how we spent;; di angelo [ES]

graduation

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—1, 2, ¡3!

En cuanto la cuenta atrás terminó, un grupo de unas veinte personas comenzó a lanzarme de todo tipo de cosas. Agua, harina, jugo de naranjas, hojas secas y espuma. Me pareció detectar un poco de crema batida también. Cerré los ojos al ver como el líquido anaranjado se estrellaba contra mi rostro.

— ¡Felicitaciones, Sam!

Solté una risa. Abrí mis brazos y dejé que mis compañeros de la universidad, mis amigos y mi novio me ensuciaran de cosas que probablemente me costaría limpiar luego. Por fin había terminado de estudiar: ayer mismo habían sacado los resultados de mi último examen. Oficialmente me había recibido.

— ¡¿Adivinen quién llegó?!

Apenas mi hermano terminó de hablar, sentí una ola gigante estrellarse contra mí. Abrí los ojos y observé las personas frente a mí. Austin y Leo traían algunas municiones de algún líquido extraño. Percy y Annabeth habían aparecido en el claro del bosque con una botella de jugo de limón. Cuatro chicos de mi clase de fotografía reían entre sí mientras se lanzaban entre ellos hojas y tierra que recogían del suelo. Jake y Kala habían terminado lanzándose harina uno al otro.

Me sentía tan feliz rodeada de la gente que quería.

Nico me sonreía desde lejos, con las manos manchadas de azul. Observé que mi camiseta blanca traía manchas azules que parecían azúcar con colorante. Sun, una de mis nuevas amigas, corrió a todos para poder tomarme unas fotos. Posé para ella un par de veces antes de que Piper se pusiera a su lado y tomara una lista invisible de su bolsillo.

—Percy, Annabeth, es su turno.

Ambos chicos avanzaron y se colocaron a unos metros de mí, haciendo muecas y poses de asco. Entendía completamente que no quisieran acercarse: seguro olía súper mal. Percy se acercó hasta mi lado y me rodeó con sus brazos. De todas formas, ya estaba sucio.

— ¿Quiénes pasan ahora, Sam?

—Puedes llamar a Austin y a Leo.

Los dos revoltosos salieron corriendo hacia mí y me taparon con más cosas. Cada uno me abrazó por un lado para la foto.

— ¿Cuándo le toca al novio? —gritó Connor Stoll junto a su hermano, quien había acabado con su carrera apenas unas semanas atrás.

Miré a Nico y lo vi sonreír de lado. Con las manos en los bolsillos avanzó hasta mí y se puso a mi lado.

—Di Angelo —dijo Piper—, si no muestras apenas un poco más de cariño te voy a robar a tu novia por dos semanas —Nico alzó una ceja—. ¿Acaso lo dudas? —Se giró a verme a mí—. Sam, ¿qué opinas de que te lleve a un estudio de grabación donde trabaja mi padre?

Mis ojos se iluminaron al instante. Abrí la boca para contestar pero no me dejaron.

—Ya entendí, ya entendí.

Nico pasó su brazo alrededor de mis hombros, me acercó a él y sonrió para la cámara.

— ¡Eso es! —gritó Pipes, viendo la escena por encima del hombro de Sun—. ¡Más amor, Nico! ¡Besa su mejilla!

Sentí sus labios sobre mí enseguida, dándome un beso sonoro.

—Dios, los shippeo tanto —escuché decir a Sun.

Hice una mueca de asco al sentir la lengua de mi novio sobre el costado de mi rostro.

— ¿Qué estás haciendo? —escuché la voz de Percy un poco enojado.

— ¿Quién hizo el jugo de naranja? Está delicioso.

Siguió lamiendo mi cara y luego estampó sus labios contra los míos, pasando sus brazos hacia mi cintura. Los movió lento, dejándome con ganas de más cada vez que nuestras bocas perdían contacto. Metió su lengua entre medio y comenzamos a escuchar quejidos de las personas alrededor. Sonreí en medio del beso, cortándolo unos segundos, y Nico volvió a besarme. Me hizo girar hasta que él les diera la espalda a los otros presentes.

— ¡No tiene su título aún y tú ya estás recibido, Di Angelo! ¡Si no sueltas a mi hermana te voy a denunciar por acoso a menores!

—Ya tiene 23, Percy —dijo Annie.

—Te juro que si alguna vez le pone un solo dedo encima la va a pasar mal.

Esta vez fue Nico el que cortó el beso para sonreír.