me sentí inútil y más porque en ocasiones suelo ser muy explosivo.
Solo me di la vuelta y me dirigí a la estancia. Sonó mi celular, una llamada desconocida.

- ¿Diga? - contesté

- Hola Emmanuel, soy Christina.

- ...

Medio tiempo - (Mi Amor En Juego) #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora