01.

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Temo.

Depués de una gran despedida con la familia,nos marchamos a la ciudad de México. Aunque debo admitir que todos llorabamos a mares. Es doloroso dejar a las personas que son  parte de vida, pero Ari y yo tenemos muchos deseos en mente y venir hasta aca es parte de ello.

-Llegamos Tahi.- dije sonriente, estabamos parados enfrente de nuestro departamento, la verdad era pequeño, pero lucia comodo.

-Vamos a entrar.-dijo el y jaló mi mano para entar.

-Es chico, pero acogedor ¿no lo crees?-comenté.

-Si, pero no importa. Esta bien para tener nuestros encuetros.- dijo acercandose, puso sus manos en mi trasero y con su boca lambio mi oreja.

Yo me sentí un poco incomodo, pero después de todo asi es como las parejas son en la intimidad. -Quiero comerte completo Cuauhtemoc.- susurró en mi oido.

-Espera Ari debemos desempacar, luego habra tiempo.- traté de separarnos, pero el puso mas fuerza.

-Estoy cansado bebe, solo quiero desestresarme contigo.- pude sentir como sus labios besaban mi cuello.

-Ahhj...Ari, espera....- traté de alejarlo de nuevo.

-¡¿Qué pasa?¿Acaso no me quieres?!-gritó y yo me asuste un poco.

-No Ari no es eso, pero ya te dije que es mejor depués.-

-Esta bien, si asi lo quieres vamos a desespacar.-

Yo me quedé un poco sorprendido por la manera en que Ari me hablo, nunca lo había hecho, es más nunca me había tocado a menos que yo le diera paso.

Ocupamos la tarde para acomodar nuestras cosas, pero Ari no me habló y no me dirijio la mirada en todo ese tiempo.
La noche callo y tome un baño, cuando entre a la recamara Ari estaba dormido.

Lo miré un rato y no podía de alagar lo guapo que era, tal vez estaba un poco estresado y quería relajarse un poco, creo que fui duro con él.

De la misma forma me recosté y abrazé a Ari, puse mi nariz sobre su cuello para poder oler su briagante aroma.

Al otro día me desperte muy temprano, para preparar un desayuno en forma de disculpa a Ari.

Tenía todo listo, como pude prepare una enchiladas, no creo que sean tan buenas pero mi Tahi las va apreciar. Caminé hasta la cama y removí un poco a Ari.

- Despierta Tahi, te prepare el desayuno.- susurré en su oido.

Poco a poco abrio sus hermosos ojos y le dedique una sonrisa.

-Ari, vamos ya esta listo todo.- él me sonrio y me dio un pequeño beso en la mejilla.

Yo salí primero y empezé a servir.
Ari salio en su boxer y su camiseta, bueno es la pijama que el suele usar.

-Asi me gusta Temo, que atiendas a tu novio como es.- dijo el sentandose.

-Espero te gusten, fue un poco díficil, pero es en recompensa de ayer.-

Miré como Aristoteles dio la primera mordida, él hizo una mueca como de asco.

-¡Esto sabe horrible! ¿Acaso no sabes hacer nada bien?- mi sonrisa se borró en un instante.

-Lo siento, no se hacerlo bien.-dije apunto de llorar.

-No llores- dijo con fastido en su cara- ven aquí- palmeo su pierna.

Yo obedecí, la verdad ya no queria pelear más con Ari.

-Yo te quiero mucho bebe, pero tienes que aprender a hacer las cosas bien. Dame tu manita.- yo nerviosamente se la dí y él la palmeo fuerte con la suya.

-Auu- grité yo, a sentir aquel golpe y ver que mi mano estaba roja.

-Cada vez que hagas mal las cosas o te portes mal, tendré que castigarte bonito.  Ahora ve y busca algo que si se pueda comer.- yo con un poco de lagrimas salí del departamento.

No podía creer lo que Ari me había hecho, nunca se había portado asi conmigo. Debe ser la idea mudarnos a la ciudad, yo tal vez lo presione y se siente enojado.
Salí a buscar algo de comer, pero no sin antes llorar a solas.

Cuando regresé,me topé con un chico de ojos claros y lindo por cierto, pero solo pense eso de reojo ya que yo amo a Ari.

-Hola tu debes ser el nuevo ¿no es asi?- dijo con mucha felicidad, creo que tuvo un buen día.

-Si asi es- dije serio, aun seguia un poco nervioso por lo de la mañana.

-Que bueno es tener a nuevos vecinos por aqui....pero donde estan mis modales soy Thiago- seguia hablando con la misma sonrisa.

-Soy Cuauhtemoc, pero me pudes decirme Temo.- dije son una sonrisa un poco finjida.

-Mucho gusto Temo, es un lindo nombre.-

-Gracias y me voy porque tengo algunos pendientes.-

-Espero no veamos más seguido.- dijo levantando su mano para ser estrechada a lo cual acepte.

Yo caminé de regreso al departameto. Entre depacio y encontre a Ari acostado en la cama.

-Tahi aqui esta lo que me pediste.- el se levantó algo impulsivo.

-¡Porque tardaste tanto!- gritó haciendome depertar de nuevo el temor.

-Yo no creo que me halla tardado....- traté de defenderme.

-Ahora me estas diciendo mentiroso.- dijo aprentando mis mejillas con su mano.

-No Ari, perdoname yo me tardé.- el me lanzó y yo pegué contra la pared.

-Espero que no estes haciendo algo y no trates de decirle a nadie acerca de esto si no te va ir peor.-

-No Ari.- dije tratando de no llorar.

-¿Quieres que te sirva la comida?-

-No ya no tengo hambre.-se acostó en la cama.

Yo me acerqué a él y lo abrazé, luego comenzé a acariciar sus rizos.

-Jurame que nunca me vas a dejar Temo.-

-No Ari, yo te amo mucho, me costó tanto tenerte nunca te dejaria.- dije besando su mejilla.

Thiago.

La verdad me sorprendio el nuevo vecino, es muy hermoso. Aunque parecia estar un poco preocupado o espantado.

Espero poder hablar más con él, ya hace mucho que no me sentia de esta forma, es una oportunidad de tener alguien a mi lado.



¿Qué te paso? (Aristemo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora