Embarazo.

5.5K 595 404
                                        

—No sabes la cantidad de edits que hacen de nosotros. Te sorprendería.

Emilio navegaba en su celular tranquilamente mientras Joaquín le hacía piojito. Ambos se encontraban recostados en la habitación del rizado. Habían quedado con sus madres que iban a ensayar las líneas del teatro desde temprano. Mentían para poder estar con la puerta cerrada.

—Ya lo sé, y son buenísimos.— Joaquín acariciaba suavemente el cabello del rizado.

—Encontré uno en donde estoy con Michael Jackson. Que chingón.

—EMILIO.— Joaquín emitió un gritito haciendo que el rizado dejará su celular para concentrarse en su novio. —Te encontré algo.

Joaquín fingía sostener algo entre los dedos mientras que el rizado moría de miedo permaneciendo inmóvil sobre el regazo de su novio. Quizá se había contagiado de una plaga por tener el cabello tan largo. Se maldijo internamente.

—¿Es lo que creo que es?

—Me temo a que si.—Joaquín observaba fijamente sus dedos fingiendo ser un experto en ese tema.

—Mata a ese piojo bastardo.— Emilio estaba expectante a los movimientos de Joaquín, quería ver la muerte de su enemigo mortal ante sus ojos.

—ACABA DE BRINCAR.— Joaquín no podía contener la risa al ver la reacción del rizado parándose rápidamente para sacudir su cabello. Emilio lo vio con los cachetes inflados y lo supo al instante. Joaquín le había tendido una de las bromas inocentes que le gustaba hacer.

—Que gracioso.— Emilio volvía a acomodarse encima del regazo de Joaquín para seguir viendo los edits.

—No salió como esperaba pero fue trabajo honesto.

—No mames, mira esto.— Emilio puso el celular a la altura adecuada para que el menor pudiera ver la imagen. Habían hecho parecer que Joaquín estaba embarazado en un edit.

—Me veo fatal.

—No es cierto.— Emilio lo veía con las cejas alzadas.

—Claro que si, lo dices porque me amas y no me quieres lastimar. Acéptalo.

Te ves hermoso, y más por que seguramente el hijo que llevas es mío.

Emilio escuchó a Joaquín reír y decidió cobrar su venganza. Disfrutaba ese edit porque quizá en lo profundo deseaba que algún día pudiera llegar a pasar. Se sentó frente a él y tomó su vientre con la mano mientras lo veía fijamente a los ojos. Joaquín reía viéndolo raro.

Eres el fruto de nuestro amor. Yo te voy a cuidar más que a mi propia vida y que a tu padre. Espero tu llegada con ansias, Emilio. El rizado le hablaba al plano vientre de Joaquín.

—¿Que haces? Tu mamá puede entrar en cualquier momento, sería raro encontrarte así.— Joaquín no paraba de reír mientras Emilio acariciaba suavemente su vientre.

Trabajaré duró para que no hayan piojos en tu cabecita. — Emilio levantaba la camiseta de su novio mientras este lo detenía rápidamente.

—NO, estás loco. Ni siquiera lo pienses.

—Déjame ver a nuestro hijo.

Joaquín reía mientras forcejeaba con su novio que no paraba de sonreír y susurrarle a "Emilio" que lo amaba. El rizado logró meter una almohada adentro de la playera de Joaquín. Río ante la imagen de su novio que parecía tener estómago de borracho antes que alguien embarazado.

—Eres hermoso.— Emilio río mientras besaba rápidamente los labios del menor. Tomó su mano y lo guió al primer espejo que encontró.

—No puedo creer que estamos haciendo esto.

—Hay que tomarnos una foto.

No mames Emilio.

—No digas malas palabras enfrente del bebé.

Emilio se situó atrás de Joaquín simulando una bonita familia. Abrazo a su novio por la espalda tomando la almohada con precaución. Joaquín no paraba de reír por lo tonto que Emilio podía llegar a ser.

—Parecemos de catálogo.

—Del más perturbador que haya existido.

La puerta de la habitación de Emilio se abrió, haciendo que ambos reaccionaran rápido. Emilio se recargó nada natural en el espejo y Joaquín se tiro encima de la almohada en el piso. Mary, la nana de Emilio los veía con ganas de romper a carcajadas.

—Ya vinieron por Joaquín.

—Gracias Mary, va en 5 minutos. —Mary salió asintiendo, cerrando la puerta detrás de ella.

Joaquín se paro de inmediato dejando la almohada en su lugar. Emilio miraba la escena transtornado.

—Que bueno que no fue mi mamá la que vino. No me gustaría tener que explicarle todo esto.

—Pienso lo mismo.

Emilio lo besó para después acompañarlo al recibidor.

-

Joaquín desayunaba cereal con leche mientras veía su celular. Un mensaje de Emilio llegó rápidamente.

Emilio, por otra parte, seguía disfrutando de la edición de los fans.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Instagram Emiliaco ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora