Un Matrimonio "Ilegal" [NS] (Wattys2019)

Capítulo 24

Los días avanzaron desde el incidente, ya se había convertido en una noticia vieja. Después de que Naruto dejara solo a Sasuke frente a esas dos mujeres, creyendo en Hinata, el Uchiha había estado evitándolo. No podía con la rabia que tenía en su corazón al darse cuenta de que SU esposo no le creyó absolutamente nada, prefería guardarse ese sentimiento antes de explotar en contra de él.

Aparentemente, Yahiko ya había encontrado un nuevo local para la agencia, según la información que le brindó Haku. A descripción del doncel, era más grande y moderno que el anterior, así que le despertaba la curiosidad de ir a conocerlo. Sin embargo, aún estaban en proceso de acomodar todos los equipos y hacer unas cuantas instalaciones. Tendría que esperar hasta que Haku, o Yahiko, le avisara. De lo que sí se había logrado enterar es que la revista, con su imagen, fue publicada hace dos días. La revista que él vio en el escritorio de la vieja agencia solo era una copia; la original siempre estuvo en posesión de su jefe.

Ese día, había salido de compras con Sakura, aunque claro, la única emocionada era ella. Sasuke tan solo se encargaba de sostenerle la ropa a causa de que el cesto no daba a basto. Ya podía hacerse una idea del tiempo que duraría la pelirosa dentro del vestidor, ya que solo podía entrar con tres prendas, y la cantidad que ya llevaba prefería no contarla. Se sentó en un cómodo sofá cerca de los vestidores, solo veía a Sakura entrar y salir por más ropa. Decidió concentrarse en su celular, así podría matar un poco el tiempo.

En realidad no era como que tuviera mucho qué hacer; le aburrían las redes sociales, y también le aburría el hablar con los chats pendientes. ¿Qué podía hacer? Las conversaciones no son para nada interesantes. Al levantar la vista, pudo divisar una cabellera rubia al final de uno de los pasillos. Todo su cuerpo se tensó, esa mañana no le había dirigido la palabra a su esposo y la vida se encargaba de ponerlo en su camino. Y como si no fuera suficiente, Naruto volteó justo en su dirección.

—Ah, Sasuke, ¿cuál te gusta más? Este tono rosa. —Sakura se paró justo al frente suyo, bloqueando la vista al Namikaze. Le mostró una blusa del color que mencionó. —O este tono más oscuro. —enseñó otra blusa.

—Este. —escogió al azar, solo quería irse de ahí lo más rápido posible. Sakura le sonrió y volvió al vestidor, su vista se enfocó en esos zapatos negros delante suyo. —Maldición...

—De todos los lugares de esta ciudad, nunca esperé encontrarte aquí. —Naruto se puso de cuclillas, obligando el contacto visual que Sasuke estuvo evitando. —¿Te diviertes?

—Vete al demonio. —le respondió mostrando su enojo. Se echó hacia atrás, mirando en otra dirección con sus brazos cruzados.

—¿Sigues enfadado conmigo? —puso sus manos sobre las rodillas del Uchiha, enviándole una corriente eléctrica por todo el cuerpo. —Parece que sí. Lo siento. Entiéndeme, Sasuke.

Naruto sabía muy bien cual era el motivo por el cual su esposo cargaba con ese ánimo desde hace días, cada vez que trataba de acercarse siempre lograba escaparse, impidiéndole brindarle una disculpa. Esa era la primera vez que volvían a hablar, y Sasuke no le facilitaba las cosas. Bien, entendía que debió de creer en su palabra, pero en ese momento se sintió entre la espada y la pared. En su tiempo de matrimonio con Hinata ella nunca mostró ser una persona con la cual había que tener cuidado, siempre fue sumisa y tranquila, así que se le complicaba el imaginar que ella atentó en contra de Sasuke.

—No me interesa lo que quieras decirme. ¿Por qué mejor no te vas con Hinata? Ustedes dos se la pasan muy bien juntos, ¿no? —se levantó del sillón, alejándose de Naruto con paso firme.

—Espera, Sasuke. —le tomó la mano. —Ya sé que estás enfadado por no creerte esa vez, pero eres mi esposo, nunca voy a preferir a otra persona por encima de ti.