Catra soltó un gruñido al escuchar la alarma que avisaba a todos los capitanes y cadetes que un nuevo día de entrenamiento había comenzado.
Se levantó con pereza de su cama y miró a su alrededor, la rubia dormía plácidamente a su lado, provocando un intenso sonrojo en la morena.
Esta sin más se levantó y entró a su baño individual que casi nunca usaba, se tomó una rápida ducha e hizo su aseo personal, para después vestirse y salir de nuevo a su habitación.
Adora ya estaba despierta y jugueteando con las sábanas de la cama, pero al ver a Catra, soltó una risita y se acercó a la morena para dejar un pequeño beso en los labios de ésta.
- ¡Buen día! - exclamó con una gran sonrisa, la cual hizo crecer una en el rostro de Catra.
Aunque nunca lo diría en voz alta, era lindo despertar así.
- Escucha Adora, tengo que salir a entrenar a esa bola de inútiles entonces... -
- Tengo que esconderme y guardar silencio si alguien se acerca - respondió rápidamente la rubia interrumpiendo a Catra.
- Vaya, al menos recuerdas algo… Qué bien - sonrió la felina para después soltar un largo suspiro.
La verdad es que la morena ya había estado pensando en los amigos de Adora, quizá ya no faltaba tanto tiempo para que vinieran al rescate de la rubia y Catra sabía de antemano que si Adora volvía a su forma normal, no recordaría nada de lo que habían pasado juntas y volverían a ser enemigas, eso la estresaba y le hacía sentir una opresión extraña en el pecho.
Salió de sus pensamientos al sentir el cuerpo de la rubia juntarse con el suyo, Adora de alguna manera había sentido la tristeza de Catra y creía que podía repararlo con un abrazo, la morena dudó un poco pero al final le correspondió, almenos el tiempo que les quedaba juntas lo aprovecharía al máximo.
Un pequeño golpeteo las distrajo, haciendo sobresaltar a Catra, Adora rápidamente se separó de la felina y se escondió bajó la cama.
- ¿S-si? ¿Quién es? - respondió Catra un poco nerviosa.
- ¿Catra? - al escuchar la voz de la peliblanca, Catra se relajó para después fruncir el ceño.
- ¿Qué quieres Scorpia? - preguntó de mala gana, abriendo la puerta para encontrarse con Scorpia, esta entró rápidamente y cerró la puerta.
- Ten… - sacó de su pantalón la espada de Adora y el disco de Entrapta, Catra rápidamente le quitó la espada de las manos, olvidándose del disco.
- ¿Qué haces con esto? Ah… es verdad, la tomaste cuando entraste a mi habitación, la cual dejaste sin llave, haciendo que Adora saliese ¿Estoy mal? -
Scorpia se asustó al recordar aquello.
- Oh no, lo siento mucho Catra ¿qué ocurrió?, ¿te descubrieron? - preguntó rápidamente Scorpia muy preocupada.
- No, pero no gracias a ti... ¿Sabes? Estas comenzado a molestarme Scorpia, últimamente no haces nada más que arruinar mis planes, si esto continúa así, no me dejaras otra opción que sacarte del camino - le advirtió la felina a la peliblanca fríamente, haciendo que algo dentro de esta última se rompiera.
- Oh, entiendo… Lo siento mucho Catra - y sin más salió de la habitación con la cabeza gacha.
Catra soltó un bufido, masajeando un poco su sien, toda esta situación le molestaba.
- Wow… Eso fue cruel - Adora quién había salido de su escondite después de que Scorpia se fue, ahora se encontraba sentada en la cama mirando a Catra.
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My Foolish Love
FanfictionScorpia encuentra un disco infectado de Entrapta y se le ocurre una gran idea para poder juntar a las dos ex-amigas tóxicas: Catra y Adora; de una vez por todas.