Aquellas luces del océano...

Amerizaje

Íbamos de camino hacia el aeropuerto para una evacuación inmediatamente. Antes de salir de mi casa decidí meter en la maleta aquel artefacto que me encontré en la playa junto a la ballena,
pensé que sería buena idea para seguir con mi investigación sobre todo lo que estaba pasando, sabía que todo estaba enlazado, tanto las luces, como la cueva, como el dispositivo y las criaturas, no entendía el porque, pero sabía que estaba todo enlazado.
En el aeropuerto nos separaron por edades, a mis padres los dejaron juntos con mi hermano al ser mayores de edad, pero a mí me separaron y me llevaron a otra fila, apestaba a alcohol y a tabaco, sorprendentemente, éramos las jóvenes que adultos.

Empezó a llegar un olor a azufre, pensábamos que era por los aviones, pero no, los militares empezaron a abrir fuego, una enorme ola de esas criaturas se dirigía hacia la puertas del aeropuerto, disparos de fusiles y gritos hacían temblar el aeropuerto, a cada fila nos llevaron a un hangar distinto, teníamos que salir de ahí corriendo y abandonar la ciudad.
Mientras tanto, mis padres discutían con los miembros de seguridad del aeropuerto porque no querían separarse de mí, pero los de seguridad incistían en que mantuviesen la fila ordenada. Solo se disponía de 9 aviones, de los cuales 5 ya habían zarpado, comunicaban que uno de los que ya habían zarpado había tenido que amerizar por la avería de uno de los motores.

Por suerte, los militares habían asegurado las puertas del aeropuerto y ya estábamos seguros.  Nuestro vuelo tuvo que atrasarse dos días, mientras tanto, deberíamos quedarnos en el aeropuerto, teníamos comida y sacos de dormir, para sobrevivir una semana, así que sin problema. Empezó a parpadear una luz en el dispositivo, no tenía ni idea de que podía ser, pero creo que no era nada bueno, tenía miedo por si era alguna bomba o vete a saber que.