32

8.1K 661 311
                                    

(Tn_)

Luego de esa perturbadora experiencia con los maestros de Zeldris y de Meliodas regresé al interior del castillo corriendo, razón por la que me caí un par de veces, al entrar en el castillo yo suspiré un poco aliviada, esos dos me habían dado mucho miedo... Seguí mi camino para salir de la sala del trono(donde me encontraba ahora) e ir a la habitación que Zeldris me había asignado, pero antes de que llegará a la puerta un hombre de cabellos plateados, que rápidamente reconocí como un demonio y me miró con intriga, también parecía disgustado.

- Tu... -Dijo acercándose a mi, yo retrocedi un par de paso y allí sentí como me tomaba del cuello alzandome del suelo- tu eres la mocosa Medusa que estaba con Meliodas y sus aliados, ¿verdad? -Pregunto y yo no le contesté, ya que no recordaba mucho y no sabía si era verdad o mentira- ¡¿Verdad?! -Exigió saber-

Yo: ¡N-no lo sé! *Contesté asustada* ¡Te digo la verdad, no recuerdo casi nada! *Dije sinceramente*

Él parecía no creer en lo que le decía, lucía enojado, y pude sentir como apretaba el agarre sobre mi cuello...

Cómo reflejo trate de comunicarme con Zeldris, no se si lo haya logrado...

Yo: Zel... Ayúdame Zeldris... *lo llamé sintiendo como me costaba cada vez más respirar*

Narrador

El demonio de cabellos negros oyó el llamado de la albina y se dirigió al interior del castillo con rapidez, siendo seguido por Cusak, él cual estaba extrañado por el comportamiento de su alumno.

Al entrar a la sala del trono, el pelinegro observó enojado como el peliplateado tomaba a la albina del cuello asfixiandola, la reacción inmediata de Zeldris fue golpear a Estarrosa en el rostro, lo que ocasionó que este retrocediera un poco y soltará a la ojirrosa.

Zeldris: ¡Aléjate de mi mujer Estarrosa! *Advirtió el pelinegro con enojó*

" - ¿Cómo se había atrevido a ponerle una mano encima a SU mujer? - " fue el pensamiento que cruzó por la cabeza de Zeldris, fue allí que notó lo que había dicho.

¿Su mujer? Ciertamente, así es como Zeldris consideraba a (Tn_),  pero técnicamente, ellos nunca fueron pareja de manera formal, aunque no era necesario para saber que se querían, pero nunca pensó que reaccionaría de esa manera.

Estarrosa: ¿Esa niña es tu mujer, Zel? *Pregunto con algo de desprecio el peliplateado* mientras no traicione nuestro propósito no me importa para que la quieras, pero... *Dijo y miró a la albina quien aún estaba en shock por lo que Zeldris había dicho* si me fastidia la mataré...

Zeldris: tocala y me encargaré yo mismo de matarte *amenazó el pelinegro ahora largo de aquí Estarrosa *ordenó, el más alto suspiro y se fue, no quiere pelear con su hermano menor por una mujer, mucho menos en ese momento*

« ¡Dijo que soy su mujer! ¡Ay que lindo! » pensó la albina sonrojada por lo dicho por Zeldris, aún en su ensoñación.

La albina agito levemente su cabeza y se levantó del suelo.

Cusak: ¡Zeldris-sama! ¡¿Qué dice?! ¿Realmente esa niña es su mujer? *Pregunto sorprendido, viendo con desagrado a la albina* oye mocosa aléjate de Zeldris-sama *dijo al ver como la albina se acercaba al príncipe demonio*

Zeldris: ¿Te encuentras bien? *Pregunto preocupado por la menor y observó su cuello, ella tenía una gran marca que dejaba claro que allí era donde Estarrosa la había agarrado* maldición, tienes un moretón, debí acompañarte...

(Tn_): no te preocupes Zel... Estaré bien *dijo la menor, tomando la mano del pelinegro*

Zeldris: ¿Cómo quieres que no me preocupe? Te dije que te protegería y ahora estás herida... No cumplí con lo que te prometí *dijo frustrado el pelinegro*

(Tn_): uhm... Hablando de cosas que dijiste *empezó la albina y miró al Verdugo* ¡¿Podrías repetirlo?! *Pregunto emocionada*

Zeldris: N-no se de que me hablas *dijo nervioso el azabache, pues sabía a qué se refería la menor* ¡No te acerques tanto! *Reclamó al ver como la menor se acercó a él viéndolo fijamente*

« Esa niña... Puede ser un gran problema en el futuro... Lo mejor será que me deshaga de ella cuanto antes, pero parece que Zeldris-sama no se apartará de su lado... Maldita niña, tienes demasiada suerte »  Pensó el pelirrosa observando a la menor con el ceño fruncido, debía encontrar una forma de deshacerse de esa niña sin que su aprendiz se diera cuenta « ¡¿Pero qué hace?! » pensó alarmada al ver como la más baja daba un beso en los labios del pelinegro, causando un sonrojó en el rostro del príncipe, y no sólo eso, sino que también repetía la acción varias veces.

Zeldris: ¡Ya deja de hacer eso! ¡Es penoso! *Dijo el pelinegro avergonzado ante lo que hacía la menor*

(Tn_): primero repite lo que dijiste~ *dijo la menor burlándose un poco, pero sólo recibió una mala mirada por parte del demonio* ¡Por favor, haré lo que me pidas! *Pidió la más baja*

Zeldris: uhm cuidado con lo que dices princesa *dijo el pelinegro tomando a la menor de la cintura y acercando su rostro al de la menor con toda la intención de besarla, pero fueron interrumpidos por una toz falsa hecha por Cusak, quien estaba notablemente disconforme con la escena* ¿Qué quieres, Cusak? *Musitó el pelinegro con algo de rabia*

(Tn_): olvide que estaba allí... Dios que vergüenza *dijo completamente sonrojada la menor, escondiendo su rostro en el pecho del pelinegro con notable vergüenza, aunque en eso se equivocaba, Cusak había ido a hacer un té y había regresado a donde estaban*

Cusak: Chandler se encuentra luchando ahora mismo con un grupo de personas, de distintas razas... *Informó el pelirrosa* son unos seis, no, siete sin contar a Meliodas

Zeldris: así que siete, ¿eh? Deben ser los Siete Pecados Capitales *dedujo el Mandamiento para luego probar el té que le ofrecía su maestro* es terrible Cusak *dijo refiriéndose al té*

(Tn_): iré a hacerte un té Zeldris *dijo la albina y se separó del pelinegro* ¿Me presta eso por favor? *Pregunto al pelirrosa quien de mala gana le dió el carrito que llevaba* muchas gracias señor Cusak *agradeció para luego retirarse del lugar empujando el carrito mientras que Zeldris y Cusak continuaban con su conversación*

Me And You « Zeldris y Tu »Donde viven las historias. Descúbrelo ahora