Su amor estaba prohibido... Era incorrecto... Pero el amor que ellos se tenían era tan puro y sincero, que no importaba si estaba prohibido...
Ella, dulce y amable, pertenecía a una pequeña pero fuerte raza...
Él, frío y sanguinario, pertenecía a l...
Oigan antes de empezar quiero decirles que en mi ig: riascat.hightclassshinigami Estaré subiendo cosas de mis fanfics como dibujos que estoy haciendo de este fic. Hoy subiré el primero al mediodía, las primeras tres personas que me comente en la publicación se ganará una dedicatoria para un dibujo que estoy haciendo de (Tn_) y Ludociel basándome en el manga y le haré también al primer lugar un dibujo de lo que me pida, sólo tengan consideración con algo que no sea muy complicado uwu. Ahora si, empecemos. Pliz síganme.
(Tn_)
Fui volando al castillo, donde sentía a Ellie, Meliodas y Ban, aunque a este lo sentía algo lejos de Meliodas y Elizabeth.
Algo muy extraño sucedía, los Caballeros Sacros de la nueva generación empezaban a descontrolarse, era como si la sangre de demonio que habían bebido estuviera descontrolandose, no... Más bien era como si la hubieran...activado...
Cuando llegué me tope con una escena sorprendente, allí estaba Hendrickson con un montón de marcas que reconocí como marcas demoníacas cubriendolo, mientras que Meliodas le rogaba a Elizabeth que no fuera con él, pero ella seguía caminando.
Elizabeth: Meliodas-sama... *Le dijo deteniéndose y miró a Meliodas* por esta vez, deja que sea yo quien te proteja... Hicimos una promesa, ¿recuerdas?
Meliodas: ¡¡ELIZABETH!! *gritó con desesperación*
Yo suspiré, definitivamente no importa cuántas veces Ellie reencarne, ella sigue siendo esa persona tan noble que conocí.
Yo: disculpa... *Llamé a Hendrickson poniéndome entre él y Meliodas* ¿Te molestaría soltar a Elizabeth? *Pedí, sentí como Ellie y Meliodas me miraban con sorpresa* de lo contrario me veré obligada a atacarte...
Hendrickson: ¿Y tu me detendrás? Eres una niña torpe *me dijo y yo fruncí el ceño*
Yo: permíteme corregirte, yo solo aparento ser una niña, pero yo tengo más del doble de tu edad *dije y cambie la forma de mi arma*Cetro Maldito Canfyddiad, Forma Cinco: Látigo Rubí
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Yo: *con un movimiento del Látigo tome a Elizabeth de la cintura y la alejé de Hendrickson* Elizabeth, vete...
Hendrickson: vaya me siento impresionado por este ataque repentino *dijo el albino y me apunto con su espada* fue impresionante, pero no lo suficiente, ¡Ola Ácida!
Yo: ¡Maldición! *Exclamé y empujé a Elizabeth para que no saliera dañada por el ataque*
Sin embargo, yo recibí todo el impacto, ni siquiera hubo tiempo suficiente para que Canfyddiad me cubriera para protegerme.