Capítulo 16: La víbora y el mito.

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― ¿QUE MIERDA? ―La luz natural de un hermoso sol apuntaba directo a su cara, alguien se había atrevido a abrir la ventana―¡MAMA! ¿SE PUEDE SABER QUE HACES? ― Una Camila toda despeinada y tratando de cubrirse los ojos había salido de entre las sábanas para despedazar a quien hubiera osado a despertarla. La empresaria agarró un almohadón para tirárselo a su madre, pero la Señora Cabello lo esquivó con habilidad.

―No contraté a un hermoso hombre musculoso para que me entrene en vano hija mía―le explicó esquivando el segundo almohadón.

―Pero mamá, ¡Tenemos sueño! ― ¿Tenemos?

―Ya es hora de despertarse Camila, son la una y el almuerzo va a estar listo dentro de poco―anunció con una voz melódica la mujer.

―Mamá no tenemos quince años para que nos vengas a despertar para ir al colegio...―vaya a saber porque la morena hablaba en plural. La cara de desconcierto de la mayor habló por si sola.

― ¿Tenemos sueño? ¿A despertarlas? ¿A ti y a quién más? ¿Acaso dormiste con alguien Camila? A tu padre no le va a gustar nada―levantó su ceja mostrando que era una habilidad que se traspasaba de generación en generación.

Camila frunció su ceño― Espera un momento...―giró su cabeza rápidamente inspeccionando la habitación en la que estaba―Yo no me acosté en esta cama, me acosté en la del cuarto de invitados con...con Lolo... ¡LAAAUREENNNNN! ―saltó de la cama más rápido de lo que su madre en su vida la había visto hacerlo.

―Si hubiera sabido que Lauren iba a hacer que te levantaras rápido, la hubiera levantado a ella primero―le dijo su madre aguantando la risa.

―No es gracioso mamá―protestó Camila buscando en su maleta algo para ponerse―Esa maldita ojiverde siempre se sale con la suya, le advertí que no me cambiara de cama―Por lo poco que había visto, el día iba a estar hermoso para disfrutarlo en la piscina, por lo tanto, agarró su bikini rosa chicle, que era su preferido y dejaba mucha piel al aire, iba a hacer sufrir a Lauren por desobedecerla una vez más. Se metió al baño para cambiarse. Su madre la siguió, pero se quedó del otro lado.

Al parecer Sinu iba a pasarse el día entero con su ceja levantada―No sabía que dormían juntas ―fue una pregunta disfrazada de afirmación. La señora Cabello sintió ruidos en el baño y esperó paciente a que su hija saliera a responderle.

―No lo hacemos―contestó apenas salió―Es decir, si dormimos en la misma cama, pero solo dormimos y generalmente nos separa una montaña de almohadones―explicó todo lo que podía sin referirse al miembro de la ojiverde mientras se tapaba el bikini con un simple vestido de playa blanco.

― ¿Y anoche no lo hicieron? ―Sinu agitó su cabeza ante su mala elección de palabras― Es decir... ¿Anoche no durmieron juntas? Porque tú estás en tu habitación y ella...

Camila se tapó su cara con sus propias manos y se tiró suspirando en su cama― Es... es complicado... ―dijo.

―Camila...―su madre quería ayudarla verdaderamente.

―Es muy complicado―repitió― Todo con Lauren parece costarme el doble―agregó abriéndose a su madre― Anoche antes de los fuegos artificiales hablamos...―entre otras cosas que su madre no necesitaba saber―Y la sentí más cerca que nunca mamá, pero a la vez...

―A la vez muy lejos―completó Sinu logrando que su hija le diera la razón.

―Después, entre Vero y sus dramas alcohólicos, Lucy y su llanto inconsolable, el resto de los invitados, fue imposible que siguiéramos hablando y la perdí de vista nuevamente―contó― No la encontré hasta que papá me dijo que la había visto entrar a la casa.

Soy Para Ti (Camren G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora