Cap. 4

788 97 22
                                    

Estábamos los dos sentados en el sofá viendo televisión.

Para este entonces ya habia una tormenta bastante fuerte.

Todo iba muy tranquilo, me la estaba pasando bien, pero un rayo cayó y lo arruinó todo haciendo que se fuera la luz. Olvidé mencionar que le tenía miedo a la oscuridad. Lo único que pude hacer fue abrazar a Taeyong buscando protección, el se dió cuenta, asi que rodeó mi espalda y me apegó más a si mismo.Nos quedamos asi unos minutos hasta que rompió el silencio.

-Ten, ¿estás bien? Voy por algo para alumbrar un poco.
Y así fue, se levantó de allí para ir en busca de algo que nos brindara luz, mientras que yo solo pude acurrucarme en la orilla del sofá. Taeyong regresó con algunas velas y una linterna que usaba baterías. Ya pasaban de las 9:00 pm.

Llevábamos mas de media hora sin luz y no parecía que fuera a volver.

-Taeyong, yo ya mejor me voy, creo que por hoy ya te he dado muchos problemas y no quiero incomodar mas, gracias por la comida.- Ya iba camino a la salida hasta que Taeyong tomó mi mano.

-¿Estas seguro? Hay una tormenta afuera y está completamente oscuro, no puedes salir así, te vas a enfermar, ¿y si te quieren asaltar? Quedate aquí, en mi cuarto y te presto ropa, yo puedo dormir en el sillón, pero no vas a salir así- dijo preocupado.

-Enserio no te preocupes, voy a estar bien, me tengo que ir.

- Quédate.

-Esta bien, pero tu no dormirás en el sillón, vas a pasar frío.

-Entonces dormiré tambien en el cuarto.

-¿Dónde?

-Tambien hay un sofá ahí.

-Entonces yo duermo en ese sofá y tu en la cama.

-Pero...

-Me dejas dormir ahí o me voy.

-Bueno, entonces ven, debes cambiarte.

Lo seguí hasta su recámara, era muy grande para una sola persona.

-Mira, puede que esto no te quede tan grande, póntelo- dijo dedicandole una sonrisa.

-Gracias.

Fui a cambiarme al baño mientras el hacía lo mismo en el cuarto. Me dió una sudadera y un pants, me puse su ropa y pude percibir su olor tan masculino impregnado en esta, no pude evitar sonrojarme.
Al salir no habia nadie en la habitación, asi que me senté donde iba a dormir y prendí mi teléfono. Minutos después Taeyong regresó con algunas cobijas ya que hacía frío. Me levanté para ayudarlo, tomé algunas de las mantas y las llevé a la cama. Taeyong rió .

-¿Pasa algo? - dije volteandolo a ver, pero el solo rió más fuerte.

- Perdón pero esque mi ropa te queda demasiado grande - dijo aún entre risas
-además te hace ver muy bonito- apretó las mejillas del contrario, este se sonrojó.

-Ah, por favor no hagas eso- contestó apartando las manos de Taeyong -¿Ya vamos a dormir?

-Si, perdón.

La tormenta ganaba intensidad conforme pasaban las horas y las velas ya habían sido apagadas para intentar descansar.

Los rayos y truenos cada vez eran más seguidos y más fuertes. Ten tenía miedo y lo único que podía hacer era brincar y esconderse bajo las cobijas no quería molestar más a Taeyong; pero éste se dio cuenta de lo que sufría Ten.

-Ten- susurró.

-¿que pasa?

-Ven.

-¿para qué?

-Solo ven y trae una cobija.

-Voy.

Ten se dirigió a dónde Taeyong tal y como le había indicado.

- ¿estás bien?

-no puedo dormir

-¿por?

- Esque... me dan miedo las tormentas- Ten admitió avergonzado.

-¡Que lindo!- contestó Taeyong apretando de nuevo las mejillas de Ten muriendo de ternura sobre lo que éste había dicho; en ese momento un rayo cayó brindando la luz suficiente para que Tae pudiera apreciar el lindo sonrojo que había provocado en Ten.
Esta vez Ten no hizo nada para quitar las manos del otro.

-Duerme conmigo- Dijo Taeyong soltando a Ten.

-¡¿Qué?! ¡no! Pero...-

-Solo ven- dijo mientras lo llevaba a la cama intentando recostarlo.

Ten no quería... No podía ceder, asi que mientras el pelinegro se acomodaba en la cama, intentó salir de esta pero Tae lo jaló.

-¿Tan rápido huyes de mi?

-No puedo, no me dejas huir- contestó friamente volviendo a la cama.

A pesar de tener compañía no podía dormir, no sé si era por los nervios, el miedo, o las dos cosas, entonces me quedé viendo mi móvil utilizando los pocos datos que me quedaban. Taeyong parecía ya estar dormido.

-Ya deja tu celular- dijo mientras se volteaba hacia Ten y se lo quitaba. -Mejor duerme.- completó, para después abrazarlo y enredar sus piernas entre las contrarias apegandolo más a el.

Ten suspiró.

-¿Por qué tienes que hacer latir tan rápido mi corazón mientras estoy contigo Lee?- dijo intentando que no lo escuchara mientras se acurrucaba en el pecho del mas alto.

-¿Y por qué tienes que hacer lo mismo con mi corazón Chittaphon?- contestó pegando su frente a la del castaño haciendo que sus respiraciones se mezclaran, así durmiendo abrazados toda la noche.

***

Perdón por lo cursi del capítulo y lo
largo que está, pero asi me gustó.
Una disculpa

Adiós 🖤

Sólo un pretexto|TaeTenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora