Capítulo 20.

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"Mas tiempo, más perdido estoy"

|Punto de vista de Juan|

Admitir que estaba celoso de Alan era también admitir que Ximena me interesaba mas que como una amiga.
Era absurdo, y molesto.

Tuvimos una relación que con suerte llegó al mes, si, cuando eramos niños,  pero había herido sus sentimiento e ignorado por los cuatro años que ella se había ido.
Me disculpé, y ella dijo que es algo que quedó en el pasado, volvimos a ser amigos, y ella comenzó a conocer a alguien más. ¿Cómo se supone que tengo que irrumpir en eso cuando siquiera tengo claro mis propias emociones?

Si, Ximena me interesa.
Nunca dejé de quererla y no creo hacerlo. Es una buena amiga y jamás me perdonaría lastimarla otra vez.
Además de que físicamente también me atrae. Pero, ¿qué más? ¿y si sólo confundo las cosas?
No puedo ser claro con ella si no lo soy conmigo mismo.

—Si sigues golpeando tu cabeza de esa forma romperás mi mesa y juro que te haré pagar centavo por centavo de la manera mas ridícula posible.— Sofi dejó una taza humeante frente a mi sobre un posa vasos.

Le habían regalado una mesa de centro importada de no se donde y para ella era casi sagrada. Al igual que un jarrón de australia, un cuadro de italia, y su taza de unicornio (regalo de mi parte, por cierto).
Le sonreí y tome la taza entre mis manos para tomar su contenido.
Sofía se sentó en el sofa frente a mi, también bebiendo café.
Cuando Lucy se mudó junto a Martín, las señoras de la casa remodelaron todo. Mi habitación ahora era de Sofía,  y la que solía ser de Ximena la convirtió en su propio estudio de grabación. No, no canta, aunque le recomendamos que lo hiciera, no es mas que un hobbie, pero si hace videos sobre consejos de moda y otras cosas.
Convirtieron una de las habitaciones en un salón de juegos y otra en una oficina para mi madre. ¿Olvidaron que era una casa grande, cierto?

—¿Vas a contarme tu problema o sólo te quedarás ahí sentado?.— Yo suspiré.  Quería evitar el tema de conversación, pero evitar algo con Sofía era casi imposible.

—¿Como conquisto a una chica que parece interesada en alguien más?

Sofi me miró por un segundo y luego comenzó a carcajearse, al punto de agarrarse la barriga y lagrimear de la risa. Un poco exagerado a mi parecer, ¿cual es la gracia?

—¿Tu, pidiéndome consejos de conquista? Tengo que llamar a Lu y contarle de esto. — ella sin pensarlo tomó el movil y marco un número, pero se lo quite de las manos.

—No seas ridícula, hablo en serio.

—Bien, amargado.— ella rodó los ojos y se sentó cual indio.— En primer lugar, ¿sabes si en verdad está interesado en alguien mas? En segundo, conoces los gustos de Ximena, sabrás que hacer. Y no digas que como se que es ella, no te hagas el tonto.

Yo reí pero no negué nada en absoluto. ¿Por qué hacerlo?  Ella sabe lo mucho que me importa.

—Y por último, espero que tengas bien en claro todos tus pensamiendos y no lo jodas. Eres mi hermanito y te amo, pero sabes que ella también es como una hermana para mi. —Sus cejas casi se juntaron, en una expresión de desagrado. — lo qué seria... Casi incestuoso...

Ignorando su último comentario comenzamos a hablar de distintos temas hasta que mamá volviera.  Lo, mínimo que podía hacer es saludarla,  tal vez me quede a cenar.
Aún así no podía dejar de pensar en aquello, ¿de qué forma aclaro mis pensamientos sin confundir los de Ximena?

Aún te odio, ¡Idiota!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora