Un Reencuentro

89 3 2
                                    

-¿Pero que ?

-Supongo que Freya suavizó las cosas cuando dijo que había habido desastres naturales

Un panorama desolador se extendía frente a nosotros, los edificios elegantes y las zonas verdes bien cuidadas ahora eran ruinas. No había edificación que hubiera quedado entera en aquel lugar, los muros caídos dejaban al descubierto algunas de las aulas con restos de la misma construcción, todo estaba destruido y algunos árboles estaban arrancados de raíz, al parecer estaban secos, parecía que estuviéramos frente a una escena gótica y no frente un instituto de ricos. El pasto siempre verde y los arbustos decorativos ahora no eran más que un recuerdo pues en su lugar solo había raíces secas y algunas ramas amontonadas. 

-¿Hace cuanto crees que está así?- Preguntaba Ed a Aren

-En realidad no lo sé, no tuve tiempo de preguntar a Freya-comentó alzando una ceja- pero veré que puedo rastrear para averiguarlo, además, el polvo sigue levantándose por lo que no debe tener mucho de la ultima sacudida

Aren se puso en marcha levantando escombros aquí y allá, llegando hasta uno de los salones de una de las plantas bajas cuya pared lateral estaba derrumbada y así pudo pasar, algunas bolsas, mochilas y portafolios estaban esparcidos por el suelo. Mi entrenador tomó una bolsa y sacó un teléfono

-el último día de actividad en este móvil fue ayer

Se me revolvía el estómago, quería correr aunque los escombros me lo impedían, por lo que empecé a trepar y Ed detrás de mi me seguía, llamábamos buscando a alguien por si había quedado atrapado algún profesor o alumno. Avanzamos lentamente y con cuidado por lo que pudiera derrumbarse o por si oíamos a alguien a lo lejos.

Nada. Una hora y media llevábamos en aquella misión y no encontramos nada, Ed dio la vuelta para llegar a lo que una vez había sido la cafetería y me tendió la mano para cruzar sobre algunos pedazos de concreto y vidrio. Había una especie de muralla hecha del edificio contiguo que se había desplomado y tuvimos que trepar para poder ver del otro lado. Cuando llegamos a la cima y logramos cruzarla no pude mas que contener el aliento.

-¿Pero que demonios pasó?

Varios alumnos que llegué a conocer al igual que maestros se encontraban esparcidos en el suelo, ahora yacían inmóviles sobre lo que fuera una de las canchas. Sangre salpicaba el panorama entre ellos. El horror me invadía y al mismo tiempo no podía dejar de mirar, deseaba con todas mis fuerzas no encontrar en aquel cementerio a mis amigos. Cuando reaccioné, comenzamos a caminar observando aquella masacre más de cerca, unos tenían lápices en los ojos, otros estaban molidos a golpes, otros más estaban atravesados por ramas o destrozados de la cabeza con los sesos desparramados ¿como había podido suceder esto?

-¿Quien ha sido? ¿como es que les hicieron esto?

Un ruido a un costado me sobresaltó enmudeciéndonos. Ed y yo nos pusimos en alerta y con armas en mano nos dirigimos al origen de aquel sonido peculiar, levantamos entre ambos una pieza de concreto y quitamos algunos cacharros para dejarnos vía libre a un pequeño pasillo a medio caer

-¿Pris?- una figura temblorosa y encorvada se reveló ante nosotros

-Ed... ¡oh por Dios! que bueno que estás bien- lanzándose a su cuello para abrazarlo- creí que estabas con los demás. 

-Pris, pris.. tranquila ¿Ethan y Ren están bien?- la pelirroja se despegó de Ed, bajó la cabeza y negó con tristeza

-Solo pude encontrar a Reni pero está lastimada, no se puede mover y tampoco ve muy bien pues perdió sus lentes en la huida, no hemos podido salir de aquí por que ella no se puede levantar. Yo no soy lo suficientemente fuerte para mover todo aquello y no podemos trepar por allá- señalando el lugar de donde veníamos. En ese momento pareció percatarse de mi presencia y sus ojos parecían que iban a saltarse

Nadja y el secreto del halcónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora