la confección de JJ

895 110 34
                                    

Yurio comenzó a besar a su lindo novio, sus suaves labios eran adictivos, le gustaba la manera tímida en que se aferraba a su playera cada que lo besaba.

Le encantaba su sabor, su mirada, esos jadeos pequeños y como daba un pequeño salto si sus lenguas se encontraban en medio de un beso.

Se le antojo morder lo y hacerle saber a quién lo mirará que tenía un dueño muy celoso y posesivo.

Le entraron unas ganas inmensas de hacerlo suyo y que Víctor no volviera a tocarlo en su puta vida.

Y sumido en ese pensamiento posesivo lo tomo con fuerza de sus hermosas nalgas y lo acorraló contra la pared mientras lo besaba.

Lo beso con fuerza y se alejó cuando el aire les faltaba, lo miro extaciado, con su cabello revuelo, sus ojos acuosos y tan sonrojado que le daban ganas de tomarle una foto, era todo una obra de arte.

- hazme el amor - gadeo aún sin recuperar el aliento.

- eh..... - estaba soñando, su dulce ángel no le diría algo así.

- qu... quiero, ser co.....completamente tuyo.... solo tuyo - se acercó para iniciar otro beso.

- ah mmm - lo beso, lo beso, lo beso, apretó su trasero, lo beso y se perdió en el deseo.

Era lo que tanto quería, era lo deseaba, había soñado tantas veces con ese momento, con un carajo cuántos baños fríos se había dado ya, cuántas veces había recurrido a Manuela.

Quería tómalo pero sabía que el chico en sus brazos no estaba listo ni preparado para ese paso, lo decía por amor o para demostrar que lo amaba y que Víctor no era nada en su vida.

Tenía tantas ganas de hacerle el amor pero ¿era el momento indicado?

No quiso darle vueltas y lo beso con mucho amor.

Mientras que Yuuri trataba de no demostrar todos sus nervios ante todo declaración

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mientras que Yuuri trataba de no demostrar todos sus nervios ante todo declaración.

No fue fácil, nada fácil poderle decir eso.

Estaba nervioso pero quería hacerlo en verdad quería hacerlo.

Se dejo llevar al sofá donde lo dejo un momento, solo vio como su rubio buscaba algo, se acercó al televisor y puso una película, claro así los vecinos no escucharían lo que harían, luego lo vio entrar a la cosina para hacer una llamada, al poner atención se dió cuenta de que estaba llamando a su trabajo para avisar que estaba enfermo y que no podía asistir al trabajo ese día, una mentira bastante conbinsente y ese rubio sabía cómo crear una buena historia para que no le preguntarán más sobre el tema, eso le dejaba libre toda la mañana para sus actividades, descansar y luego un baño antes de irse a la universidad, era muy precavido su novio, luego se puso a buscar algo en algunos cajones, estaría buscando condones.

Lo vio acercarse con una sonrisa altiva, luego de un beso que le robó el aliento, lo siguiente que supo fue que estaba siendo abrazado por su novio quién veía con interés una película, comiendo papas.

¿Que había pasado?

- Yura - le hablo infantil haciendo puchero.

- dime - respondió sin apartar la vista del televisor.

- yo quiero...mmm...yo - sonrojado pero quería decírselo.

- de otras botanas, tengo palomitas...

- no...yo quiero....quiero...

- más refresco - lo miro tranquilo.

- quiero que me hagas el amor - le dijo fuerte, sin llegar a ser un grito y serrando sus ojos fuertemente.

- amor - se inclinó hasta rozar su oído - quién dice que no te los estoy haciendo justo ahora.

- pero - abrió su ojos y miró esos ojos esmeralda que lo miraban con amor.

- te adoro - le dió otro beso y regreso su atención al televisor ignorando que en su pantalón algo intentaba crecer.

- yo más - tranquilizó sus nervios y se recargo en su brazo para al fin poner atención a la película.

No fue lo que esperaba pero era maravilloso.

Ese día con todos los ánimos del mundo el japonés llegó a clases, aún era temprano pero ya iba camino a su salón

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Ese día con todos los ánimos del mundo el japonés llegó a clases, aún era temprano pero ya iba camino a su salón.

Pero antes de llegar alguien interumpio su camino.

JJ a pesar de las miradas curiosas y de la alumnos y de que e
Yuuri no quisiera acompañarlo lo arrastró para llevarlo a un lugar apartado.

- tengo que hablarte - pidió firme.

- tengo clases - trato de irse pero su mano aún era apresado por el canadiense.

- estoy .... Ayúdame - pidió.

- pero...

- creo que estoy enamorado.

- ahh....

- mira no sé cómo pero yo....creo que puedo estar confundido.

- cómo podría yo a ayudarte.

- pues tu tienes mucho que ver y tienes que ayudarme.

- tengo que ir a clases.

- primero yenemos que hablar, pofavor - pidio casi a punto de ser suplica.

- puedo intentar..

- bien, porque esto empezo el dia que tubimos uma cita.

%%%

JJ ha empezado a moverse, que piensan que pasra ahora...

No quiero NADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora