Cap. 19

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Se quedaron juntos algunos minutos, sintiéndose, estando el uno con el otro, queriéndose sin necesidad de más.

-Taeyong ...

El mencionado rió - ya te dejo desayunar- lo separó lentamente y cuando lo pudo ver tomó sus hombros antes de que se fuera.

-¿Qué pasa?

-¿sabes?...

-¿Qué cosa?

-Te quiero Tennie.

El menor asintió nervioso y sonrojado sin saber cómo responderle, a lo que el otro ríe y da un beso en su mejilla. Ten se movió y Taeyong lo siguió.

-Entonces dime, ¿qué vamos a hacer?

-Sándwiches- abrió la puerta del refrigerador y sacó lo necesario.

-¿A qué te ayudo?

-No sé que quieras comer a parte, si quieres pica fruta para ti o haz café o jugo.

-¿Qué fruta quieres que pique?

-La que tú quieras. Yo no como fruta; e-es una larga historia, no preguntes.

-¿Seguro?

-Sí.

-Está bien, entonces también haré café.

No les tomó mucho tiempo preparar las cosas, pues realmente la cantidad de comida para dos personas no era mucha. Tenían planeado salir a las 15hrs con una canasta o algo parecido que cargara la comida y se sentarían en el pasto. Pasarían un bonito momento juntos; y lo más importante, antes de tener que regresar a casa, se verían en esa escena cliché donde se acuestan en el pasto los dos juntos y comienzan a mirar las nubes intentando descifrar sus figuras, o eso es lo que Ten estaba imaginando mientras su hyung le estaba hablando.

-¿Ten? ¡Ten!

-¿E-Eh?- salió de sus pensamientos por un momento para ver que necesitaba Taeyong.

-¿Me escuchaste?

-¿Qué? A-Ah, s-sí.

-¿Entonces si me acompañarás al supermercado?

-¿Ya?

-No.

-No te escuché, perdón.

- Te dije que si después del pícnic me puedes acompañar al supermercado porque necesito cosas para sobrevivir en mi casa solito.-

-¿solito? ¿sobrevivir?- Ten soltó una sonora carcajada- Pero si siempre estás aquí o yo allá, no tienes derecho a decir que estás solito.

-De cualquier modo, necesito comprar la despensa, mi refrigerador está vacío.

-Bien, te acompaño.

Siguieron desayunando mientras platicaban, no había nada que hacer más que alistarse, pero aún era temprano, así que procedieron a limpiar, lavar y ver televisión, o mejor dicho, Taeyong vería televisión y Ten tomaría un siesta de 20 minutos que se prolongarían a 1 hora. Después de eso, tuvieron que ir a arreglarse y ponerse presentables para salir.

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Bueno, el pícnic al final no fue del todo como se esperaba, no salió mal, pero no fue completamente lo que Chittaphon quería.

En primera, no  vieron las nubes, no salió la iniciativa y Ten no le iba a decir "miremos las nubes como en las películas románticas",obviamente no lo diría; segundo, cuando caminaban hacia el lugar donde sería su pícnic, en el pasto había un desnivel que hizo que Ten cayera al piso, Taeyong lo ayudó y no se rió de él, o por lo menos aguantó la risa, pero eso no evitó que las personas a su al rededor no lo hicieran, pasó lo que menos quería que pasara frente a Taeyong: una situación vergonzosa; y tercero, estaban comiendo tranquilamente disfrutando de su pícnc hasta que una oruga decidió caer del árbol justo en el pedazo de manzana que Taeyong llevaba en la mano, entonces cuando la vio, soltó la manzana y se abalanzó sobre Ten gritando que había una oruga, a lo que el menor, en lugar de quitarla, también se asustó y ambos terminaron gritando esperando que el insecto se marchara.
Fuera de esas tres cosas, la "cita" no estuvo mal, mucho menos cuando el aire frío llegó y Taeyong abrazó a su menor para brindarle algo de calor; a pesar de no haber mirado las nubes, ese fue el momento que más disfrutó.

Sólo un pretexto|TaeTenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora