La Esposa Tonta 《Terminada》

Capítulo 15

Al Cabo de unos cuantos minutos el y yo seguíamos abrazados y yo no quería que esto terminará quería permanecer así todo el tiempo posible pero era Inevitable - Qué es lo que te pasa Emilia - me pregunto - Nada solo quédate así por un momento más - eso fue lo único que dije el no dijo nada y siguió en la misma posición, sentí como mi respiración se calmaba poco a poco después de un rato ambos nos habíamos quedado dormidos yo me moví lentamente para no despertarlo lo mire y mi mente sólo podía decir que cómo era posible que alguien tan arrogante y tan frío podía ser alguien cálido y amable a la vez.

- Lamento irme sin decir nada pero creí que habías cambiado pero no lo hiciste sigues pensando en ti y en Nora a pesar de que ella ya no está aquí - las lágrimas comenzaron a salir - creí que podías llegar a amarme pero no fue así ahora te metiste con su secretaria y no tranquilo con eso me mentiste diciendo que aún no podías caminar no entiendo qué es lo que está pasando - mi mente estaba confundida no lograba encontrar una respuesta certera así que no me iba a esforzar más en pensar en que es lo que estaba pasando por la mente de León saqué mi maleta del clóset tomé mi abrigo y salí de aquella habitación cerré la puerta lentamente dio unos cuantos pasos y salí por fin de la casa antes de cerrar la puerta principal del jardín mire hacia atrás y ahí estaba esa casa en la cual había sufrido mucho pero en la cual también había logrado ser feliz muchas veces.

Tomé un taxi y mientras iba en él sólo pensaba en la reacción de León no sabía qué es lo que haría si me buscaría o si simplemente se olvidaría de mí además él tampoco sabría que iba a ser padre muy pronto esto me aterraba mis padres me matarían por haberme ido de mi casa embarazada pero no tenía ni porque decirles eso a ellos, el taxista me preguntó que si como encontraba bien ya que comencé a llorar yo sólo dije que sí y que no me preguntará más cuando pude calmarme tome mi teléfono y ya me Harry para que él me recibiera en su casa por un tiempo él sin dudarlo dijo que sí le indiqué al taxista por dónde ir no tardamos mucho en llegar.

-Anda ven vamos adentro que aquí hace mucho frio - tomo mi maleta y comenzó a caminar - estas bien con lo que acabas de hacer ...

-No me digas nada que esto es lo mejor que pude haber hecho - lo mire con los ojos llorosos -

-Qué fue lo que te orillo a esto - me tomó de las manos y me miró - Emilia dime que es lo que te pasa ...

-Solo promete que no le dirás a nadie y mucho menos a mis padres - tenía que asegurarme de que no le dijera a nadie - Promete lo ...

-Esta bien lo prometo ...

- lo que pasó fue que después del accidente de Leonel cambió mucho y yo creí que comenzaría amarme pero me equivoqué porque él nunca va a cambiar  - mis lágrimas comenzaron a salir - fui el médico porque me sentía algo mal y el médico decidió hacerme unos análisis los cuales arrojaron que estoy embarazada yo decidí ir a contarle esto a León hasta su oficina cuando llegué todos se sorprendieron mucho porque pues yo no iba ahí pero eso no fue todo cuando llegue a su oficina no estaba Su secretaria y la puerta de su despacho Pues estaba entreabierta así que decidí entrar sin anunciar me antes cuando estaba apunto de entrar vía León de pie y también estaba besando a su secretaria - rompí en llanto ya no podía aguantar más - sentí como se partió mi corazón en dos ...

- Emilia esto que me estás diciendo me has dejado sin palabras cómo es posible esto - Dijo mientras limpiaba mis lágrimas - ese maldito me las va a pagar juro que me las pagará

- no quiero que hagas nada déjalo en paz yo estoy tranquila con eso no sé qué es lo que pasará después pero por ahora no hagas nada porque si le pasa algo a León yo me muero no sé cómo ni cuándo pero me enamoré de él - puse mi mano sobre mi vientre y sonreí ligeramente - es mejor que descanse me siento algo cansada y mareada por favor vamos a descansar sí ...

Fuimos a descansar y me quedé dormida tal vez porque ya era tarde o o Porq tan sólo quería olvidar lo que estaba pasando.

cuando desperté Harry me llamó para desayunar, en un principio yo no quería pero Harry insistió y ya no pude negarme más.

-Tu celular  o deja de sonar - me dijo - que harás si tu marido descubre en dónde estás ..

-No creo que sea él además él no tendrá porqué enterarse - mire mi teléfono -

-Y bien quien es ...

-Es león pero no voy a contestar - puse mi teléfono en la mesa y comencé a comer - dios mío esto no me gusto para nada ... sabe muy mal - salí corriendo hacia el baño -

-Emilia ... todo bien - escuche de lejos - Ella esta con migo asi que deja de buscarla maldito infeliz - escuche mientras regresaba al comedor - como pudiste mentirle ...

- Maldición que es lo que haces con mi teléfono - grite - dame de inmediato ...

-Es tu marido el que está en el teléfono ... yo solo lo aprendí - lograba escuchar los grito de León - quieres hablar con el ...

-Si, damelo ya - me dio el teléfono y yo fui a mi habitación - que es lo que quieres Leon ...

-Dime porque demonios estás con ese idiota - me gritó -

-Mejor dime tu por que me has mentido y me as lastimado demasiado - dije casi llorando -

-De que estas hablando ...

-Mejor averigua qué fue lo que paso ayer mientras estabas tu en la oficina - me sequé las lágrimas - y cuando lo sepas hablamos

-Emilia tu estas enferma ... dime donde estas yo voy por ti por favor no me hagas esto ...

Corte la llamada y ya no escuche más quería que el mismo supiera que es lo que había pasado, quería que supiera el motivo de porque me había ido de la casa Si decirle nada y también quería que descubriera la verdad sobre su hijo, A pesar de que descubriera todo eso y me pidiera perdón de rodillas yo no lo perdonaría porque esta vez El engaño fue más allá de lo que yo pensaba, esta vez era yo quién lo dejaba, esta vez era yo quien tenía que decir adiós por última vez así me sentiría más viva de nuevo y podría darle ese amor a mi hijo porque no quería que mi hijo fuera como su padre y mucho menos que aprendiera malas cosas que hacía su abuela, al final aquí sólo habría alguien feliz y esa sería mi suegra ya que no necesitaría darme dinero para que me fuera esta vez yo me estaba diciendo irme  sola y sin cobrar un solo peso, en fin creo que es la mejor decisión por ahora.

Apague mi teléfono me recosté sobre la cama y no deje que las lágrimas salieran de nuevo porque esta vez tenía que ser fuerte no tendría que dejarme vencer por nada y por nadie porque esta vez no sólo era yo si no mi hijo él no tenía la culpa de nada, él no tenía que saber todo el dolor que estaba  pasando, él tendría que ser un niño feliz y tendría una madre que lo amará mucho, ésta vez él era mi razón de ser y mi razón de luchar.