capítulo 78

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Narra Cailin

Paso mi lengua por dedo.

Libera mi labio de su dedo, baja y agarra mi barbilla, levanta mi cara.

Pasa su lengua por mi labio y luego los atrapa con sus dientes, pasa su mano por mi nuca. Me acerca más y me besa.

Me besa con fuerza y rapidez, pasa su lengua y correspondo a su caricia.

Se hace un poco de lado para profundizar más el beso. Paso mi mano por su nuca, jalo un poco las hebras de cabello que tiene allí. Gruñe contra mis labios.

Se alza un poco y termino arrecostada en su sofá, el hace espacio entre mis piernas.

Seguimos besándonos.

Nos separamos y el baja para besar mi cuello, cierro los ojos. Clava sus colmillos en mi piel y empieza a succionar.

Muerdo mi labio con un poco de fuerza reprimiendo mis jadeos

Sale de mi cuello y vuelve a besarme

Narra Ares.

Sigo besándola, quiero tocarla.

Toda esta semana no e podido sacarla de mi maldita cabeza, cada vez que intento dormir despierto con una maldita erección.

Y lo que más me tenía en la mierda era el hecho que me ignoraba, eso nunca me había pasado en mi puta vida

Paso mi mano por su cintura y la alzó, la coloco en mis piernas.

Agarró el control como puedo y apagó el maldito televisor.

Seguimos besandonos.

Paso mi mano por su espalda hasta llegar al borde de su camisa, adentro mis manos y toco la piel de su espalda.

Libero sus labios y vuelvo a meterme en su cuello dejando un rastro de besos húmedos en su piel caliente.

Llego hasta el broche de su sosten y lo desabrochó con habilidad, ella se sobresalta.

Sonrió contra su piel.

La haré sufrir por haberme ignorado

Paso mi mano por sus costados, luego rozo mis dedos por debajo de sus senos.

Levantó la camisa y se la quitó.

Tiene sus manos sosteniendo las copas del sostén.

La miro

- suelta - le digo

Duda en hacerlo, subo mis manos por su espalda hasta llegar a sus hombros, hago a un lado las tiras y ella decide soltar el sostén.

Vuelvo a pasar mis manos por sus costados hasta llegar a sus senos, los agarró entre mis manos y empiezo a masajear los.

Coloco mi cara entre su cuello y clavícula.

Ella jadea y se mueve inquieta.

Muerdo su hombro y luego paso mi lengua para aliviar el ardor

- A-Ares - dice con su voz ronca.

- umm ... - digo

No dice más nada cuando meto a mi boca uno de sus senos, juego con ellos, le doy mi tiempo a los dos.

Bajo mis manos hasta su pantalón, desabrochó su pantalón.

Adentro mi mano en su pantalón, se tensa.

Adentro mi mano en sus bragas

Jadea.

Abro los pliegues de su feminidad.

Alma Indestructible Donde viven las historias. Descúbrelo ahora