All Might y EraseHead [LyO II]

8. La pregunta correcta.

Todos estábamos en lugares desafortunados. Midoriya se encontraba gravemente lesionado y el objetivo de los villanos era Bakugo. Deje al pequeño Kota junto con los chicos que estaban en el campamento, y les di permiso a los chicos para defenderse, debido a la situación.

No sabía como habían conseguido ubicarnos, pero de un momento a otro los villanos se fueron, eso solo podía significar que su objetivo había sido cumplido y tenían a Bakugo.

Midoriya fue llevado al hospital, Todoroki si encargo de contarme como sucedieron las cosas y después fue reunido con los otros. Los que necesitaban tratamiento medico fueron con Midoriya. Rescatamos a todos los que estaban en el bosque, pero la perdida era evidente.

Todos parecían estar conmocionados. Llame a All Might y lo convencí de que lo mejor sería vernos en el hospital, de esa manera podría ver a Midoriya. La policía llego a la escena y después de algunas preguntas todos nos retiramos, a excepción de los pussycats, quienes también sufrieron una perdida.

Me dirigí al hospital para sabe las condiciones de todos los alumnos internados, estaba en la sala de espera esperando a los doctores y a Yagi, quien llegó corriendo o así perecía pues se veía agitado. Tardo unos segundos recuperando el aliento, me levante de mi asiento y me acerque un poco a él.

—¿Tú estás bien? —me pregunto.

—Si... —le dije, un poco sorprendido, no pensé  que eso sería lo primero que me preguntará.

—Eso es bueno —dijo, sonriendo levemente y tocándose— su pecho.

—Estoy esperando que me digan las condiciones de Midoriya, Momo, Jirou y Hakurage —le dije, no sabía que más decir.

—Entonces esperare contigo —me respondió y se sentó.

Yo hice lo mismo, parecía estar tranquilo, yo no podía sentirme de la misma manera, o es que no sé que es lo que en realidad siente.

—Todo estará bien, los chicos son fuertes —me dijo, con una sonrisa.

Gire mi rostro, mirando al suelo —no es necesario que seas un héroe conmigo... 

—Lo sé, pero es lo que de verdad creo, creo que ellos son fuerte, tú los has hecho fuertes —me dijo, bastante calmado.

No sabía que responder ante eso, solo lo mire de nuevo, esos ojos azules profundos, daban algo de miedo cuando no estaba en su forma musculosa, pero podían apreciarse más, hasta que él desvió la mirada. Ahora era él quien veía al suelo.

—Yo... Temí por todos, cuando me llamaste, pensé que también estabas herido, y quise correr a buscarte...

—Te dije que no podías hacer eso —le dije.

—Lo sé, intente calmarme y recordar tus palabras, yo lo resistí, pero no sé si pueda hacerlo de nuevo... —dijo, con su maldito heroísmo.

—Estuve pensando en la charla que tuvimos y decidí preguntarte... —dijo, suspirando, giro viéndome de nuevo —¿Tú me amas? 

No pude evitar sorprenderme por su pregunta, escogió el peor momento para hacerla, y me daban ganas de golpearlo en la cara por hacerla mientras yo tenía mi mente ocupada con otras cosas. Esa era la pregunta más difícil de todas y lo odiaba por hacer que pensara en lo que paso, en el pasado y en la charla que tuvimos.

Decidí responderle, de todos modos ya me había hecho recordar todo eso, ya no eramos niños y de todos modos lo iba a saber tarde o temprano. Trate de ser lo más concreto y honesto posible.

—Lo hago, incluso cuando intentaba odiarte, incluso después de tanto tiempo sin vernos, intente sentir otras cosas por ti, intente no sentir nada, pero siempre terminaba amándote, así que si, te amo.

Después de decirle todo eso, en su cara, nos quedamos en silencio, mirándonos, hasta que decidió mirar de nuevo al suelo, parecía nervioso, cosa que yo estaba evitando para mi mismo ¿es qué no ha a prendido a controlar sus emociones?

—Ahora solo necesito saber que todos estarán bien, tengo otras cosas que pensar, espero que lo entiendas.

—Claro, lamento haberte distraído solo por eso —me dijo, relajándose.

Para mi tampoco era un tema que se tenía que tomar a la ligera, pero es algo de lo que no quería hablar con el ahora, pero no puedo cambiar el modo en el que lo tomo...

—Usted es el encargado de Midoriya ¿cierto? —pregunto el doctor.

—Si —le dije, levantándome nuevamente.

—EL joven sufrió mucho daño en sus brazos, en especial en uno de ellos, necesito su historial medico además, sigue inconsciente, pero es lo mejor por ahora. En cuanto a las dos chicas intoxicadas, me informaron que estarán inconscientes, pero su vida no corre peligro, es igual para la otra joven que sufrió una conmosion muy fuerte en su cabeza, ella también se recuperara.

Después de escuchar al doctor hicimos las llamadas correspondiente, llame a Recovery Girl para que tratara a Midoriya y trajera su historial medico, y llame a su madre, la cual rompió en llanto en cuanto le di la noticia, no soy muy bueno alentando así que solo le dije que sería bueno que viniera a verlo.

En todo ese tiempo él estuvo esperándome. Me dejaba muy mal el escuchar a la madre de Midoriya llorar, son estás cosas las que me perturban, por eso le dije que era importante que controlara su poder. Y ahora tenía a mi lado al causante de que ese niño se este desgraciando los brazos.

—Sé que estás molesto, pero a veces cuando te molestas es porque también estas triste ¿no? 

—No hables como si me conocieras, han pasado muchas cosas y ya no somos lo que solíamos ser, tan solo hace falta echarte un vistazo para saber eso —dije, aunque no había pensado mucho antes de decir todo eso, tal vez solo me estoy desquitando con él.

—Lo siento —me dijo, alzando las manos —yo tampoco quiero que ellos estén aquí...

—Si no querías esto entonces ¿para qué le diste tu poder? —le dije, y me fui.

Los días siguientes los tenían libres, la policía se encargo de averiguar todo lo que se necesita para la liga de los villanos, y lo consiguieron, poco a poco, Momo y los demás fueron despertando, y nosotros hacíamos un plan para recuperar a Bakugo.

La molestia que sentía desapareció y llego la culpa, a pesar de todas las cosas que le dije, cada vez que nos veíamos me sonreía levemente. Yo quería disculparme, pero no pudimos hablar, ambos estábamos ocupados.