El grito que su madre le dió hizo que maldiciera al desconcentrarlo. Números, letras y signos estaban revolviéndole los sesos en estos momentos.
»—¡Estoy hablándote, Park! ¡Necesito qué vallas por pan!.
—Maldición. ¡Ya voy!.
Contestó de vuelta, cerrando su cuaderno con fuerza y lanzando el lápiz en sus manos lejos. Odiaba tanto que su madre le molestara cuando estaba estudiando para algún exámen, o haciendo algun trabajo. Bajó las escaleras con una mueca en sus labios, y una mirada de total molestia.
—Al fin bajas, cariño.
—Mamá, estoy estudiando. ¿No puedes ir tú?— reclamó.
—Iría, pero está tu tía Ha-Neul— llevó su mirada hacia donde su madre apuntaba, viendo como la recién nombrada conversaba alegremente con su padre, y un YoonGi totalmente aburrido en uno de los sofá individuales— por favor. Ve, y cómprate algo con el dinero que sobre.
Park suspiró, asintiendo y tomando el dinero con desagrado. Salir no estaba en sus planes el día de hoy.
—Espera. Te acompaño, Park.
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Yoon: ¿Remember?👀
El pelirrojo rió levemente al leer el mensaje, negando con cierta diversión para escribirle de vuelta al pálido.
Minnie: Remember👀
YoonGi mordió su labio inferior, guardando el móvil en el bolsillo de su holgado pantalón, soltando un suspiro, y mirando de reojo al menor, quien caminaba tranquilamente.
Era increible, pero sea lo que sea que estaban teniendo, iba, de cierto modo, perfecto. No habian reglas que les impidieran hacer lo que quisieran. YoonGi agradecía la vez que tubo el valor suficiente para robarle un beso a Park, importandole poco el si este era heterosexual u homosexual— en aquel entonces no hablaba mucho con el muchacho—.
La presencia de JiMin frente a él le hizo detenerse, y salir de sus pensamientos con respecto al beso que le había robado al chico de negros cabellos de aquel entonces. La tierna y amable sonrisa que el menor le estaba dando lo descolocó por un momento de si mismo, e inconscientemente ladeó su cabeza
—¿Qué sucede?.
—Nada. Sólo quería verte— soltó, aún mantenido su sonrisa.
—...Ok. Algo anda mal— Min se cruzó de brazos, alzando una ceja— tú no eres tierno ni amable conmigo. A menos que quieras algo. Así que, ¿Qué quieres?.
JiMin sonrió en grande, sintiendo como sus mejillas ardían— quiero un beso.
El pálido observó por algunos minutos al pelirrojo, manteniendo una pequeña 'o' en sus finos labios. Lo habia tomado por sorpresa. JiMin, al presenciar el sorprendido rostro del mayor, rió, cubriendo sus labios con una de sus manos tiernamente. Se acercó al peli-negro, rodeando sus brazos alrededor del cuello de YoonGi, manteniendo una corta distancia entre sus labios, admirando de cerca los oscuros y gatunos ojitos de su Hyung.
»–¿Por qué tan sorprendido?— preguntó en un susurro.
—A veces lo haces, niño. Enserio.
Ambos sonrieron, mirándose con cariño, mientras que Min posaba sus manos en las caderas de Park, besando con ternura el abultado labio que JiMin tenía. El menor rió nasalmente, sintiendo como YoonGi lamía, chupaba, y mordía sus labios juguetonamente, sin dejar de verle.
»—Vámos por el pan.
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