Lapurna - Las Tierras Tectónicas

Capítulo 11 - Eider

-¿Podemos parar ya? Está claro que hoy tampoco voy a conseguir nada-. Llevaba practicando con Ned mi poder básico casi dos semanas. Nos reuníamos en la sala vacía del piso superior todos los días después de clase y nos quedábamos ahí hasta que acababa tan exhausta que no sentía las piernas. El segundo día hice tal esfuerzo que me temblaron las rodillas y no podía andar. El pobre tuvo que llevarme en brazos hasta mi habitación.

-No si sigues con esa actitud-. Lo miré con desprecio. ¿De verdad seguía pensando que iba a conseguirlo? Lo máximo que había logrado hasta entonces fueron unas chispas procedentes de mis manos. Los demás en cambio ya controlaban su poder bastante bien. Aún tenían cosas para mejorar, pero al menos ellos ya sabían invocarlo-. Concéntrate, cierra los ojos y respira hondo. Verás como esta vez te sale.

-Si fuera tan sencillo no llevaríamos con esto dos semanas-. Aún así, hice lo que me dijo y volví a intentarlo. Me concentré y sentí la energía recorriendo mi cuerpo desde la nuca hasta los pies. Pero cuando intenté liberarla, desapareció-. Es inútil. No sé cómo hacer que salga. Ni siquiera sé qué se supone que tiene que pasar. ¿Tengo que lanzar rayos de luz de mis manos? ¿Brillar como una lámpara?- Suspiré y me dejé caer al suelo-. Todos los demás ya lo han conseguido. ¿Por qué a mí me cuesta tanto?-

-Puede que sea porque tu poder es el más difícil de controlar y el más poderoso-. Respondió sentándose a mi lado.

-O puede que sea porque soy idiota y no hago nada bien.

-Esa es otra posibilidad. Bastante probable diría yo-. Rió.

-Hablo en serio. Si no soy capaz de controlar el poder básico, ¿cómo se supone que voy a ser capaz de controlar los avanzados?

-Lo conseguirás. Confío en ti. Ya verás, para dentro de 3 días ya lo tienes.-

-¿Y si no? ¿Y si no logro hacerlo nunca?-

-No quiero presionarte pero... si no lo consigues Lapurna está perdida-

-Menos mal que no quieres presionarme.

-Si quisiera presionarte te diría que moriríamos todos por tu culpa-. Se levantó y me ofreció su mano para que yo hiciera lo mismo-.Es hora de cenar, nos estarán esperando.

❋❋❋

Tal y como había dicho Ned, todos a excepción de Kirtash que seguía ausente, se encontraban sentados alrededor de la mesa.

-¡Estáis aquí!- exclamó Shi-Mae-. Ya empezaba a preocuparme. ¿Algún avance?- me preguntó intrigada. Miré a Ned en busca de ayuda, ¿qué debía hacer? ¿Responder con sinceridad y admitir que todos los intentos eran en vano, o mentir y decir que lo iba controlando? Sabía que no debería mentirle, al fin y al cabo, me estaba enseñando a usar mis poderes y sería más eficaz si supiera todos los detalles. Pero al mismo tiempo sabía que la iba a defraudar también, ya que, no podría seguir dando lecciones. Ya llevábamos 1 semana de retraso, no me sentía nada bien sabiendo que era por mi culpa.

-Nada nuevo, todo está igual que al principio-. Dije al fin. En un principio, pareció apenada, pero enseguida sonrió de nuevo e intentó animarme diciendo que lo conseguiría pronto y que esperaba grandes cosas de mí en un futuro cercano. Después de darle las gracias por la presión añadida, me senté en la mesa al lado de Joplaya que parecía tener una conversación interesante con Javi.

-¿Cómo ha ido?- preguntó Dalanar.

-Como siempre-.

-¿Ningún avance?-

-Ninguno-.

-¿Seguro que estabas concentrada? ¿Has probado cerrar los ojos?- sugirió Thonolan.