Mierda. La cabeza me va a explotar, literalmente. Esto. No. Es. Divertido.
Aún acostada, volteo hacia mi mesita de noche y reviso mi reloj. Nueve y quince. Bien, tengo tiempo. Con el dolor de cabeza matándome, y la sensación de mi boca seca; me levanto de la cama y me dirijo al baño. Al entrar veo mi reflejo en el espejo.
«Ay, por Cristo. Estoy horrenda»
Mi cabello todo enmarañado y tengo unas pequeñas ojeras. Estoy fatal. Me lavo la cara y cepillo mis dientes, para luego darme una ducha rápida. Aún siento que huelo a licor, por lo que me echo mucho, mucho de mi jabón de coco. Una vez me siento limpia, salgo del baño, y me visto muy sencillamente: unos jeans, mi camisa de manga al codo color mostaza y mis Adidas.
Salgo de mi habitación, dispuesta a buscar qué comer. Y tomarme una pastilla para este dolor de cabeza. Pero al entrar en la cocina no esperaba encontrarme a un Jake semidesnudo.
-¡Ay, mierda, Jake. Cúbrete! -le digo tapándome los ojos con las manos. La verdad está desnudo de cintura para arriba, ya que una toalla cubre el resto de él.
-Tranquila, Sky. Estoy presentable. -dice en un tono tranquilizador, pero juguetón a la vez.
-Ya, amiga. Yo estoy más vestida que él. -escucho a Alise decir. Y, a continuación, ella me quita las manos de los ojos. Me sonríe y después se acerca a Jake, para depositar un tierno beso en su hombro desnudo.
-Sky, vienes un segundo conmigo, ¿Por favor? -pregunta Alise mirándome a los ojos.
Conozco esa mirada. Está feliz por algo. Y quiere compartir esa felicidad conmigo. Me lleva hasta su habitación, y luego me hace un gesto hacia la cama para que me siente, pero yo niego con la cabeza.
-Quien sabe lo que pasó en esta cama. -le digo. No era en serio, sólo quería joderla. Por lo que me senté en el suelo-. Espero que al menos el suelo se haya librado de su maratón de sexo.
Las mejillas de Alise se tornan de un rojo intenso, muerde su labio y luego sonríe. Una sonrisa que llega hasta sus ojos.
-Me pidió ser su novia. -dice aún roja.
-¿Novia? -pregunto incrédula-. Como... Novios, novios, ¿De los oficiales?
-Sí. De los oficiales. -me contesta sentándose frente a mí-. Dijo que ya no soportaba que sus compañeros de equipo, y otros chicos de Wooden intentaran ligar siempre conmigo. Que quería poder llevarme de la mano y decir orgullosamente "ella es mi novia".
-Y aceptaste, ¿Cierto? -pregunto esperando por un sí. Y cuando ella asiente, la abrazo y grito de felicidad-. Me alegra. Porque sé cuánto te gusta.
-¿Tan obvia soy? -inquiere cubriendo sus sonrojadas mejillas.
-Un poquito. -le contesto.
-Oigan, señoritas. -nos llama Jake entrando en la habitación-. Arréglense para sus clases. Tengo práctica en unas horas, y me da tiempo de llevarlas.
Ambas asentimos y yo salgo de la habitación para que puedan arreglarse.
-Oye, Jake. Si la lastimas, te asesino. -le advierto, haciendo una seña de que cortaré su cuello. Él asiente y me asegura que la adora y no le hará daño.
Pero esa es la cosa. A veces le hacemos daño a quienes queremos sin darnos cuenta.
****
-Bueno, que tengan un lindo día. -nos dice Jake una vez llegamos al lugar donde tenemos clase. Estamos donde Alise debe ir, yo debo caminar un poco más, pero aún me queda tiempo como para desayunar.
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Wicked Destiny
RomantikSky, una chica que sonreía cuando en realidad moría por dentro, vivió un pasado donde solo tenía mala suerte. Dolor, tristeza, decepciones. Y en el presente... Parece que no es diferente. Después de sufrir una traición que le dolió demasiado. Sky s...