¿Qué te paso? (Aristemo)

05.

Temo.

Una última mirada pose sobre la cara de Aris dormido. Me moría por dentro al tener que dejarlo, pero es lo mejor para mí, no agunto ni un maltrato más, nuestro primeros recuerdos fueron hermosos, nunca los olvidaré.
Con varias lagrimas derramadas salí de la casa.

Tenía pensado regresar a Oaxaca con papancho, pero no era buena idea pues la familia Corcega esta cerca y preferí evitar malas caras e incomodidaddes.
No tenía nada en mente, solo me limite a andar por un parque cercano, tenía muchas dudas.

Primero no quiero dejar la escuela, mi carrera es una de mis grandes metas, mi esfuerzo no tiene que ser en vano. Por otro lado tendría que ver la cara de Aristoteles todos los días.
Segundo tengo que buscar un lugar para vivir, hablar con papancho de lo que pasó, si eso será lo mejor

Marqué a su número y espere un poco.

-Papancho......- dije nervioso.

-Temochas, ¿Cómo estas?- creo que notó el titubeo de mi voz.

-No muy bien, han suscedioso algunas cosas.-

-¿Cómo esta eso? ¿Cómo esta el Aris? Desembucha.-

-Ari y yo terminamos pa'.....- comenzé a llorar por lo que dije, y es que esa es la verdad.

-¡¿Que que?!.- preguntó asustado y con mucha exclamación.

-Ari cambio mucho, se volvio muy controlador y celoso. Me estaba ahogando, pasaron muchas cosas y decidí que era lo mejor.-

-Pero te hizo daño, se atrevio a lastimarte Temo, dime todo para tomar un juicio.-

¿Cómo iba a decir esto a mi papancho?. Ari me maltrato, me golpeo y hata abuso de mí. No es lo mejor decirlo ahora.

-Este creo que es mejor hablarlo personalmente.....- dije sin parar de llorar.

-Entiendo mijo, mañana mismo estaré por alla para hablar contigo.-

-No......puedes dejar pasar unos días, quiero despejarme un poco, no creo ser capaz de hablar de ello.-

-¿Seguro? Tu sabes que dejo todo por tratarse de tí.-

-Muchas gracias papancho, pero creo que es lo mejor. Solo quería avisarte para que te enteraras.-

-Si, me duele en lo más profundo de mi cora, pero si es tu elección yo te apoyo y sabes que estoy contigo.-

-Si papancho. Muchas gracias, te quiero.-

-Yo también te quiero mucho.-

Colgé la llamada, guardé mi celular y seguí llorando. No se si ser capaz de olvidar y dejar todo lo que eramos.
¿Por qué debia ser así?

-¡¿Temo estas bien?!.- voltie mi mirada hacia donde escuché aquella voz que ya reconocía, rápidamente limpie mis lagrimas.

-Si.....si Thiago, todo esta bien.- contesté fingiendo estar trabquilo.

-Bueno no ye creo, si estas llorando es que algo sucede. Las personas no lloramos porque si.-

-Bueno.....es que tuve una discución con Ari, es todo. Ya pasará.- traté de ser lo más cortante posible.

-Mmmm, ¿Puedo ayudarte en algo?-

-No, gracias por preguntar, pero es cosa de nosostros.- creo estoy siendo grosero.-.....lo siento, estoy muy mal.-

-No te preocupes, entiendo. Pero te voy hacerte compañia, te hara mucho bien.- yo solo asentí, unos minutos estuvimos en silencio. Hasta que un gruñido de mi estomago involuntario rompió el silencio.

-Lo siento, es que no he comido nada.-dije sonrojado y Thiago sonreia.

-Fue gracioso, vamos a comer ¿Qué te apetece?.- yo lo miré sorprendido. Pero negé cuando recordé que no tenía dinero, Aris se encargaba de eso, deciendo que era él quien debia tener la administración.
Hasta darme cuenta de eso, me preocupe mucho, pues donde dormiría y como haría para sobrevivir almenos este día.

-¿Por qué no? Es más yo invito.- jalo de mi mano y persuadio demasiado para llevarme a comer.

-Ya estamos aquí, pide lo que quieras. No acepto un no por respuesta.- me limité a pedir algo sencillo, al igual que Thiago.

Comimos un poco, yo lo hice un poco desespera. Realmente moría de hambre. Thiago solo me miraba con risas.

-Espera...- Thaigo se acerco a mí, su mano se hacerco hacía mí. Rápido me heche hacia atras, cerrando los ojos, había sido un reacción involuntaria.

-Perdon Temo, no te voy a lastimar, solo quería limpiar tu mejilla.- dijo mirandome algo raro, por mi movimiento. Acaso estaré traumado, me sentí muy temeroso de su acercamiento.

-Este.........yo......lo hago.- limpie mi mejilla. Espero no lo halla notado.

-Temo, si no quieres responder mi pregunta no lo hagas. ¿Qué fue lo que realmente paso con Aristoteles?.- quería hablar con alguien, me sentía ahogado. Tal vez Thiago no sea malo decirle a Thiago, depués de todo él simpre ha sido bueno conmigo.

-Termine con Aristoteles, no se si notaste que es demasiado controlador, yo traté de cumplir con todo lo que él me pedia, pero su carácter me quebró la cabeza. No se que fue lo que paso en sí, antes no era así, era muy diferente.- dije aguntandome las ganas de llorar.

-¿El.....te golpeaba verdad?.- dijo con su voz muy baja. Yo lo miré sorprendido.

-¿Cómo lo sabes?-

-Porque siempre llevas moretones. Además las formas en la que reaccionas, me hicieron pensar eso.-

-No le digas a nadie, por favor.- dije suplicante y él asintio.

-No te preocupes. Me parece bien que le hallas puesto un alto, ¿Qué haras ahora?-

-No lo se, no tengo idea. Por los estudios tendré que buscar un departamento para mi solo. No quería pedirle a papancho, pero me veo en la necesidad.-

-Mira ya es tarde para eso, quedate en mi depa, tengo una habitación extra. Además es feo estar solo, te lo digo yo, que estoy asi.-

-No, no quiero incomodarte, además cerca de de ahí esta Aristoteles, no quierlo verlo por ahora.-

-No es molestia, de todos modos lo veras en la escuela, aunque puedes evitarlo en los departamentos. Y si él trata de molestarte podemos ponerle un alto, tú no debes dejar que te traten así.- tenía razón, pero ni estaba seguro.

-Esta bien Thiago, pero en cuanto pueda te daré mi parte de la renta. En cuanto termine mi carrera, quiero alejarme lo más lejos de Aristoteles.- el me miró sonrientey camianamos hasta su departamento. A mi favor no me topé con Aristoteles en la calle o en los pasillos.

Thiago me abrio la habitación y era realmete comoda, agradecí el gesto, hasta eso logré tener un poco de paz, hasta que se interrumpio al recordar a Aristoteles.

Aristoteles.

Deperté con un fuerte dolor de cabeza, un poco torpe. Noté que la precensia de Temo no se hallaba en la cama. Así que salí por todo el departamento y me encontré con la misma respuesta.
Hize un poco de memoria, me sentí muy enojado conmigo mismo por lo que llego a mi mente.

¡Eres un idiota Aristoteles!

Lastime de la peor forma a mi Temo, ahora se fue y con justa razón. Me tiré en el sofa y comenze a llorar, merecia sentirme un asco, por ser así con él.

Del coraje golpie muchas veces la pared, soy un idiota, un estupido. Tratar de remediar esto me costará más de lo que me pueda imaginar.