Un Matrimonio "Ilegal" [NS] (Wattys2019)

Capítulo 21

Himiko llevaba a Hinata sujetada de un brazo por miedo a que volviese a desplomarse, por suerte Chiyo ya no estaba en la mansión, así que no vería el estado tan deplorable en que estaba su hija. Ella tuvo que conducir de regreso, de haberlo hecho Hinata, lo más probable es que hubiesen tenido un accidente, todo el camino fue en silencio, por más que Himiko intentó hablar nunca obtuvo respuesta.

—Hija, vamos a tu cuarto, necesitas descansar.

—¡No, mamá! —para ser la primera vez que le respondía desde lo sucedido, se seguía viendo afectada por todo. Sus ojos expresaban todo el dolor y la traición que albergaba en su pecho. —¡Deja de decirme que lo único que necesito hacer es descansar! Tú los viste, ¿no? ¡¿Los viste?! Se supone que hoy es nuestro aniversario, ¿por qué, mamá? ¿Por qué está con él y no conmigo? ¡Maldición, yo soy su esposa! —las lágrimas bajaban por sus mejillas sin parar, de tanto jalar su cabello ya había logrado despeinarse, dejando peor su aspecto.

—¡No ibas a poder evitarlo, hija, ni siquiera yo! No quería que te enteraras de esta manera. —Hinata le daba la espalda, su ataque de ira se detuvo cuando escuchó las palabras de su madre.

—¿Que no querías que me enterara de esta manera? —se volteó a mirarla. —¿Tú lo sabías?

—No, mi niña, yo...

—¡Lo sabías y no me dijiste nada! —retrocedió cuando su madre quiso tomarle las manos, podía superar una traición de parte de su esposo, pero jamás una de su madre, menos de esa magnitud. —Madre, me estuvieron viendo la cara de idiota todo este tiempo y no me dijiste nada, ¡dejaste que se burlaran a mis espaldas!

—¡No me mal entiendas, Hinata! Todo este tiempo he querido separarlos porque sé que lo que están haciendo está mal. ¿Por qué  crees que cuando me dijiste que echarías a Sasuke te detuve? Naruto no te lo hubiera permitido.

—¿Entonces qué hago? ¿Compartir a mi marido? Por supuesto que no. —tomó suficiente aire, apretando ambos puños en un intento por no causar un desastre en la sala. —Iré a mi cuarto, aprovecharé que... estaré sola para relajarme y pensar bien las cosas. Esto, definitivamente, no se queda así.

—Si quieres...

—Hoy no quiero absolutamente nada de ti, mamá. Tampoco voy a olvidar que también fuiste parte de esta traición. —pasó a un lado de la Hyūga para subir a su habitación.

Se sentía vacía, burlada y humillada. No podía enfrentarlos y dejar en evidencia que los había descubierto, sea como sea, no tenía ni una sola prueba. Será mil veces mejor vengarse de otra manera.

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—Entonces, ¿cuáles son los planes para esta noche? —caminaba por la baranda del yate, disfrutando de la vista nocturna que le brindaba el paisaje. Apenas fueron a su habitación, Naruto lo llevó a la costa, fue un recorrido de casi media hora, pero era un hecho que valió la pena la espera.

—Oye, así no fue cómo lo ensayamos. —le miró con un puchero, adoraba como su esposo podía tener facciones tan infantiles que lo hacían adorable.

—No lo diré.

—Por favor. —le tomó de la cintura para acercarlo, Sasuke permanecía con sus brazos cruzados.

—¡Que no!

—¡Por favooor! Sabes que insistiré hasta que te hartes.

—Sabes que puedo lanzarte al agua.

—¿Aceptarías quedar viudo?

—Puedo hacer excepciones. —se sonrió al ver la expresión del rubio.