capítulo 49

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Narra Ares

Me dirijo al estúpido instituto en mi moto, acelero y llego. Cómo siempre tarde pero nunca me a importado desde que estoy aquí en este pueblucho.

Tengo mis lentes oscuros, junto con mi cazadora negra y mis pantalones rotos. Mi cabello rojizo como siempre desordenado.

Voy al salón de física, entro y el profesor me mira mal.

Sigo de largo y me siento en el último puesto.

Veo que a mí lado no está la lobita, frunzo el ceño.

Le restó importancia y me hago el desinteresado de la clase. Tocan la puerta y el profesor abre la puerta.

- quienes son ustedes? - pregunta el profesor

- somos los nuevos alumnos de intercambio de Alaska - escucho una voz grave

- pasen pero no vuelvan a llegar tarde, se los dejaré pasar porque son nuevos

Pasan un chico cabello oscuro y ojos azules, el otro es cabello castaño ojos mieles.

Empezó a apestar a perro, más Canes a los que vigilar.

- presente se - le dice el profesor.

- Jeziel Smith - dice el ojos azules

- Asher Brown - dice el otro

- tomen asiento

El tal Smith viene y se sienta a mí lado, el otro se sienta a dos puestos de aquí.

Se torno incómodo el momento

- no me imaginé que en este instituto hubieran vampiros - escucho a mi lado.

- y yo no pensé que llegarían más perros - digo cortante

Se ríe

- no debería de extrañarme, hay dos familias de vampiros en este pueblo, siendo realmente territorio de lobos - me tenso

No pienso contestar.

- te mordiste la lengua sanguijuela - me dice con burla

Siento mis ojos oscurecerse más.

El timbre suena.

Me levanto rápido y lo escucho.

- huye como el insecto que eres

Hijo de puta.

Voy a la cafetería, me siento al lado de Jaden.

- por qué tú cara de que quieres arrancarle la cabeza a medio mundo?

- porque eso quiero hacer, acaban de llegar unos perros nuevos - le informo

- pueden ser una amenaza? - pregunta Jaden serio

- puede ser, uno de ellos se nota que no le agradan los vampiros así que hay que estar alertas con ellos

- estar al pendiente de más cosas?... Joder, no salimos de una cosa para que aparezca otra.

Están entrando a la cafetería.

- Jaden quiero que le tengas un ojo puesto a ellos - no me agradan en lo absoluto.

Nadie me agrada realmente, pero hay algo de esos dos que no me convence y siento que nos darán muchos dolores de cabeza.

Agarro la manzana de Jaden y le doy un mordisco.

Noto que Jaden se pone tenso y se encuentra muy serio.

- por supuesto que les tendré el ojo - dice de repente.

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