Capítulo 4

1.4K 101 8
                                    

Bien, la historia que os voy a contar se sitúa en 1939 –dijo la adolescente –precisamente, de lo pasó ese año, tengo las versiones de nuestros dos protagonistas. 

Septiembre 1939

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Septiembre 1939

Ya había pasado casi un mes desde que recibí la carta maldita. No podía creerme que a pesar de las circunstancias me encontraba tan bien.

Después de ese día no volví a tocar el tema con Stevie, ni si quiera con James, que se enteró aquella mañana, en la que irrumpió en el apartamento de Stevie, de la noticia. Realmente hacíamos como si nada hubiera pasado, aunque ahora nos veíamos cada vez que podíamos, aunque sólo fuese durante unos minutos.

Aquel ese día era diferente, nos encontrábamos los tres en una cafetería, hacía mucho tiempo que no teníamos un día libre los tres, en donde Stevie no se metiera en una pelea que acabase con él yendo al hospital, así que aprovechamos para vernos y comentar la buena nueva de Bucky: había encontrado novia.

Realmente Stevie y yo no prestábamos atención, ya que a nuestro buen amigo no le duraban las relaciones, tal vez debería buscar a alguien que no fuese tan interesada, pero que sé yo.

–¡Vamos a la guerra! ¡Vamos a la guerra! –entró gritando un niño –¡Estados Unidos entra en la guerra contra los alemanes! ¡Vamos a la guerra! –la cafetería quedó en silencio, el dueño del local tenía una radio que encendió en ese mismo momento para sintonizar alguna cadena que informe de lo sucedido.

Americanos –comenzó hablando el locutor –si acaban de sintonizar este canal hemos de informar que la guerra contra Alemania ha comenzado [...] desde aquí queremos informarles que en los próximos días todos los voluntarios del ejército serán llamados a sus puestos, ya sea personal militar o no, además, habilitaremos puestos de inscripción para todos aquellos hombres que deseen formar parte del ejército [...] en las próximas horas tendremos más noticias [...] buena suerte y... Dios bendiga a los Estados Unidos de América.

En ese momento solo podía pensar en la carta que había recibido hace un mes. Lo sabían. Ellos lo sabían. Y nos habían informado con antelación para que estuviésemos preparados.

Septiembre 1939 – Steve

Ella iba a ir a la guerra. Lo único en lo que podía pensar en ese momento es que iba a ser llamada para ir a la guerra.

–Stevie, Stevie respóndeme por favor... –Eliza intentaba hablar conmigo pero no podía, ahora mismo solo podía pensar en el peligro al que estaría sometida –Buck, he de irme a casa, por favor ayuda a Steve... –en ese momento vi como salía corriendo del bar.

–Steve, ¡vamos! –siento como la mano de Bucky se estrella en mi cabeza.

–¡Ay! Buck, ¿qué estás haciendo? –la colleja de Buck me devuelve a la realidad. Busco a Eliza con la mirada hasta que caigo en la cuenta de que había salido hace unos minutos y que se dirigía a casa. –Voy a perderla Buck...

El primer amor del Capitán América (Steve Rogers) [Libro I]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora