Aún te odio, ¡Idiota!

Capítulo 14.

"Pensar en ella y su hermosa sonrisa."

|Punto de vista de Juan|

En cuanto Ximena se fue, mi hermana me miraba con diversión plasmada en el rostro. Yo solo la miré confundido.

-¿Que tanto me miras?.-

Sofía negó con la cabeza, mas no respondió a mi pregunta. Por lo contrario, decidió apurarme para que subiéramos todos a la terraza.
Le hice caso.

No hacía tanto frío, pero había una brisa algo fresca. Agradable en verdad.
Estaban todos centados en circulo. Ya ninguno tenía la lata de cerveza en la mano, se la habían acabado supongo yo.

-Ah, Juan. Estábamos hablando sobre salir el próximo fin de semana, para celebrar. -Fue Alice quién hizo la invitación, pero al ver mi rostro confundido continuó. - Me aceptaron como junior en un editorial, ¡eso es motivo de festejo!.

Ximena rodó los ojos con una hermosa sonrisa en el rostro. -Para ti, todo es motivo de festejo.

-Deberías estar feliz por mi. Eres mala, Xime. - Alice hizo un mohin y recibió un pellizco en el brazo de parte de la castaña.-¡Auch! ¿y eso por que?

-Porque sabes que te apoyo en todo, deja de decir tonterías.

Las horas pasaron con bromas y charlas sin sentido, además de unas cuantas peleas inocentes con Ximena. Era divertido molestarla.
Al final, terminamos yéndonos cada uno a su casa, pues era plena madrugada de un martes y a nadie le beneficia eso.
Me encargué de llevar a mi hermana y a Ginna a sus respectivas casas y volvería yo a la mía, sintiéndome agotado.

Al dejarme caer sobre mi cama, ya cambiado, no podía quitarme el rostro de Ximena de mi cabeza.
Tenía un montón de dudas sobre que fue de su vida estando tan lejos, si bien habíamos hablado y me había contado cosas, sentía que no era suficiente.
Quería saber mas sobre ella, quería saber si sus gustos musicales cambiaron, que le gustaba hacer en su tiempo libre, que tantas cosas había experimentado y... ¿con quienes?
Ella dijo que había estado con chicos, y había salido a citas, ¿pero pasó a mas de eso?.

No es algo que pueda preguntar, ¿verdad?

Di vueltas en la cama, tratando de desviar todos esos pensamiento al rincón mas oscuro de mi cabeza y ya no pensar en eso. Admitiría que me carcomía por dentro saber e imaginarmela con alguien mas. Egoísta, ¿verdad?.

No me gusta ni nada, sólo se me hace extraño imaginarla de esa forma. Tal vez sigo viendola como esa inocente e infantil niña, tal vez ella ya no sea igual.

Debería dejar de pensar en ella y dormirme de una buena vez.

◈◈◈

E

conomía era una clase que normalmente llevaba con facilidad, pero no hoy.

Anoche finalmente había logrado conciliar el sueño, después de unas horas dando vueltas en mi cama.

La castaña estaba sentada unas filas frente a mi, tomando nota de lo que nuestro profesor explicaba. Mentiría si dijera que presto atención alguna.
Como dije antes, hoy no estaba con todos mis sentidos despiertos, o tal vez si, tal vez mas de lo necesario.
Mis ojos estaban pegados a la nuca de Ximena, y yo se que ella había sentido mi mirada mas de una vez, pues se había volteo pero yo había evitado verla directamente.

No se porque mierda no puedo dejar de mirarla. Me encantaría culpar al vestido que hoy decidió lucir -que por cierto, le sentaba demasiado bien para ser bueno-, pero estando ella sentada no era mucho lo que podía apreciar.
Suspiré y dejé caer mi cabeza al banco.